«Sin solidaridad no hay victoria. Sin conocimiento no hay solidaridad». André Vltchek
Barcaza cruzando el río Congo, en la RDC. Foto: Tracy Angus-Hammond (Pixabay).
Desde los años 60 hasta la actualidad, las luchas sociales en la República Democrática del Congo han tenido varios objetivos. Uno de los más importantes es la soberanía integral del país. También, la liberalización del espacio público para que se convierta en un lugar de debate y democracia. Estas luchas sociales quieren liberar al Muntu congoleño del statu quo. No tiene sentido pretender haber luchado por el cambio y, de golpe, negarse a que se discutan en profundidad las cuestiones relacionadas con este cambio en el espacio público congoleño..
La balcanización del Congo
El acrecentamiento en la escena congoleña del problema de la balcanización parece algo curioso. Algunos compatriotas quieren saber por qué este problema no se planteó bajo el régimen de la «Kabilie». ¿Y cómo saben que no se hizo? ¿Dónde fueron a comprobar (o husmear) antes de llegar a tal conclusión? Les habría sido más fácil ir a Google o a otro motor de búsqueda y escribir «la balcanización de la RDC». Se habrían sorprendido por el número de publicaciones sobre este tema.
Parece que muchos de estos compatriotas no siguieron ese camino y atacan a los que hoy hablan de la balcanización de la RDC, ignorando todo el trabajo intelectual que se ha hecho sobre este tema. ¿Podrían ser víctimas de la restricción a las cuestiones de actualidad? Eso me parece. Esta restricción conduce a menudo al narcisismo de la razón y a su derrota. Es una renuncia al ejercicio de la razón (y del pensamiento) a largo plazo. Puede ser el reflejo de cerebros «colonizados».
Y con razón. En 2013, un grupo de intelectuales congoleños de todos los rincones del país se centró en la cuestión de la balcanización de la RDC y la estudió en profundidad. Este grupo publicó un libro titulado La République Démocratique du Congo face au complot de balkanisation et d’implosion («La RDC se enfrenta a un complot de balcanización y de implosión», en castellano). La bibliografía de este libro indica, por su riqueza, que se trata de un problema antiguo. Desde su publicación, algunos miembros de este grupo han hablado de nuevo sobre este complot y quienes la orquestaron..
Es curioso fingir que el Congo es una democracia joven
Descubrir tan tarde que los primeros en hablar de este problema fueron el cardenal Ambongo y el pastor André Bokundoa puede ser resultado de la pereza intelectual y de la falta de interés por los temas cruciales que enfrenta nuestro país desde su independencia hasta el día de hoy. El primer ministro Patrice-Emery Lumumba, en su época, ya hablaba de ello.
También habría sido preferible que la crítica de estos dos pastores se hubiera argumentado un poco. Esto no ocurre a menudo; los insultos sustituyen a los argumentos. Todo parece interpretarse como una sórdida maniobra para desestabilizar a Fatshi Béton y desalentar los esfuerzos de los militares congoleños para vencer a los asesinos de nuestro pueblo en el este del país. Sin embargo, estos militares también hablan del peligro de la balcanización. ¿Dónde está el error? Se pueden desarrollar varias hipótesis para responder a esta pregunta. Aquí están las mías:
- El hecho de estar atrapado en el presente, en las llamadas «cuestiones de actualidad», en el narcisismo de la razón y en su derrota.
- La cuestión del acceso a los libros y la renuncia a la lectura, a información contrastada y a la cultura del debate.
- El aumento del fanatismo, el culto a la personalidad, la falta de formación de la ciudadanía, etc.
Es muy curioso fingir que la RDC es una democracia joven y al mismo tiempo rechazar un debate abierto sobre algunas cuestiones. Cada vez más, los compatriotas se autocensuran y crean temas tabúes..
Asumir las consecuencias
Hace unos meses, me pregunté si era posible llevar a cabo debates entre congoleños que no compartieran un mínimo de cultura. ¿Cómo se puede hablar de democracia sin que los debates hagan tambalear algunos de nuestros prejuicios, conocimientos o informaciones aproximadas? ¿Acaso no es el camino democrático el lugar para el aprendizaje común a través del debate y el consenso provisional?
Al ritmo al que van las cosas, la democracia a la congoleña podría ser distinta. El aumento de temas tabúes podría hacer que se guillotinase a los herejes del pensamiento vacío. Parece que no es una broma, después de haber visto las amistades y parejas rotas tras las elecciones fraudulentas de 2018. Hasta el día de hoy, la cuestión de la verdad sobre las urnas sigue despertando pasiones. Afrontarlo es un riesgo serio. Solo los Tiya Mutu bakata se atreven todavía. No tienen miedo de perder a sus amigos y conocidos. Asumen las consecuencias de su sed de investigar y conocer, junto a otros, la verdad. Uno de ellos escribió un artículo titulado «Yo asumo».
Lo mismo debería ocurrir con el problema de la balcanización y con muchos otros. Las minorías solidarias, aquellos que asumen, deberían aceptar conscientemente que van a ser vilipendiadas y tratadas como herejes del narcisismo del pensamiento. La lucha continúa.
Babanya Kabudi. Generación Lumumba 1961
Texto original en francés: «La balkanisation, le livre et l’info-formation. Les sujets tabous se multiplient au Congo-Kinshasa»,
Traducido por María Franco Roncero para Umoya.
Fuente: https://umoya.org/2020/03/17/rd-congo-balcanizacion-libros-info-formacion/#more-62588