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11 de Septiembre

¡Yo acuso al régimen de Bush!

Fuentes: En Defensa de la Humanidad

«Política sin moral, es indignidad: cualquier juego de azar, siendo tan indigno como es el juego, es más digno que la política divorciada de la moral, porque, al menos, en sus lances repugnantes no aventura más moralidad que la del jugador y sus cómplices. Pero el político inmoral aventura con su ejemplo la moralidad pública […]

«Política sin moral, es indignidad: cualquier juego de azar, siendo tan indigno como es el juego, es más digno que la política divorciada de la moral, porque, al menos, en sus lances repugnantes no aventura más moralidad que la del jugador y sus cómplices. Pero el político inmoral aventura con su ejemplo la moralidad pública y privada de su patria».

Eugenio María de Hostos

I-Introducción:

Estamos en la recordación del quinto aniversario del 11 de septiembre (11-S) ocurrido aquí en Estados Unidos y todavía el régimen cristiano-fascista-sionista de Bush nos mantiene con más preguntas que respuestas y más mentiras que verdades sobre lo ocurrido. Pero antes de adentrarnos en este escrito me gustaría poder aclarar desde el principio dos verdades las cuales me parecen de gran trascendencia.

Primero, no nos confundamos, Bush no es estúpido, el utiliza muy sabiamente la estrategia de gobernar estúpidamente. O sea, juega al pendejo y de pendejo no tiene nada. Tampoco es bruto, sino que gobierna salvajemente con la intención de confundir. Como representante de los intereses de la clase dominante, Bush es muy calculador, consistente, malicioso y persistente cuando tiene que defender, preservar y patrocinar estos intereses. Estas son algunas razones por las cuales la clase dominante lo escogió como parte de la clase gobernante.

Segundo, en el gobernar estúpidamente y salvajemente, existe la intención calculada de no permitírsenos el que podamos ver los rostros de una serie de personas y/o instituciones que producen la agenda de gobierno que él como marioneta política debe de implementar. De aquí la necesidad de poder entender como es que aquí en Estados Unidos la clase gobernante implementa la agenda de gobierno de la clase dominante. Permítanme darle dos ejemplos. El primero aquí en Estados Unidos. Políticamente hablando, ¿que diferencia existe entre George W. Bush y Hillary Clinton? Políticamente hablando ninguna, porque ambos responden a los intereses de la clase dominante. Bush dentro de su rudeza de vaquero frustrado y Hillary dentro de su refinamiento de Barbie malograda tienen una agenda contraria al pueblo. Para el otro ejemplo desplacémonos a mi segunda patria, la tierra de Mamá Tingó, la República Dominicana. ¿Qué diferencia hay entre un supuesto bruto llamado Hipólito Mejía y un supuesto intelectual llamado Leonel Fernández? Ninguna, el pueblo estaba jodido bajo la presidencia de Mejía y sigue jodido bajo la presidencia de Leonel. ¿Por qué? Porque uno con su brutalidad y el otro con su intelectualidad, son dos sirvientes de la clase dominante dominicana y mandaderos de la política intervencionista de Estados Unidos. O sea, ambos son enemigos del pueblo. De aquí la necesidad, en este asunto del 11-S, de no individualizar y comenzar a hablar de un régimen político. ¡Esto es mucho más grande que Bush!

De aquí también el poder tener claro que las políticas del régimen de Bush, al responder a los intereses de la clase dominante, se tienden a proyectar como un nuevo orden mundial. Este viejo orden fue el que Ronald Reagan y George Bush padre, contra su política militarista y expansionista nos trataron de meter por boca y nariz. Observe cuidadosamente como todo@s l@s asesor@s del Presidente Bush vienen de la escuela de Reagan y Bush padre. O sea, el diablo l@s cría y ell@s se juntan.

