Al menos 20 personas han muerto en enfrentamientos con la policía tunecina en las últimas horas. Así lo ha denunciado el líder opositor Ahmed Nejib Chebbi aludiendo a los choques ocurridos en las localidades de Thala y Kasserin. Por otro lado se conocieron tres nuevos casos de inmolación. Un joven estudiante de 17 años de […]
Al menos 20 personas han muerto en enfrentamientos con la policía tunecina en las últimas horas. Así lo ha denunciado el líder opositor Ahmed Nejib Chebbi aludiendo a los choques ocurridos en las localidades de Thala y Kasserin. Por otro lado se conocieron tres nuevos casos de inmolación. Un joven estudiante de 17 años de Ariana, cerca de la capital, murió a causa de las heridas sufridas tras prenderse fuego, según informó a dpa un representante del sindicato de profesores. El joven organizó una protesta junto a sus compañeros y fue llamado por el director a su despacho, donde se quemó a lo bonzo.
Un joven desempleado de la misma edad se inmoló en Kasserine, aunque en este caso los traseúntes consiguieron salvar su vida. En Sidi Buzid se produjo un episodio similar, en este caso protagonizado por un hombre de 50 años que sólo sufrió heridas leves. Fue en esta ciudad donde se iniciaron las protestas a mediados de diciembre, después de que un joven licenciado sin empleo se quemara a lo bonzo.
Fuerzas militares han tomado esta madrugada Kasserin, donde se están registrando los disturbios sociales más graves del país. El comité central del sindicato Unión General de los Trabajadores Tunecinos (UGTT) se ha reunido este domingo en la capital tunecina «con carácter urgente para tratar de colaborar en la pacificación de las zonas en las que el conflicto ha tomado dimensiones alarmantes».
Según informa la la página de la UGTT, al menos 20 personas habrían muerto a consecuencia de los disparos de las fuerzas policiales durante las protestas sociales en el día de ayer en Kasserine y Tala, zonas actualmente cercadas por la policía antidisturbios y unidades del ejército. Según las mismas fuentes habría al menos 10 heridos, tres de ellos en estado de máxima gravedad. Por su parte la página de oposición censurada Kalima hace aumentar la cifra hasta cincuenta muertos en las siguientes poblaciones: Thala (16), Kasserine (22), Meknassi (2), Feriana (1) y Reguab (8). Según esta fuente, al menos veintidós personas habrían sido asesinadas por las fuerzas del orden en los enfrentamientos de ayer en Kasserin. En el barrio de Ennour, en Kasserin, cinco manifestantes habrían muerto: Raouf Bouzidi, Salah al Fridhi, Mounir Mbarki, Mohammed Lassoudi y Abdelkader Boulaabi. En Ezouhour, habría habido tres víctimas, de las cuales sólo se conoce la identidad de una: Salah El Boughanmi.
En Tal, el número de muertos ascendería a 16: Marwan Jomli, Ahmed Boulaabi, Nouri Boulaabi, Marwane Mbarek, Nouri Boulaabi, Marawne Anemri, Ghassane Ben Taib Cheniti, Mohamed Omri, así como un anciano de 90 años, de nombre Bechir El Mbarki , asfixiado por los gases lacrimógenos. Las mismas fuentes han dado cuenta de tres cadáveres arrojados en la rambla próxima al hospital regional de Kasserin.
En el pueblo de Feriana, dan un balance provisional de numerosos heridos y un muerto, un adolescente de 13 años cuya identidad no ha sido aún revelada.
Por su parte en Meknassi, los enfrentamientos han provocado dos muertos, Chihab Alibi et Youcef Fitouri, y siete heridos graves, trasladados al hospital de Gafsa.
En Reguab (en el centro, a 90 km de Sfax), los choques causaron 8 muertos y 7 heridos graves en la noche del sábado al domingo.
Las protestas estallaron el pasado 16 de diciembre, cuando Mohamed Bouazizi, un joven 26 años, se quemó a lo bonzo como protesta por lo que consideró abusos administrativos, después de que la policía le confiscara las frutas y legumbres que vendía en la calle.
Los partidos opositores reagrupados en la Alianza para la Ciudadanía y la Solidaridad han apelado a iniciar un diálogo entre la sociedad civil y el poder central «para abrir una transición política».
Entretanto, la embajada de Túnez en París sufrió ayer un ataque que el embajador calificó de acto terrorista. No se registraron heridos, pero una de las puertas de metal del edificio quedó destrozada.