No parece que sea un comunicado apócrifo. Lleva los sellos del SUP y del EUROCOP. Esta mañana, señala el comunicado del sindicato español de policías, acaso la mañana del jueves 12 de julio, «hemos acudido a la reunión a la que fuimos convocados ayer». Asistieron los máximos responsables de los sindicatos policiales: SPP, UFP, CEP […]
No parece que sea un comunicado apócrifo. Lleva los sellos del SUP y del EUROCOP.
Esta mañana, señala el comunicado del sindicato español de policías, acaso la mañana del jueves 12 de julio, «hemos acudido a la reunión a la que fuimos convocados ayer». Asistieron los máximos responsables de los sindicatos policiales: SPP, UFP, CEP y SUP. El director general del cuerpo estuvo acompañado por el subdirector de personal. Según el comunicado, el director general explicó «cuánto nos quiere a los policías, cuánto valora el trabajo de sus sindicatos, lo respetuoso que será con cualquier decisión que adoptemos que respete la legalidad», y, además, éste es el punto, «que van a defender que los policías tengan un tratamiento singular».
¿Qué tratamiento? Están hablando con Hacienda para arreglar la situación. El ministro, don Jorge Opus Dei Fernández, lo va a intentar. ¿Qué? Que a los polis no, que a ellos no les toque el hachazo de la paga de Navidad.
El SUP, hace muy bien, no se fía ni un pelo y se espera una jugada como la siguiente. «Esto del «tratamiento singular», que no ha precisado en qué consistiría, puede querer decir que cuando se anuncie en septiembre el presupuesto de 2013, además de decir que se mantiene el robo de la paga extra de diciembre de ese año, como se va a eliminar la productividad de la función pública, pues que a nosotros solo nos van a quitar el 90% y nos dejarán un 10% de lo que cobramos ahora por productividad, y así, cobrando 4 €/mes los básicos, 6 los subinspectores, 8 escala ejecutiva y 12 la superior, nos dirán «QUE ESPECIALES SOIS QUE ES EL ÚNICO COLECTIVO QUE MANTIENE PRODUCTIVIDAD»».
Y, además, no tienen un pelo de tontos: los otros sindicatos de policía, muy pero que muy en la derecha, SPP, CEP y UFP, parece ser que han planteado que «somos singulares», los polis, sólo los polis, y que no les puede afectar la eliminación de la paga extra. El director general ha dicho lo que tocaba decir: intentarán que no haya el recorte de la paga extra: para polis, solo para polis habrá trato especial.
Es imposible que sea así, señala sensatamente el SUP. Su impresión es que se trata de ganar tiempo, «que llegue y pase el verano y se calmen los ánimos». Si se hiciera así, argumentan, si no se eliminara la paga a la Policía, se haría los mimo «para la Guardia Civil, y entonces se extendería al ejército, y entonces médicos, enfermeras, profesores…y en general la ciudadanía tendría claro», presten atención por favor, «que esto es una dictadura Pinochet y no una democracia» y, además, sigan prestando atención por favor, «acabarían tirando cócteles Molotov a nuestros coches y viviendas y tendríamos que encerrarnos en cuarteles».
Conclusión del SUP: «Aun así, si el ministro consigue que no nos afecte sería un hito en la historia de España. No lo conseguirá. Llegado este punto ya no había nada que decir. El SUP tiene una declaración de conflicto colectivo; propuso una comisión del Consejo para debatirlo y la dirección general y los tres sindicatos se opusieron»
Desde ayer, señalan, seguramente el miércoles 11 de julio, han pedido a todos los compañeros «que trabajen según nos pagan como medida de presión. QUE TODOS ACTÚEN MÁS Y HABLEN MENOS. TRABAJA SEGÚN TE PAGAN. QUE NO NOS ENGAÑEN MÁS.
Firma el comunicado la «comisión ejecutiva nacional». Nada menos.
No sólo es este comunicado.
Hay otro de la Guardia Civil. Más jugoso si cabe.
Aquí, lo confieso, mis alarmas se disparan de entrada al igual que mis prejuicios. Mi familia no ha tenido nunca buenas relaciones con «el cuerpo» de la gloriosa Benemérita. Llegamos a gritar, plenamente convencidos, aquello de «disolución de los cuerpos represivos». Nos asesinaron en mayo de 1939, en el Camp de la Bota de Barcelona, a nuestro abuelo cenetista, cuando cumplía 52 años, y se han olvidado hasta el momento de pedirnos perdón. Ahora que se vuelve a hablar del tema, parece que nosotros estamos incluidos en el grupo de las víctimas del terrorismo fascista de Estado. Pues ni por esas. Ni se les conoce hasta el momento en nuestros domiclios ni, visto lo visto, les esperamos. Son muy suyos y no parecen que la cortesía sea una de sus virtudes destacadas. No tienen tacto con sus víctimas. ¡Mecachis en la mar!
Sea como fuere, la AUGC, la Asociación Unificada de Guardias Civiles, ha afirmado que «responderá con contundencia al nuevo robo que nos infringen los que nos gobiernan».
A ver, a ver, con calma. Los guardias civiles, con AUGC a la cabeza, su organización mayoritaria según ellos mismos cuentan, responderá «con contundencia al nuevo robo que este Gobierno pretende perpetrar con total impunidad» en sus nóminas. ¿Con contundencia? ¿Kale borroka guardiacivilesca? No precisan la acepción del término pero el país está cambiando por momentos.
