De la gran representación… i de gent que va alçant-se des del fons dels segles

 

Lo importante no es lo que pasa, sino quién define los acontecimientos

El Roto (2010)

Envié mi dinero a estudiar a Suiza, es donde más se aprende

El Roto (2015)

 

Pero a este debate hemos de ir unos y otros, con la moral bien alta, con fuerza… Nuestra convicción es más importante que los avales que la acompañan. La moral de un país es la voluntad de creer en él mismo.

Miquel Roca (2014)

 

Hay que valorar a los políticos, decíamos, por lo que son y por cómo son, más que por lo que hacen. Más cualitativamente que cuantitativamente. ¿Y qué hay que pedirles? Que digan la verdad, que den la cara, que no tengan miedo.

Jordi Pujol (2012)

 

Nosotros [Villarejo, también él] sí éramos los defensores de los ahorradores de Cataluña, gente modesta a los que los de la bandera de las cuatro barras les arramblaron el dinero y no se lo han devuelto, víctimas concretas a los que les quitaron la ilusión nacionalista y de paso los ahorros.

José Maria Mena (2014)

 

I. De la gran representación

1.Sé, no sé, sé que no sé, no sé que sé ni siquiera sé si sé o puede saber. Sé o no sé», ¿es esta la gran cuestión? ¿Sé y no sé al mismo tiempo y desde idéntica o distinta perspectiva? ¿Solo sé que no sé, que nada sé? ¿Es uno y lo mismo el ser y el sé? ¿Nada sé si solo sé nada y nada sé? ¿Sé nada o sé algo sustantivo si sé o digo que sé que no sé nada? ¿Se puede pensar de hecho, incluso en teoría, que no sé nada o que no sabemos nada, que nadie sabe nada de nada? ¿Sé que nada sé si solo sé que nada sé y digo que sé nada? ¿Sé algo si sé que nada sé y proclamo que no sé lo que, en buena lógica empírica, es imposible o más que altamente improbable que no sepa? ¿Sé si hago ver, a quien quiera ver, que no sé si sé o que sé que no sé? ¿No sé nada si digo y aseguro que no sé nada bajo mi -perdón, perdón: MI- palabra de honor? ¿Digo que no sé nada si sé que no sé nada? ¿De qué hablo, de qué hablamos propiamente cuando digo o decimos que no sé? ¿Y si digo, sepa o no sepa, lo que me da la gana? ¿No es el caso que nuestra teorías jamás llegan a apresar la complejidad de lo real? Luego entonces… ¿Es falso o es verdadero si digo que no sé aunque acaso sepa dado que, bien mirado, una cosa es el ser y otra el discurso sobre ese mismo ser en movimiento incesante, en un panta rei siempre olvidadizo? Puestos en materia: ¿para qué me hacen hablar de aquello de lo que no voy a hablar? Más aún: ¿qué se habrán creído? Añado además: ¿de qué van?, ¿saben con quién y de quién están hablando? Etc. Etc.

Bostezos, más bostezos. Muchas caritas de aburrimiento… e indignación.

2. ¿Se podrán probar irregularidades en el caso Convergència-Palau de la Música? En opinión del protagonista, en absoluto. «Creo que no se podrá demostrar ninguna irregularidad porque no las ha habido». Entonces: ¿por qué fue revelado Daniel Osácar de la tesorería del partido? ¿Quién dio la orden? ¿Don Mas, don Pujol junior, don Puig, don Homs?

3. ¿Y qué nos dijo el protagonista de la condena de Unió por los cursos de formación del «caso Treball»? Silencio. Otra cosa.

4. ¿Y de la investigación judicial por la financiación de CDC en el caso Casinos?.Respuesta del protagonista: el caso fue archivado. Nada más que comentar.

5. El protagonista, en 2010: desconocía la existencia de una cuenta de su padre en Liechteinstein; no sabía si era beneficiario de la misma (El juez archivó la causa a petición de la fiscalía anticorrupción: argumento esgrimido: el supuesto fraude fiscal había prescrito).

De nuevo el protagonista, febrero de 2015: «a finales de los años 80, principios de los 90 [con unos 32, 33 años] tuve conocimiento de que mi padre disponía de una cuenta corriente en un banco de L [el LGT]». Nuestro protagonista, rápido como un meteorito en su ascenso, fue nombrado consejero de Economía en julio de 1997 por Jordi Pujol. «Nunca le pregunté nada a mi padre porque no me afectaba a mi, ni a la administración ni a ningún partido político. No eran recursos míos». Pero, por cierto, ¿tenía él firma autorizada para disponer de esa cuenta? Si fue el caso, ¿desde cuándo?

