Llegó el día tan poco esperado. Ayer, 30 de octubre, era la cita en la Asamblea Nacional para votar a favor o en contra de la revisión del artículo 37 de la Constitución Burkinesa. Una revisión con la que se busca que el presidente de Burkina Faso permanezca cinco años más en el poder. Lleva […]
Llegó el día tan poco esperado. Ayer, 30 de octubre, era la cita en la Asamblea Nacional para votar a favor o en contra de la revisión del artículo 37 de la Constitución Burkinesa. Una revisión con la que se busca que el presidente de Burkina Faso permanezca cinco años más en el poder. Lleva ya 27. Finalmente esa cita no ha tenido lugar. Poco antes de las doce la mañana, un comunicado del gobierno informaba de la anulación del voto del proyecto de ley en relación a la revisión de la Constitución y llamaba a la población a la calma y a la contención, dado el revuelo en torno al parlamento.
Sobre los 127 diputados que constituyen el parlamento recaía la responsabilidad de representar la voluntad del pueblo, después de varios días de manifestaciones desde que el pasado martes 21 de octubre se anunciara la opción de aprobar por proyecto de ley una modificación de la Constitución. Sin embargo, no solo los diputados acudieron a la cita. Ya a las ocho de la mañana, varios manifestantes se reunían en torno a los puntos de acceso a la Asamblea Nacional. Dispersados por las fuerzas del orden con gases lacrimógenos, la situación parecía bajo control. Entonces, dieron las nueve.
En torno a las nueve y media de la mañana, las fuerzas de seguridad han comenzado a retirarse, según explica el periódico local ‘Burkina24’. «Los militares han dejado hacer a los manifestantes» ha declarado un diputado al medio ‘Jeune Afrique’. De este modo, los manifestantes han conseguido rodear el parlamento y han comenzado a tirar piedras contra el edificio. Poco después, se ha prendido fuego al parlamento. Los manifestantes se han dirigido a la radiotelevisión nacional que ha sido saqueada y ha dejado de emitir. Además del parlamento y la radiotelevisión, también el Hotel Azalai Independance y la sede del partido de Blaise Compaoré, Congreso por la Democracia y el Progreso (CDP), han sido asaltados.
Lo mismo ha ocurrido con el domicilio de François Compaoré, el hermano del presidente, donde además han tenido lugar disparos contra los manifestantes. Una persona ha muerto por una bala en la cabeza y otras personas habrían sido heridas. De momento, se desconoce el número de muertos y heridos, pero en el Centro Hospitalario Yalgado Ouedraogo de Uagadugú, la capital, cuentan ya tres muertos y unos sesenta heridos. En torno a las dos menos cuarto de la tarde, François Compaoré ha sido detenido en el aeropuerto de Uagadugú. El aeropuerto ha sido cerrado, tanto los vueltos entrantes como salientes.
En el resto de la capital, han tenido lugar barricadas e incendios pero también se han sucedido en otras ciudades del país como Bobo-Dioulasso, la segunda ciudad de Burkina Faso, donde el ayuntamiento y el domicilio del alcalde han sido saqueados, así como en Kaya o en Uadigouya.
«Blaise Comaporé ya no tiene ninguna legitimidad y debe dimitir», ha señalado el portavoz del movimiento ‘Balai Citoyen’, Hervé Guy Kam. Por su parte, Zephirin Diabré, el líder del partido de la oposición, ‘Unión por el Progreso y el Cambio’ (UPC), ha indicado en su cuenta de Twitter que «nosotros nos oponemos totalmente a un golpe de Estado en Burkina. Debemos permanecer democráticos».
La Unión Africana ha invitado a los burkineses a mantener la calma. Lo mismo ha hecho Francia que, además, ha pedido a todas las partes que actúen con moderación. Por su parte, Estados Unidos ha señalado estar muy inquieto ante esta situación. Según recoge el medio Jeune Afrique, el presidente galo François Hollande ha dirigido una carta a Blaise Compaoré en la que le dice que «Burkina Faso podría ser un ejemplo para la región si, en los próximos meses, se avanza en la dirección de evitar el riesgo de un cambio no consensuado de la Constitución. Usted podría contar con Francia para apoyarle si desea poner su experiencia y su talento a disposición de la comunidad internacional».
Sobre las seis de la tarde, se ha leído en la radio un comunicado de la presidencia anunciando el estado de sitio en Burkina Faso. «En estos momentos dolorosos que atraviesa nuestro pueblo, me gustaría decir que he comprendido el mensaje, he disuelto el gobierno con el fin de crear las condiciones de una nueva perspectiva. Lanzo una llamada al líder de la oposición para permitir un retorno a la calma», ha señalado Blaise Compaoré en el comunicado.
Leer más: Boukari Kaboré: El último superviviente de los leales a Sankara
Fuente: http://www.guinguinbali.com/index.php?lang=es&mod=news&task=view_news&cat=3&id=4157