Este viejo orden, en donde las acumulaciones de ganancias económicas de unas corporaciones están por encima de la inversión social en el pueblo, se distingue por su capacidad monstruosa de explotación, opresión y exclusión. Este viejo orden de la gente rica sigue amurallado en la trinchera del capitalismo neoliberal utilizando sus armas: Guerras de agresión o preventivas; torturas y detenciones indefinidas; destrucción del ambiente global; ataques contra los derechos reproductivos y la salud pública internacional; secuestros de personas y mantenerles en cárceles militares secretas; mentir; establecer una teocracia cristiana-sionista; violación a los derechos humanaos y civiles; espionaje cibernético; campaña xenofóbica contra inmigrantes indocumentad@s; criminalización de la religión islámica; tergiversación oportunista de la religión cristiana; demonización de las comunidades árabes; etc. Dentro de este operativo de guerra contra la humanidad y de hegemonía política, Estados Unidos está haciendo todo lo que puede para debilitar a la nueva Corte Penal Internacional (COI), la cual es un tribunal permanente mundial con capacidad para procesar a toda persona que cometa los crímenes que él y su régimen de gobierno están cometiendo: actos de genocidio, crímenes de guerra o crímenes contra la humanidad.

También podemos sumarle a sus crímenes la manera tan absurda de cómo después del 11-S el régimen de Bush aumentó la violación e intervención de soberanías nacionales. Menciono solo tres en esta ocasión. Comencemos con Venezuela en donde han surgido nuevas acusaciones contra el régimen de Bush de pretender lograr un cambio de gobierno en Venezuela por uno que pueda responder a sus intereses.

La Associated Press logró obtener una serie de documentos «secretos» los cuales muestran que la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés) le otorgó más de 26 millones de dólares a opositores del presidente Hugo Chávez en los últimos cuatro años. Esto una vez más corrobora que la verdadera oposición al gobierno Bolivariano lo sigue siendo el gobierno de Estados Unidos. Por otro lado, tenemos a Cuba y el documento dizque de transición de gobierno que el gobierno de Washington preparó y en el cual admite el dar unos 80 millones de dólares a grupos que tengan la capacidad de desactivar al gobierno cubano, esto incluye acciones terroristas, hasta lograr un cambio de gobierno por uno que responda a los intereses de Washington.

El tercer ejemplo lo es mi patria Puerto Rico, la colonia más importante del imperio más poderoso del mundo. La violación de nuestra soberanía nacional es tan seria que este 23 de septiembre se cumple el primer aniversario del asesinato de Filiberto Ojeda Ríos, Comandante del Ejército Popular Boricua-Macheteros, y ya el régimen de Bush a través del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) con un informe desvergonzado exoneró al FBI y justificó el asesinato de este líder del movimiento descolonizador e independentista de Puerto Rico.



II-Después del 11-S:

Aclarado esto, entonces nos podemos preguntar, ¿qué ha pasado con el régimen de Bush después del 11-S de 2001? El panorama socio-político después de cinco años nos pone de frente a tres teorías de conspiración, una del gobierno y dos del pueblo, de lo ocurrido el 11- S.

A-El 11-S con sus teorías de conspiración

Una teoría de conspiración, la del gobierno, nos dice que Osama bin Laden es la persona responsable de estos atentados. Luego se sumó a esta versión del gobierno que Saddam Hussein es la persona causante de las acciones terroristas del 11-S; que Irak tenía armas de destrucción masiva; y que esta gente tenía planes de utilizar estas armas contra el pueblo de Estados Unidos. De aquí el declararle la guerra, comenzando por Afganistán y pasando luego por Irak. Hay que señalar que las acusaciones originales para llevarnos a estas guerras ilegales e inmorales fueron descartadas por información concreta, pero las mismas mentiras se siguen manufacturando como medidas ideológicas de control social con la intención de fabricar una opinión popular. Aquí los medios de comunicación, los cuales responden a los intereses del capitalismo corporativo, realizaron una labor increíble de fabricar un consenso popular a través de la desinformación, manipulación de la información y de la mentira. Al extremo de autocensurarse y no realizar críticas contra el régimen de Bush porque alguien dijo que esto es antipatriótico. ¡Vaya patriotismo despabilado el que se inventan en este país!

La segunda teoría de conspiración nos dice que el gobierno de Estados Unidos plantó explosivos en las Torres Gemelas con la intención de más adelante acusar a Osama bin Laden y a Saldan Hussein. Y por supuesto, esto fue una buena oportunidad para alimentar el dolor del pueblo y a la misma vez su venganza con acciones bélicas bajo el banderín del patriotismo blandengue que nos quiere hacer creer que estas cosas suceden porque hay gente que odia nuestra democracia.