6. También en sede parlamentaria: «no recibí ni un solo euro de la cuenta de L.». Al final se decidió -¿quién?- que la única heredera fuera la madre. «Pueden comprobar en qué condiciones se hizo la declaración del impuesto de sucesiones. Y se pagó lo que se tenía que pagar. Yo no fui beneficiario de los fondos sino que fue mi madre y nadie más» [una hermana suya heredó una parte de un terreno en el Maresme]. Eso sí: ¿quién heredará el patrimonio familiar cuando la madre fallezca? ¿Aceptará una parte de la herencia nuestro protagonista teniendo en cuenta el origen al parecer ilícito de una parte de ella?

6.1. ¿A qué, a quién les recuerda estas explicaciones sobre herencias y padres?

7. Sobre Jordi Pujol y Lluís Prenafeta, de los que no renegó, en términos políticos, durante su estudiada representación: «Si han cometido algún error ya veremos en qué queda». ¿Ya veremos? ¿Estaría minimizando?

8. Admitió nuestro protagonista que se reunió con empresarios -vía Oriol Pujol- en torno a la deslocalización de empresas. «Si se demuestra que ha habido algún tipo de aprovechamiento privado de estas reuniones ello no es culpa del gobierno catalán». ¿De quién entonces? ¿De Oriol Pujol? ¿De CDC? ¿De CiU?

9. ¿Se ha dejado influir su gobierno por supuestas influencias de empresas relacionadas con el clan Pujol-Ferrusola? No, por supuesto. ¿En ningún momento? «El gobierno siempre actuó como tenía que actuar»… La pregunta se impone: ¿cómo tenía que actuar?

10. De la confesión de patriarca del clan el pasado julio de 2014: «Lo que confesó le afecta a él y a su familia y no tiene nada que ver ni con CDC ni con CiU ni con el Gobierno catalán ni conmigo mismo.. Una cosa son las consecuencias de la confesión de Jordi Pujol y otras las causas. Yo noto las consecuencias en mis propias carnes, pero insisto en en que las causas no tienen nada que ver conmigo, ni con el partido ni con la Administración». ¿Nada pero nada que ver? ¿Quién puede creer una «narrativa» de estas características?

11. Sobre una inquietante palabra no formulada por el que fuera amigo próximo de Jordi Pujol Ferrusola, nuestro gran protagonista: «Yo no tenía ni idea del patrimonio acumulado por la familia Pujol. Y si no estuviéramos en el Parlament pondría otra palabra delante». ¿Qué palabra sería esa?

12. Sobre las relaciones de poder en el interior de las 400 familias con destacado mando en plaza: cuando se publicaron en la prensa informaciones sobre las cuentas en Andorra de diversos miembros de la familia Pujol, el protagonista pidió -o ha dicho que pidió- al ex molt honorable que lo desmintiera. El ex banquero le respondió que ya le diría alguna cosa. Y ya está.

Para las hemerotecas, recordemos la afirmación. El protagonista, 9 de febrero de 2015, en sede parlamentaria: «Nunca he sido titular de una cuenta fuera, ni mi esposa tampoco. Y nunca hemos recibido nada de cuentas que estén fuera, ni siquiera en el momento de la sucesión de mi padre. Nunca». Se sobreentiende, por supuesto, que ni directa ni indirectamente.

¿No habría que pedir una nueva comparecencia de nuestro protagonista tras las declaraciones de los miembros del clan Pujol-Ferrusola?

Sí, con urgencia.

II. De gent que anomenen [llaman] classes subalternes.

1. Ciutat morta.

El pasado martes 10 de febrero, el alcalde Xavier Trias se quedó con la B de Barcelona -la millor botiga del món con más hoteles, hostales, pisos y pensiones por centímetro cuadrado- en una mano y sin que le estrecharan la otra.

El comentario de Xavier Artigas y Xapo Ortega, los codirectores del documental sobre el 4F, Ciutat morta, premiado en la categoría de mejor audiovisual: «El Ayuntamiento quiere lavarse la cara porque siguen personándose como acusaciones particulares en casos recientes como Can Ves o el Forat de la Vergonya. Aceptamos el premio del señor alcalde -y el dinero será para lo que deberían hacer ustedes, investigar los abusos policiales».

2. En el centro de la ciudad.

Lo ha contado Clara Blanchar (El País, edición Cataluña, 9 de febrero de 2015)

«No es un suburbio norteamericano. Ni las afueras de una urbe africana. Es Barcelona. A 100 metros de la torre Agbar, 150 del flamante museo del Diseño y 200 de los nuevos y relucientes Encants. Estamos justo en lo que fueron los almacenes de los viejos : Glòries esquina Independència, al lado del antiguo Bar Museo. Por primera vez, los inmigrantes subsaharianos que viven de recoger y vender chatarra han saltado del Poblenou a por encima de la Gran Via. A 500 metros de aquí cada día miles de turistas visitan la Sagrada Familia».

