La Presidencia de la República inició ayer consultas de preparación para la constitución del futuro gobierno. Fue el FLN, a través de su secretario general, Abu El Fadhl Baadji, así como miembros de la oficina política del partido y representantes de los independientes, que fueron recibidos por primera vez en el Palacio de El Mouradia.
Los demás partidos representados en la Asamblea también serán recibidos durante esta semana. Por supuesto, no se ha filtrado nada sobre las negociaciones en curso para formar una alianza, aunque no haya duda alguna de que el Jefe de Estado tendrá su mayoría en la APN (Asamblea Popular Nacional). Además de los partidos FLN y RND, por ejemplo (otros partidos están predispuestos o listos para avanzar en esta dirección), cada vez más diputados independientes expresan, día tras día, su apoyo al programa del Presidente.
Pero, sea cual sea la opción que se elija, entre un primer ministro que implementará el programa presidencial y un jefe de gobierno salido de una «mayoría» parlamentaria [en Argelia el Primer Ministro, nombrado por el Presidente, es el Jefe de Gobierno cuyo programa debe aprobar el Parlamento APN ndt], el sucesor de Abdelaziz Djerad se enfrentará a una situación muy complicada.
Además de la crisis política a largo plazo, que acentúa en gran medida el déficit de legitimidad, ya que las elecciones generales del 12 de junio registraron solo una participación del 23%, los problemas socioeconómicos siguen multiplicándose, mientras los precios del petróleo por barril no parecen estar a punto de reanudar la tendencia al alza que habían experimentado en el pasado y, en consecuencia, las reservas de divisas se están reduciendo de año en año.
Muchas y muchos especialistas y políticos predicen, para el futuro, un «hirak socioeconómico», ya que los indicadores están todos cerca de la línea roja. Con reservas de divisas actuales de casi 42.000 millones de dólares y un déficit, para el año en curso, de casi 3.000 millones de dinares (casi 30.000 millones de dólares), estas reservas caerán a cero en dos años.
¿Cómo convencer?
A menos que los precios del barril aumenten a más de 100 dólares, lo que es poco probable en este momento, según los especialistas. La economía argelina sigue dependiendo de la renta de hidrocarburos, mientras que varios gobiernos, incluido el que acaba de renunciar, han iniciado, sobre el papel, planes de recuperación económica que tienen como objetivo, entre otras cosas, reducir gradualmente la dependencia de las exportaciones de hidrocarburos. Sin embargo, las cosas parecen complicarse de año en año.
Los diversos problemas que el país ha experimentado este año son en última instancia solo el resultado de una laxitud y una falta de estrategia que ha durado años, cuando no décadas. Cabe mencionar, a este respecto, el aumento de los precios de muchos alimentos y otros productos, principalmente debido a la devaluación del dinar, el problema de la falta de liquidez en las oficinas de correos o, recientemente, la crisis del agua.
Este último problema también está empezando a causar agitación en la sociedad hasta el punto de que los ciudadanos de varios barrios de Argel y otros lugares han expresado su ira en la calle. Todo esto, por supuesto, además de la crisis política que, debido al déficit de legitimidad, compromete o retrasa el logro de los objetivos establecidos.
En tiempos difíciles, sería necesario movilizar todas las energías y especialmente el apoyo de la población para lograr superar las crisis en las mejores condiciones. De lo contrario, ¿cómo podría un Ejecutivo convencer a la ciudadanía de hacer sacrificios si hay una crisis de confianza? Es, por tanto, ante a esta situación extremadamente volátil, tanto política, económica como socialmente, ante la que se formará el futuro gobierno.
¿Tendrá la amplitud de miras o la ambición de superar estas crisis? Esto es sin duda lo que se desea en las altas esferas. Sin embargo, en vista de la evolución de la escena política nacional, con el descontento de parte de la población con respecto al enfoque actual del poder establecido, la misión del reemplazo de Djerad[1] promete ser muy difícil.
Fuente original https://www.elwatan.com/edition/actualite/mission-difficile-pour-le-prochain-gouvernement-27-06-2021
[1] El 28 de diciembre de 2019 fue nombrado primer ministro de Argelia por el presidente Abdelmadjid Tebún. .Desde el 24 de junio de 2021 es primer ministro «en funciones» tras presentar su dimisión el día siguiente de conocerse los resultados de las elecciones legislativas de Argelia ndt.