La tercera teoría de conspiración surge dentro del contexto de Pearl Harbor. O sea, el gobierno de Estados Unidos similar a Pearl Harbor (7de diciembre de 1947) sabía de antemano, a través de su sistema de inteligencia, que los japoneses iban a lanzar un ataque militar a la base militar de Pearl Harbor, no hicieron nada y esto incluye el no alertar a sus soldados dejándoles morir. Este «sacrificio nacional» se utilizó como justificación para ir a una guerra contra Japón y a la misma vez lanzar y poner en prueba la capacidad de destrucción de la bomba atómica. Este tipo de acciones también se trató de utilizar contra Cuba en los años de 1960 cuando se planificó el poner una serie de bombas contra civiles aquí en Estados Unidos con la intención posterior de echarle la culpa al gobierno revolucionario de Cuba y de esta manera justificar una invasión. O sea, en esta tercera teoría de conspiración se sostiene que el gobierno sabía muy bien lo que iba a suceder el 11 de septiembre de 2001 pero no lo detuvo porque era una buena oportunidad para justificar su agenda imperialista, colonialista y expansionista a través de acciones militares. Aunque, nos dice esta teoría, que esta gente del régimen de Bush no tenía claro el impacto de destrucción humana y material de los atentados.

B-El 11-S y el negocio lucrativo del aparato militar:

De aquí el que acuso el gobierno de Bush de terrorismo militar porque en todas estas teorías el resultado es el mismo: que Estados Unidos pueda establecer en el mundo una dictadura militar, política y económica. De aquí las invasiones a Afganistán e Irak y las pretensiones de poder invadir a Irán, Corea del Norte, Venezuela y a Cuba, poniendo gobiernos títeres que respondan a sus intereses. De nuevo, las acciones terroristas del 11-S fueron y siguen siendo utilizadas por el régimen totalitario de Bush para llevar a cabo campañas bélicas de terror dizque contra el terrorismo. Para estas acciones militares de poder luchar dizque contra el terrorismo su régimen de gobierno está proponiendo para el año 2007 un presupuesto de $470 billones de dólares para el Pentágono. Esto no incluye los presupuestos de otras agencias de gobierno como por ejemplo la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés).

Véalo de esta manera, en sus acciones guerreras este gobierno con la excusa del 11-S gasta más o menos unos $776 billones de dólares al año en acciones y/o materiales militares. En arroz y habichuelas esto significa que cada un minuto que pasa esta gente gasta un poco mas de un millón de dólares. En gastos acumulativos, quienes saben mucho de estos asuntos no han dicho que desde el 1948 el gobierno de Estados Unidos ha gastado unos $15 trillones de dólares en asuntos militares. Mientras tanto no hay servicios médicos o educativos adecuados, el desempleo sigue creciendo, los salarios no responden al costo de vida, obtener
una vivienda está prácticamente prohibido, etc. Por otro lado la industria de prisiones sigue creciendo y cada vez tenemos más cárceles y más policías y menos escuelas, hospitales, maestr@s y doctor@s. O sea, luego del 11-S, este régimen de Bush agudizó la política de no invertir socialmente para mejorar la calidad de vida del pueblo, mientras tanto, tiene dinero para enriquecer a unas corporaciones las cuales cada día se hacen más ricas.

Tome por ejemplo el historial del Vice-presidente de Estados Unidos, Dick Cheney. Este señor en cuatro ocasiones evadió el ir a la guerra de Vietnam. Como Secretario de Defensa del gobierno de George H. W. Bush, padre, nos llevó a guerras contra Panamá y Afganistán y ahora bajo el gobierno de Bush hijo está involucrado en las guerras de invasión contra Afganistán e Irak y sigue buscando como la manera de declararle una guerra a otros países: Irán, Corea del Norte, Venezuela y Cuba, por solo mencionar algunos. Similar a Bush, a este señor le encantan las guerras como estrategias de producción de ganancias económicas, pero que las peleen otr@s. Para este señor, guerras significan ganancias y acumulación económicas.

