Greenwald y Scahill reportan en la nota inaugural que la NSA «emplea un análisis complejo de vigilancia electrónica, en lugar de inteligencia humana, como el método primario para localizar objetivos para ataques letales con drones, táctica nada confiable que ocasiona muertes de personas inocentes o no identificadas».
Foto tomada de Internet del sitio The Intercept recién inaugurado con el «ideal de que una prensa realmente libre es un componente vital de cualquier sociedad saludable».
Los periodistas que recibieron y publicaron las filtraciones de Edward Snowden, que sacuden al gobierno de Estados Unidos y detonan un debate nacional e internacional sobre el espionaje masivo, inauguraron un nuevo medio digital dedicado a continuar reportando las operaciones secretas de Washington y sus implicaciones para las libertades civiles y la democracia.
Glenn Greenwald y Laura Poitras, a quienes Snowden entregó su enorme archivo de filtraciones de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), junto con otros periodistas destacados como Jeremy Scahill, que se están sumando a la iniciativa, lanzaron hoy The Intercept (La intercepción), financiados por Pierre Omidyar, el multimillonario co-fundador del sitio de subasta cibernético E-Bay.
En su número inaugural ofrecen una introducción a su misión, un reportaje sobre el papel de la NSA en los ataques con drones y una serie de fotos satelitales inéditas de las instalaciones de algunas de las agencias secretas de Estados Unidos.
Greenwald y Scahill reportan en la nota inaugural que la NSA «emplea un análisis complejo de vigilancia electrónica, en lugar de inteligencia humana, como el método primario para localizar objetivos para ataques letales con drones, táctica nada confiable que ocasiona muertes de personas inocentes o no identificadas». Informan que se ubica al objetivo con base en datos de geolocación de celulares, pero nunca se sabe de manera precisa de quién es el teléfono o quién lo tiene en el momento de un ataque. Aunque parte de esa información se había reportado anteriormente, esta nota incluye el testimonio de un ex operativo del Comando Conjunto de Operaciones Especiales, el mando militar encargado del programa de los drones, que también trabajaba para la NSA.
The Intercept se enfocará al principio en los documentos filtrados por Snowden, el ex contratista de la NSA. En la presentación de la revista digital, los directores Greenwald, Poitras y Scahill señalan que se lanza en momentos en que se intensifica lo que caracterizan como ataques e intimidación a periodistas que trabajan sobre asuntos de seguridad nacional y programas secretos. Recuerdan que en días recientes algunos de los jefes de inteligencia estadunidense y legisladores han acusado a periodistas de ser cómplices de Snowden y hasta han insinuado que han cometido delitos como robar información clasificada, por publicar información relacionada con los documentos filtrados por el ex contratista.
Ante ello, advierten que estas amenazas no nos van a disuadir respecto del periodismo que realizamos, ya que una función central de esta iniciativa es defender nuestra libertad de prensa frente a quienes desean infringirla. Estamos decididos a seguir adelante con lo que creemos que es de esencial interés público y comprometidos con el ideal de que una prensa realmente libre e independiente es componente vital de cualquier sociedad democrática saludable.
Agregan: nuestra misión central es hacer que los gobiernos y las facciones empresariales más poderosas rindan cuentas, y para lograrlo, reportaremos sobre una amplia y variada gama de temas. Para ello, definen su misión a largo plazo como ofrecer periodismo incisivo e independiente en temas que irán desde el secretismo, abusos de justicia criminal y civil y violaciones de libertades civiles hasta conducta de medios, desigualdad social y todas las formas de corrupción financiera y política.
Concluyen: el valor primario del periodismo es que impone transparencia y, por lo tanto, la rendición de cuentas de aquellos que manejan el poder gubernamental y empresarial más grande.
Greenwald fue el primero en reportar las filtraciones de Snowden en The Guardian cuando trabajaba ahí, y las compartió con otros medios en Estados Unidos, Europa y Brasil.
The Intercept es la primera de varias revistas digitales publicadas por First Look Media, la empresa de Omidyar. https://firstlook.org/theintercept