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El Embajador de Costa de Marfil en España pide respeto para la soberanía de su país y asegura que no hay peligro de guerra civil

«Francia quiere someter a Costa de Marfil a su antojo»

Fuentes: Guin Guin Bali

El embajador de Costa de Marfil en España, Paul Ayoman, asegura, en una entrevista concedida a GuinGuinBali, que «existe un complot internacional» contra la soberanía de este país encabezado por Francia, cuyo fin último es poder explotar sus recursos naturales a su antojo. «Lo único que pedimos es que se respete nuestra soberanía y nuestra […]

El embajador de Costa de Marfil en España, Paul Ayoman, asegura, en una entrevista concedida a GuinGuinBali, que «existe un complot internacional» contra la soberanía de este país encabezado por Francia, cuyo fin último es poder explotar sus recursos naturales a su antojo. «Lo único que pedimos es que se respete nuestra soberanía y nuestra Constitución, nosotros podemos arreglar este problema».

Paul Ayoman asegura que «todos los países del mundo tienen un Tribunal Constitucional y no se interfiere en sus decisiones. Cuando Sarkozy se enfrentó a Ségoléne Royal en unas elecciones, el Constitucional francés tomó una decisión; lo mismo en los comicios de EEUU entre Bush y Al Gore, el Constitucional norteamericano tomó una decisión. Y nadie lo discutió. En Costa de Marfil, tenemos nuestro Tribunal Constitucional, que es el órgano que toma las decisiones válidas en las elecciones. Y dio como vencedor a Laurent Gbagbo».

El embajador opina que «se pretende derrocar a Gbagbo de forma ilegal, basándose en la proclamación de resultados de la Comisión Electoral Independiente, que es una instancia administrativa, frente a la decisión del Constitucional, cuyos resultados sí tienen validez legal».

A su juicio, en el fondo de todo ello, está la intención de «imponer en Costa de Marfil a un presidente (Ouattara) que permitirá a gobiernos y empresas extranjeras explotar a fondo los recursos de Costa de Marfil, como el petróleo y el gas. Ya lo hizo cuando fue primer ministro. Frente a él, Gbagbo está protegiendo a su país y esta forma de actuar no gusta a las potencias extranjeras».

Ayoman critica también la manera en que se han conducido algunos organismos africanos e internacionales en esta crisis. «La Cedeao tiene 15 miembros y en la reunión de Abuja tomaron la decisión tres presidentes, el de Nigeria, Goodluck Jonathan, que era el anfitrión y Abdoulaye Wade (Senegal) y Blaise Compaoré (Burkina Faso). Con todos los respetos, pero creo que estos dos últimos no son personas idóneas para juzgar a Costa de Marfil y si no, vean cómo actúan en sus países. Esto es un intento de golpe contra Costa de Marfil».

Y respecto a Naciones Unidas apunta que «tenemos pruebas de cómo los soldados de la ONU han tomado parte en este problema. Han suministrado armamento a los rebeldes de Fuerzas Nuevas, han transportado a sus tropas desde el norte hasta Abidjan y les están protegiendo para que se enfrenten a las fuerzas legales. Esto es gravísimo».

Pese a todo, Ayoman apuesta por el diálogo. «No creo que en este momento haya riesgo de guerra civil, entre los marfileños podemos sentarnos y discutir, arreglar esto. Es la cultura de los africanos. Y Gbagbo ya ha dicho que está dispuesto a hablar, pero siempre sobre la base de la Constitución de Costa de Marfil, que no es negociable».

Frente a esta actitud del campo presidencial, «la oposición está utilizando a los ciudadanos para promover la violencia. Hemos visto cómo en las manifestaciones de los últimos días había personas armadas que querían desestabilizar. Y eso no se puede permitir».

Ayoman tiene claro que «lo que aquí está en juego es la independencia de Costa de Marfil como nación» y que los recientes acuerdos del gobierno de Gbagbo con países como Rusia y China no han gustado nada a Francia y Estados Unidos. «Teníamos la independencia política, pero ahora queremos la independencia económica», añade.

«No es posible que 50 años después de convertirnos en país soberano, Francia y Occidente pretendan imponernos un presidente, colonizarnos de nuevo. El presidente Gbagbo ha abierto negociaciones con todos los países y eso a Francia no le ha gustado nada. Pero tenemos derecho a negociar con quien queramos. Deben saber que somos un país soberano», observa.

Los medios de comunicación franceses, y arrastrados por ellos muchos medios españoles y del mundo, llaman a Gbagbo «presidente golpista» y han tomado partido por Ouattara, lo que para Ayoman es «lo mismo que hicieron en 2002. Cuando la CEI proclamó los resultados lo hizo en el cuartel general de Ouattara y frente a las televisiones francesas. ¿Por qué? Se enteraron primero los marfileños de Francia que en el interior del país. Están haciendo lo posible por destrozar la imagen de Gbagbo. Sarkozy hace lo mismo que ya hizo Chirac, pero va a fracasar porque esos tiempos ya han pasado y Costa de Marfil es un país independiente, económica y políticamente. Lo único que pedimos es respeto a nuestra Constitución y nuestra soberanía», concluye.

Fuente: http://www.guinguinbali.com/index.php?lang=es&mod=news&task=view_news&cat=3&id=1275