Curiosamente, directa o indirectamente Cheney tiene sus manos por lo menos en dos empresas que están envueltas en asuntos militares. Por un lado está Halliburton, en donde él tiene acciones por unos $45 millones de dólares y de la cual era su administrador hasta que llegó a la vice-presidencia. Los contratos millonarios de esta empresa en la reconstrucción de Irak son alarmantes y dan muestras de conflictos de intereses al ser el presidente que funciona con el título de vice-presidente. Con la excusa del 11-S esta gente destruye y luego reconstruye y se hacen multimillonarios explotando el dolor del pueblo. Y por otro lado está Lockheed Martin, en donde su esposa Lynne Cheney es parte de la junta de director@s. Esta es la empresa que logró obtener un contrato del gobierno por cientos de millones de dólares para la construcción de aviones de guerra los cuales se usaran dizque para la defensa de la nación.

El 11-S le sigue ofreciendo a otras empresas estadounidenses contratos jugosos los cuales son orquestados en la formula polito-militar de primeramente declarar una guerra, luego destruir con bombas lo que existe en un país y posteriormente envían a esta empresas con contratos millonarios a reconstruir lo que destruyeron. En este negocio está TRW ($14 billones), Boeing ($11.6 millones), General Dynamics ($4.6 millones) y Reytheon ($6.4 millones), entre otras. Este círculo cerrado de nuestro sistema capitalista le permite a esta gente seguir haciéndose ricos pero necesitan guerras para generar mayores ingresos. Yo acuso al gobierno de Bush de promover este tipo de explotación humana, lo cual es lo mismo que realizar crímenes contra la humanidad.

C-El 11-S y el hambre como arma de destrucción masiva:

Mientras tanto, y para no ir muy lejos, 1 de cada 8 personas en Estados Unidos vive en la pobreza. O sea, en el país más rico del mundo tenemos un@s 37 millones de personas viviendo en la pobreza, mendigando lo que van a comer cada día. Religiosamente esto es un pecado capital y políticamente esto es un terrorismo de estado en donde se utiliza el arma de destrucción masiva más potente que tenemos en el mundo: el hambre.

¿Por qué coño Bush no sale a destruir a este terrorismo y se deja de tanta hipocresía? Porque él es culpable de estos crímenes contra la humanidad. Y después se da en el pecho con una Biblia y sus oraciones y no sale de la Iglesia porque ese es el lugar en donde Dios está. ¿Cuándo este nefasto entenderá que hace rato está bombardeando a nuestra Diosa en Afganistán y en Irak y le está matando de hambre aquí en Estados Unidos?

Este tipo de cristianismo me da repugnancia, porque es como le dijo Jesús a sus discípul@s: este pueblo solo me alaba de labios, pero su corazón está muy lejos de mí. Prefiero mil veces gentes ateas con la práctica de la solidaridad radical, que a una persona religiosa enemiga de la justicia. A la verdad que este 11-S se ha convertido en una muy buena excusa para que el régimen de Bush pueda ocultar verdades y promover mentiras para su beneficio. Y todavía hay gente que en verdad cree que él es el paladín de la democracia en la lucha contra el terrorismo. ¿Cuándo se darán cuanta que el Presidente de Estados Unidos y su régimen político, es una organización terrorista? Esta gente inventa el terror, promueve el terror, mercadea el terror, bendice el terror, esparce el terror, alimenta el terror y mata por ese terror.

Por esto, este 11-S yo acuso a Bush y a su régimen tiránico de cometer crímenes contra la humanidad.

Estamos diciendo que en el mundo, unas 46 millones de personas mueren cada año porque no tienen algo para comer o por malnutrición. Este mal del capitalismo puede ser erradicado con una distribución equitativa de los recursos que Dios nos dio en vez de unos pocos seguir acumulando. ¿Por qué coñazo Bush no para ya de utilizar convenientemente al 11-S y se deja de tantas payasadas y sale a destruir estas armas de destrucción masiva? Porque él es culpable de estos crímenes contra la humanidad.

