Hace cuatro días, el 14 de Julio, las Fuerzas Armadas francesas desfilaban por los Campos Elíseos, representando a una nación forjada en la Revolución de 1789, como germen de un modelo de sociedad basada en los principios republicanos de libertad, igualdad y fraternidad, e instaurando un nuevo modelo de Nación basada en el respeto a […]
Hace cuatro días, el 14 de Julio, las Fuerzas Armadas francesas desfilaban por los Campos Elíseos, representando a una nación forjada en la Revolución de 1789, como germen de un modelo de sociedad basada en los principios republicanos de libertad, igualdad y fraternidad, e instaurando un nuevo modelo de Nación basada en el respeto a los Derechos del Hombre, génesis de la posterior Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU.
Fuerzas Armadas que enfrentándose al gobierno colaboracionista de Vichy y contra los nazis en la II Guerra Mundial, tienen como referente inmediato la lucha de los civiles y militares que se levantaron contra la ocupación nazi.
Fuerzas Armadas en cuyo organigrama aparecen las asociaciones de excombatientes, entre las que se encuentran los miembros españoles del Maquisard, cuyos miembros condecorados han sido incorporados el legado de honor y ejemplaridad de la Nación francesa.
Pasado mañana, 20 de julio, en la Plaza de Armas del Ministerio de Defensa alemán, tendrá lugar el tradicional acto de homenaje rendido por el Heer, la Marina de guerra, y la Luftwaffe, a los héroes civiles y militares del 20 de Julio que se implicaron en el atentado contra Hitler en la Wolfsschanze, de los que más de 750 fueron ejecutados colgados de cuerdas de piano por orden expresa de Hitler.
Vemos así como países democráticos de nuestro entorno geográfico e histórico, tienen como referentes ejemplarizantes la lucha por la libertad y contra el nazi-fascismo, extendiendo las enseñanzas de un patriotismo democrático en los centros de formación militares y en los rituales propios de las FAS.
Ni el ejército alemán ni el francés, ni ninguno de los de Europa Occidental y Central, son organizaciones democráticas por la propia esencia de sus cometidos, basados en el principio de jerarquía y disciplina, pero imbuidos de la cultura democrática de la sociedad e instituciones a la que rinden sus servicios.
Hoy es 18 de Julio.
Hace 82 años que el Ejército de África y parte de las Fuerzas Armadas acantonadas en la Península, se sublevaron contra el gobierno legal y legítimo de la República, provocando una guerra civil y actuando en ella de forma sistemáticamente contraria a las leyes y usos de la guerra, y en particular contra la Convención de Ginebra, con el fusilamiento de prisioneros y el asesinato masivo de civiles indefensos, promovido por los propios generales sublevados.
Finalizada la guerra y consolidada la dictadura, los altos mandos de las Fuerzas Armadas españolas fueron el principal sostén el régimen de Franco y fallecido éste, constituyeron el soporte armado del franquismo político residual, que sirvió para chantajear a los españoles con el referéndum de 1978 imponiendo como alternativa un franquismo sin Franco o una democracia con Rey.
Unas Fuerzas Armadas en cuyas academias, en la asignatura de Historia Militar, se omite el auténtico significado golpista de la sublevación fascista de 1936, y el patriótico papel desempeñado por el Ejército Popular republicano y la gesta de la guerrilla antifranquista.
Ni una sola palabra sobre la represión de la dictadura y la actuación heroica de la resistencia clandestina, obviando crear una conciencia de subordinación democrática de las Fuerzas Armadas a la voluntad de los españoles, expresada a través del Parlamento, subvirtiéndola por su sometimiento a las órdenes directas de exclusivas del Rey, que detenta el mando exclusivo y último de nuestras FAS.
Un caso único en el mundo, a excepción de Corea del Norte, o (con el papel como interventor del Congreso) de los Estados Unidos.
Llegamos a esta conmemoración lastrados con la complicidad de las FAS, en el soporte de una Monarquía basada en la desigualdad, representada por un ciudadano español que se sitúa por encima de cuarenta y seis millones de compatriotas, disponiendo de su trono como quien regenta de una finca heredada de sus mayores, disfrutando del privilegio de la inmunidad (impunidad) frente a los desafueros cometidos y por cometer.
Hoy es 18 de julio, una fecha para recordar por lo que representa en la historia de la ignominia, el crimen y la injusticia, y el protagonismo insoportable de las FAS como coartada amenazante de un régimen, la Monarquía, impuesta a los españoles en 1978. Día de reivindicar la necesidad de una profunda reconversión de aquellas, en los principios democráticos y en las convenciones internacionales de los Derechos Humanos, con el reconocimiento público y solemne, de los militares y civiles que se comprometieron, lucharon y murieron durante la Guerra Civil, el franquismo, y la Segunda Guerra Mundial, contra la dictadura y el nazi-fascismo.
Floren Dimas, es miembro de Anemoi (Colectivo de militares demócratas españoles) y miembro de la Junta Directiva de ACMYR (Asociación Civil Milicia y República).
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.