El socialista Mahamadou Issoufou, líder del Partido Nigerino por la Democracia y el Socialismo (PNDS), se convertirá el próximo 6 de abril en el presidente de Níger tras ganar la segunda vuelta delas elecciones presidenciales celebradas este sábado. Conocido como ‘el viejo león’, Issoufou es un histórico líder opositor al régimen de Mahamadou Tandja. La […]
El socialista Mahamadou Issoufou, líder del Partido Nigerino por la Democracia y el Socialismo (PNDS), se convertirá el próximo 6 de abril en el presidente de Níger tras ganar la segunda vuelta delas elecciones presidenciales celebradas este sábado. Conocido como ‘el viejo león’, Issoufou es un histórico líder opositor al régimen de Mahamadou Tandja.
La Comisión Electoral Independiente ha ofrecido esta misma tarde los resultados provisionales de las elecciones generales celebradas el pasado sábado 12 de Marzo, como indicaban todos los pronósticos Mahamadou Issoufou, habría alcanzado la mayoría necesaria para gobernar el país con el 57,95% de los votos.
Los laberínticas callejuelas del Grand Marche de Niamey se han teñido esta tarde de rosa. Media capital recibía el calor vespertino pegada a un transistor, a la espera de que Junta Electoral anunciase una noticia que aunque presagiada por todos no era menos ansiada. Al confirmarse los resultados provisionales el estallido de júbilo de gran parte de una población que vive las citas electorales con la pasión de los grandes acontecimientos deportivos ha desbordado hasta los últimos rincones del país.
Veinte largos años han debido esperar los seguidores de Mahamadou Isssoufou para alcanzar el poder, 20 años de sinsabores, cargos secundarios, alianzas con el caballo perdedor, desempeño de diferentes ministerios y sobre todo una oposición paciente y, como los seguidores de PNSD se vanaglorian de recalcar cuando son objeto de la conmiseración irónica sus adversarios, » una oposición constructiva». Tras esta larga travesía del desierto, parece que por fin le ha llegado la oportunidad al eterno aspirante al poder nigerino.
El 57,95% de los sufragios se antoja una mayoría suficiente para proporcionar el crédito necesario a un candidato que es visto con recelo por una gran parte del electorado nigerino debido a su carácter volcánico y a una sinceridad que bordea en ocasiones la falta de diplomacia. Sus 1.820.639 votos obtenidos evidencian el fuerte apoyo social conseguido por el PNSD, en unas elecciones donde su historial virginal en cuanto al desempeño del poder y el hartazgo de la población del último periodo del ex presidente Tandja le convirtió desde el principio en el depositario de las esperanzas de gran parte del electorado.
La candidatura del segundo candidato Seini Oumarou, representante del MNSD, ha sido víctima de ese pasado reciente y del goteo inexorable de deserciones que ha sufrido la Alianza por la Reconciliación Nacional destinada al principio a frenar la popularidad de Issoufou. En ese sentido la adhesión de la tercera fuerza política en la primera vuelta con el 19, 8% la candidatura de Loumana con Hama Amdou a la cabeza ha decantado de forma decisiva la balanza.
Por otra parte todos los observadores internacionales coinciden en destacar la limpieza y falta de incidentes en unos comicios que han contado que la participación del 48,17% del electorado, una de las cifras mas altas de la historia de Niger. Llega el momento de observar el reparto de poder que establece Issoufou entre los múltiples partidos que le han ayudado a alzarse con la victoria.
El general Salou Djibo, jefe de la junta militar que detenta el poder de forma provisional tras el golpe de Estado del 2010 ha urgido a todos los partidos a aceptar los resultados electorales y a formar gobierno. Mientras, esta noche es el turno de la marea rosa que festeja en las calles de todo el país, la esperada llegada al poder de «El Viejo león».
Fuente: http://www.guinguinbali.com/index.php?lang=es&mod=specials&task=view_special_new&cat=3&id=1687