Los datos desmienten determinados discursos que hablan de un incremento de delitos perpetrados por los migrantes llegados a Canarias en patera y cayuco. Durante el último cuatrimestre de 2020, las infracciones penales cometidas en las islas cayeron un 6%, meses con mayor repunte migratorio. De hecho, “cerramos 2020 como el año de los últimos cuatro con una menor tasa de criminalidad”. Lo ha anunciado este jueves el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, que carga contra los bulos que contribuyen a crear esta falsa idea, muchas veces «alimentados por determinadas fuerzas políticas».
En los últimos 80 días, las infracciones penales cometidas por migrantes han sido 122, según datos de la Policía Nacional. De esas, 60 corresponden a delitos por falsedad documental. Del resto, 45 son por agresiones entre los propios migrantes, robos y hurtos. La inmensa parte de estos casos han sido resueltos y las personas detenidas, según el portavoz gubernamental durante la rueda de prensa ofrecida para informar de la seguridad y la situación migratoria en el archipiélago.
Asimismo, incide en que hay una sensación de seguridad en el sur de Gran Canaria –donde se concentra la mayoría de migrantes– por el trabajo de los agentes. «Perseguiremos los delitos de odio», asegura Pestana. »No todo vale en democracia para intentar criticar al Gobierno», ha añadido.
También se ha hecho referencia a las concentraciones xenófobas celebradas el pasado fin de semana en varios barrios de la capital grancanaria. En relación a esto, el delegado ha anunciado que se han interpuesto 20 denuncias por saltarse el toque de queda y no comunicar dichas manifestaciones a las autoridades. Además, apunta a que se ha hecho llegar a la Fiscalía posibles delitos de odio para que lo investiguen.
El Ministerio Fiscal ya anunció esta semana una investigación a raíz de los vídeos y audios publicados por lamarea.com, entre ellos, uno de un hombre con un machete que amenazaba a migrantes. «No hay neutralidad para los que incitan el odio hacia el de fuera, no son nuestros valores como pueblo”, decía Pestana, que animaba a denunciar este tipo de hechos cuando se produzcan.
Canarias no es una cárcel, según el delegado
En los últimos meses, varias organizaciones, partidos políticos y los propios afectados han denunciado la imposibilidad de salir de Canarias para continuar su viaje. El delegado lo achaca a las restricciones y cierres perimetrales presentes en distintas comunidades fruto de la pandemia ‘’y que afectan a cualquier ciudadano’’. Para poder viajar, defiende, «no se les exige el visado», sino «el pasaporte» y una residencia.
Desde finales del año pasado, el Gobierno ha reforzado la presencia policial en los aeropuertos canarios para evitar que los migrantes salgan por sus propios medios, a pesar de tener todo en regla. «A las personas migrantes que llegan, lo primero que se les hace es identificarlos y se les notifica una orden de expulsión. Esta puede ser ejercida en cualquier momento y lugar: en un aeropuerto, en una calle, en una centro comercial, en cualquier sitio», ha confirmado Anselmo Pestana.
Insiste en que es falso que «Canarias se esté convirtiendo en una cárcel para los migrantes». Y argumenta que en los últimos 19 meses han llegado a Canarias 27.600 personas. »Hoy en Canarias hay 2.000 MENAS [menores extranjeros solos] y unas 9.000 personas en instalaciones del Gobierno de España. Es decir, de España han salido 16.500 personas». ‘Los datos son fríos, no mienten y nos indican que no se está produciendo esa retención de la que se está hablando».