Entre los compañeros militares que conozco (al margen de los pertenecientes al colectivo de Anemoi al que pertenezco) muchos en situación de reserva o jubilación, mantengo una excelente relación con algunos, no muchos, en los que percibo una moderada sensibilidad democrática, y en algún caso, democrática del todo.
Un aniversario como el que hoy se conmemora, no debería pasar desapercibido para un militar demócrata, recordando que fue precisamente el colectivo militar más progresista de Portugal, el que inició la Revolución de los Claveles que acabó resuelta y pacíficamente -pero con las armas en la mano-, con la dictadura de Oliveira Salazar. Sin embargo yo no he percibido ninguna señal ni gesto alguno de recuerdo de esa fecha, por lo que parte de ningún ex uniformado.
Uno de estos «ex» referidos es mi buen amigo Paco, compañero paracaidista, ecologista activo, pluri deportista, padre de una prole encantadora, y buena persona por encima de todo.
Le he enviado esta mañana mi primer mensaje, que estaría encantado de compartir con vosotros a modo de buenos días colectivo.
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Amigo Paco.
Todo, vídeos graciosos, con mala baba y con falsas informaciones, los chistes, el agitar de banderas o vírgenes procesionando con el trasfondo del coronavirus, himnos nacionales, carasoles y novios de la muerte, con policías y militares en primer tiempo de saludo, todo, repito, forma parte de una campaña de acoso y derribo del actual gobierno de coalición, caso único en la Europa occidental, en que todos los partidos forman piña para hacer frente a esta tragedia nacional, como Italia donde es tradicional la gresca continua entre derecha e izquierda, que han convenido una tregua, o que en Francia todos los partidos se hayan posicionado con el gobierno de Macron, con la única excepción, como era de esperar, de la extremísima derecha de Le Pen; lo mismo sucede en Inglaterra, e igual pasa en Alemania, donde socialdemócratas y cristianodemócratas han firmado la paz para dedicar todas sus energías en torno a Merkel, para afrontar todos juntos la pandemia.
Lo mismo que en Portugal y Grecia.
España es la excepción, en donde las tres derechas se han coaligado para hacer de esta desgracia nacional causa común, para erosionar al gobierno con su juego sucio para hacerle caer, convocar nuevas elecciones, y colocarse en el gobierno, en mitad de una catástrofe sanitario-económica, bajo la batuta belicosa y condicionante de Vox.
Amigo Paco, a mí me da una enorme vergüenza vivir en un país en donde hay gente capaz de justificar todo esto.
Y si me tengo que referir a nuestro colectivo militar, como sucede con la Policía y la Guardia corporativamente hablando, da asco, al margen de las actuaciones profesionales que están desarrollando, al igual que lo hacen millones de españoles en primera y segunda línea contra el coronavirus, sin tantas alharacas ni tantas fotos y felicitaciones en los medios.
Floren Dimas. Oficial del EA (R). Miembro del Colectivo Anemoi y ACMYR.