Y no sólo es eso, hay más.
Este ejecutivo, prosiguen, como hicieran los anteriores, «nos trata como funcionarios para lo malo, aplicándonos todos los recortes, metiendo la mano en nuestra cartera, y olvidándose de nosotros en los tiempos de bonanza para seguir robándonos derechos sociales, económicos y constitucionales».
Lanzan además propuestas estratégicas, bastante sensatas y elementales que la izquierda haría bien en anotar. Este país, España para ellos, «no puede tener dos policías estatales, pero es que en tiempos de crisis mantener esta duplicidad es un lujo que no nos podemos permitir». Por ello, sostienen, es imprescindible «acometer la UNIFICACIÓN de Guardia Civil y Policía Nacional». Con la medida, afirman, el Gobierno se ahorraría unos cuantos millones de euros. ¿Qué millones? «Los destinados a mantener un despliegue territorial de la Benemérita que tan sólo sirve para vender una imagen y no para dar seguridad».
Como han leído. No es una afirmación de algún izquierdista indocumentado que escriba regularmente en el topo o en rebelión.
Además, vuelve a ser la AUGC quien reflexiona, «la unificación supondría la desmilitarización de la Guardia Civil». ¿Y? El carácter militar del Cuerpo es, además de muchas otras cosas, «un factor de gasto, al no permitir la búsqueda de sinergias corporativas con el Cuerpo Nacional de Policía». Pero, ¿por qué no se ha desmilitarizado el cuerpo hasta el momento a pesar de promesas y más promesas, PSOE incluido? Porque tenemos deberíamos ser conscientes de que si no se ha llevado a cabo «es por el gusto que todos los gobiernos han cogido a tener un cuerpo militarizado que no pregunte, ni proteste y solo esté para hacer lo que se le ordena». Y, no se acaba aquí, «porque existe además una casta, la de los Generales, que no está dispuesta a ceder ni un milímetro de su poder».
Que no, que no, que no soy yo quien lo dice. ¡Es la AUGC!
Siguen: casta, la de los generales, «que desgraciadamente, ha ido engordando en número al mismo ritmo que bajaba el sueldo de sus «parias», los guardias civiles». En los noventa, la Guardia Civil caminera tenía una plantilla de nueve generales «para dar lustre a la Institución». ¿Y ahora? Los tiempos están cambiando: ¡pues 34, un incremento de casi el 300%! Todos además, añade la AUGC sin dejar de llamar pan al pan, «con pabellón de lujo a cargo del erario público con un todo incluido como las vacaciones en el Caribe que ofertan las agencias de viaje: servicio doméstico, equipamiento de la vivienda (acorde con la categoría del inquilino) y mantenimiento». Por si no tuvieran suficiente, «hasta los gastos de detergente para lavadora corren a cargo de los presupuestos de la Guardia Civil». El Estado, cuando se pone, es así de generoso. ¡Viva la austeridad del generalato español!
Una última reivindicación: la AUGC exige que se permita que las asociaciones profesionales de la GC «puedan ejercer el control en la Asociación Pro-Huérfanos». Si por imperativo legal deben dar parte de su salario a la Asociación, «como mínimo se nos debe permitir vigilar lo que se hace con nuestro dinero». La gestión es discutible: «su último pelotazo. comprar acciones preferentes». ¡Para morirse! ¡Preferentes en manos de la asociación pro-huérfanos de la Guardia civil! ¡Ole y ole y ole!
¿Estas cosas ocurren en el último land incorporado a la Deutschland über alles?
PS1. Jacques Sapir -«Crisis europea: después de España será Italia» [2]- nos recuerda el escenario del inmediato «mercado de futuros» español: España debe encontrar de aquí a diciembre de 2012, unos 82 mil millones de euros para financiar su deuda, más unos 16 mil millones de deuda autonómica (perdieron acceso a los mercados en 2011: bonos basura). En total, 98 mil millones, casi 100 mil millones.
Por otra parte, las necesidades para estabilizar el sistema bancario español oscilan según cálculos diversos entre los 250 y los 300 mil millones de euros. De aquí a finales de año, hay que conseguir la mitad. Sumando a la baja: 125 más 100 mil millones, 225 mil millones de euros. Los 16 mil millones autonómicos están estimados muy a la baja y con trampa. Se habla de una cifra más real: 30 mil millones.
En total, sumando bien, unos 237 mil millones de euros, la cuarta parte aproximadamente del PIB español.
PS2: Del escenario global, nada menor que reparar en esta sesuda reflexión de Evan Ellis -Centro de Estudios Hemisféricos de Defensa, adjunto al Pentágono- sobre las relaciones sino-venezolanas: «En la era de la globalización, tener como consejeros a banqueros chinos es el equivalente de tener consejeros militares de la Unión Soviética en Cuba y Nicaragua durante la guerra fría» [3]. ¿Está claro? Los tiempos no están cambiando. La entrevista apareció en el Miami Herald, el nueve de julio de 2012, hace apenas una semana.
Notas:
[1] http://www.augc.org/comunicados.php?not=1525
[2] http://www.tlaxcala-int.org/article.asp?reference=7562
[3] Tomado de Raúl Zibechi, «La alianza estratégica Brasil-Venezuela». http://www.rebelion.org/noticia.php?id=153006
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