A fecha 13 de junio de 2011 la Sección Sindical de CGT en Toprural presentó ante la Dirección de la Empresa una petición para abrir una ronda de conversaciones con dos propuestas básicas encima de la mesa: la ligación del bonus al balance de beneficios de la compañía con efecto retroactivo al año 2010 y […]
A fecha 13 de junio de 2011 la Sección Sindical de CGT en Toprural presentó ante la Dirección de la Empresa una petición para abrir una ronda de conversaciones con dos propuestas básicas encima de la mesa: la ligación del bonus al balance de beneficios de la compañía con efecto retroactivo al año 2010 y el aumento en un 20% de los sueldos correspondientes a los empleados cuyo bruto anual es inferior a los 20.500 €.
La única respuesta provino a través de un correo electrónico tipo remitido por la asesora laboral externa de la empresa. La intención de los Representantes de los Trabajadores de reunirse directamente con la Dirección -la negociación compete a esta y no a los abogados porque se trata de asuntos de estrategia empresarial, no de interpretación jurídica- quedó en nada. La política del ninguneo a los delegados democráticamente elegidos volvió a escenificarse.
Entendemos que las peticiones propuestas son más que razonables para premiar el óptimo trabajo realizado por los empleados, permitir una repartición más equilibrada de las ganancias y un acortamiento en la brecha salarial. Lamentablemente la Dirección ni siquiera ha querido entrar a dialogar sobre estas u otras medidas y ha vuelto a demostrar su insensibilidad habitual ante el estupor general provocado por la publicación de sus resultados correspondientes al ejercicio 2010. Balance publicado en el blog externo de Toprural e ignorado en el interno, a buen seguro para evitar polémicas.
¿Qué pasó en 2010?
2010 no fue un año fácil: hubo que superar una migración que deparó innumerables problemas con los clientes de Toprural. El buen hacer de los empleados de la empresa recondujo una situación crítica que, a fecha 31 de diciembre y en plena crisis económica, solo deparó una reducción en la facturación del 6% (se pasó de 4,5 millones a 4,3 millones). La Dirección agradeció el esfuerzo de los trabajadores con despidos improcedentes (Los 47 empleados que acabaron el año 2009 se quedaron en los 38 de finales de 2010), dejando sin bonus al personal (porque «técnicamente» la empresa no había crecido) pero, eso sí, disparando su tasa de beneficios.
¿Cómo puede reducirse (aunque sea poco) la facturación y disparar la tasa de beneficios en un 25%? Pues recortando algunos gastos pero con especial mención a los sueldos y salarios. Esta partida se desplomó en 2010 en un 27%, sin duda como consecuencia del estrechamiento de la plantilla y la exclusión de pagas adicionales. Se abonaron en sueldos un total de 1.208.238 € a lo largo del año, cifra que puede parecer un buen pellizco. No lo es tanto si consideramos que las retribuciones del Administrador Único y la denominada alta dirección ascienden a la friolera de 406.106 € (supone un 40,15% del total antes indicado).
Esas sobresalientes retribuciones se quedan casi en calderilla en relación con los dividendos. Toprural dejó de lado la tradición empresarial de repartir beneficios con carácter anual y, en plena crisis, se permitió el distribuírselos hasta en cuatro ocasiones en 2010 por un valor total de 1.487.038 €. De ellos, 550.000 en diciembre, suponemos que para afrontar con garantías los gastos navideños. Por ejemplo, al socio fundador que posee el 28% de la propiedad le correspondieron un total de 416.370 €. Su socia obtuvo 178.444 € gracias al 12% de participaciones.
Los números hablan
La política económica de Toprural es clara: aprovecharse de una facturación inferior para pagar menos pero, a la vez, de puertas para afuera sacar pecho por los resultados.
-
Dividendos netos: 1.487.038 € (2010) vs 1.185.197€ (2009)
-
Beneficios antes de impuestos: 2.083.771 €
-
Cuentas corrientes a la vista: 685.550 €
-
Inversiones financieras: seis imposiciones a plazo fijo con interés entre el 2,52% y el 4% por un importe de 1.913.000 €
-
Sueldos y salarios (antes de impuestos): 1.208.238 € (2010) vs 1.550.009 € (2009)
-
Retribuciones del Administrador Único y alta dirección: 406.106 €
-
Plantilla a fecha 31 de diciembre de 2010: 38 personas (vs 47 a 31 de diciembre de 2009).
¿Qué pedimos?
Queremos que el trabajador se sienta recompensado cuando gracias a su trabajo los beneficios no dejan de crecer año tras año. Queremos acabar con la trampa del bonus actual (reparto del 6% del crecimiento de la empresa), que en los últimos cinco trimestres ha dejado en nuestras arcas la mísera cifra de 884 € a dividir entre todos. El sector del turismo rural ha tocado techo y es improbable que recupere una senda de crecimiento continuado. Dado que no existen pagas extra y el nivel salarial es objetivamente bajo, lo justo es que tengamos algo así como la paga de beneficios que disponen otras empresas.
También queremos que los compañeros con salarios más bajos obtengan una retribución más acorde con su formación y trabajo. El 20% de aumento de sueldo que solicitamos para ellos puede sonar exagerado, pero en términos cuantitativos es irrisorio: un empleado con una retribución de 14.500 € brutos anuales (7.000 € menos que el sueldo medio en España) pasaría a percibir 2.900 € más (unos 200 netos adicionales al mes).
O, lo que es lo mismo, ese pequeño reconocimiento para cada uno de estos trabajadores equivaldría al 0,19% de la tasa neta de beneficios de la empresa.
Nota: Las cifras aquí expuestas son públicas y de libre acceso en el Registro Mercantil Central.
Sección Sindical CGT Toprural