De aquí el que en este 5to. aniversario del 11-S yo acuso al gobierno de Bush de seguir convirtiéndose en un régimen de fanatismo cristiano, de orquestar una dictadura fascista, de promover un expansionismo militarista y de bendecir el terrorismo sionista. El 11-S también ha sido una excusa para este gobierno teocrático de montar una agenda en contra de los derechos reproductivos de la mujer, en particular el derecho al aborto; lanzar una campaña desinformativa concerniente al VIH/SIDA diciéndonos que la abstención sexual es la cura para el SIDA; y que la homosexualidad, la prostitución y el usar drogas son las razones para contraer el VIH/SIDA. Mientras tanto, cada día que pasa este régimen de gobierno le sigue quitando dinero a los servicios que debemos ofrecer a personas con el VIH/SIDA y no se invierten los billones que se invierten en asuntos militares para poder encontrar la cura para este mal.

Asimismo acuso al régimen de Bush de utilizar al 11-S para promover un pánico colectivo a través de una guerra psicológica en donde se ha mercadeado la mentira que los/as inmigrantes son responsables de las acciones terroristas que ocurren aquí en Estados Unidos. Esta xenofobia es la que se sigue utilizando en contra de la campaña de una amnistía general para las/os inmigrantes indocumentadas/os.

D-El 11-S y el llamado al borrón y cuenta nueva

Igualmente acuso al régimen de Bush de justificar con el 11-S arrestos, secuestros, torturas, desapariciones y asesinatos, o sea, de crímenes contra la humanidad. Estos crímenes de guerra, genocidio u holocausto contra pueblos como el de Afganistán y de Irak, o su participación indirecta en los crímenes de guerra contra los pueblos palestinos y libaneses protegiendo y armando al gobierno de Israel, no deben de quedar impunes. En estos días y por primera, Bush apareció en televisión con una actitud muy apologética y cara de niño arrepentido.

Yo, a la verdad que no sé cuanta hipocresía o cuanta sinceridad hay en sus palabras y/o acciones. Pero si el asunto es serio, entonces debemos de comenzar a hablar de la restitución de la justicia, en donde nunca se le quita la responsabilidad y las consecuencias a quienes han cometido un crimen. Por lo tanto, en el proceso de la restitución, su renuncia como presidente incompetente y criminal de Estados Unidos debe de ser la prioridad.

Luego debe de aceptar sus errores y recibir las consecuencias. Yo no sé usted, pero usando el vocabulario del pueblo, aquí, ¡coño, alguien debe de ir a la cárcel!.

Les confieso que yo le tengo mucho medio y siempre trato con mucha sospecha los llamados a los procesos de reconciliación cuando estos vienen de parte de quienes representan la opresión. Por lo general esta gente viene con un discurso abusivo de borrón y cuenta nueva. Mire estos disparates de comisiones de la verdad en Argentina, Chile, Guatemala, etc. Todo esto fue un teatro y un circo político para engañar al pueblo y proteger a los criminales. Yo soy fiel creyente que quien tiene el único derecho de pedir el borrón y cuenta nueva son las víctimas, no los opresores.

Por lo tanto, por ahora vamos a preguntarle a las víctimas de Irak, Afganistán, de Cuba, de Venezuela, y de Estados Unidos, muy en particular a los sobrevivientes de Katrina, a los familiares de las victimas de las Torres Gemelas, a los empleados que se contaminaran patrióticamente limpiando, sean estos policías, bomberos, recogedores de basura, etc., si quieren borrón y cuenta nueva o si quieren la restitución de la justicia y quien rompió los platos que los pague.

III-Conclusión:

Por todo esto y más, saquemos a este régimen totalitario del poder y comencemos tomando las calles este 5 de octubre cuando llevaremos a cabo demostraciones nacionales demandando la renuncia, arresto y enjuiciamiento de estos asesinos por crímenes contra la humanidad. Para más información: www.worldcantwait.org

En otras palabras, desde hoy rompamos el silencio que nos convierte en partícipes de tanta injusticia. Vamos a llenarnos de valor y salgamos a la calle en protesta contra este régimen político. Organicemos al pueblo y vamos a movilizarles para que encuentre su liberación. Y por supuesto, sigamos pidiendo que se reabra la investigación para que en verdad podamos saber que fue lo que sucedió el 11-S y la manera tan irresponsable que este régimen político de Bush respondió a esta crisis nacional.

Acusemos al régimen de Bush y demostremos que es posible construir la paz con justicia.

Luis Barrios es sacerdote
Iglesia San Romero de Las Américas
New York, New York
[email protected]