Los habitantes del nuevo asentamiento, señala CB, «proceden de otros pequeños poblados o de los grandes desalojos que desde 2012 se han producido en naves de calles como Badajoz, Zamora, Puigcerdà o Paraguai», relativamente cercanas. Aquí llevan desde antes del verano de 2014. El Ayuntamiento les pidió hace dos semanas que se marcharan. «Al no hacerlo, les ha denunciado. El desalojo es inminente. En cuanto haya orden judicial».

Según CB, el espacio es sórdido, triste y amenazante. Nadie quiere hablar con la prensa. Por supuesto.

«Ni las 50 personas que viven en chabolas levantadas contra el muro de lo que fue un aparcamiento. Ni los que entregan, recogen o clasifican la chatarra en el patio. Ni las mujeres que cocinan con leña en los habitáculos que hay al final del inquietante pasillo de entrada, forrado con telas, cuadros y objetos. Ni los chavales del barrio que entran y salen a los tres minutos. El fin de semana pasado, hubo un incendio en otro solar de la misma manzana».

La nueva miniciudad, la otra cara de la millor botiga del món, es mucho más pequeña. «Pasa desapercibida desde la calle. Los accesos son dos. La puerta de un almacén que está siempre ocupada por una furgoneta; o el citado pasillo, al que se accede desde un mercadillo de objetos rescatados de la basura que no tienen valor ni de chatarra». En el espacio que ocupan las naves está previsto ubicar «parte de la urbanización provisional del lado montaña de la plaza -mientras duren las obras del túnel de la Gran Via- y posteriormente levantar viviendas».

En un primer momento acudieron a ofrecer ayuda miembros de la Asamblea Solidaria contra los Desalojos, explica Manel Andreu. «Es muy complicado porque buscan dónde vivir y que sea compatible con su actividad con la chatarra, lo que no siempre lo es con los albergues que ofrece el Ayuntamiento». Otra persona, que ejerció de portavoz en asentamientos anteriores y que mantiene contacto con el colectivo de Glòries, ha resumido sus demandas: «no quieren un alojamiento y manutención, sino nave por nave [espacio en otra nave vacía]». Para poder vivir.

El consistorio ha explicado que hay personas procedentes de Marruecos, Bolivia, Colombia y también de nacionalidad española. El Servicio de inserción Social y los técnicos de la Oficina del Plan de Asentamientos Irregulares «han visitado regularmente el asentamiento y han topado con muchos obstáculos para llegar a las personas». Han conseguido contactar con siete personas, Se han acogido a la atención social.

«El resto la ha rechazado sistemáticamente». No se fían de gente extraña.

3. Terrassa, gente obrera

Una modista en paro de Terrassa, una ciudad trabajadora relativamente próxima a Barcelona, ofrece cursos a cambio de alimentos.

El Ateneo Candela, un centro social de la población cuenta Ivanna Vallespín, se levanta los jueves con máquinas de coser, patrones, hilos y aguja, y, sobre todo, con mucha solidaridad. Entre los de abajo, que diría Francisco Fernández Buey.

Marieta Escobar, una modista de 37 años, imparte el curso. No cobra las clases. Pide a sus alumnas -¡alumnas todas ellas por lo que parece!- lo que le puedan ofrecer: «ya sea comida u otros favores, como clases de yoga o plantas medicinales» (¡cuidado con esas plantas!). Es su forma de levantar cabeza «en medio de una profunda crisis que ahoga su familia y para recuperar valores en los que cree desde hace años».

Formada en diseño y patronaje, Marieta trabajó como monitora de esplai. Con la costura no ganaba para vivir. Hace cuatro años perdió su trabajo como asistente en una residencia para personas con discapacitados. Los recortes, es decir, las permanentes agresiones antiobreras de don Boi y sus secuaces.

Su pareja está en paro desde hace un año y medio. Tiene una hija de 7 años. En 2014 dejaron de pagar la hipoteca. La prioridad era la comida, no los recibos. Negocia con Caixabank la dación en pago con el apoyo de las PAH. Con sus propias palabras: «Lo más fuerte que he hecho en mi vida es plantarme delante del banco y decir «no os pago ni un duro más». Eso da mucho miedo la verdad».

Marieta es una defensora del cooperativismo. Ya se había interesado por el movimiento y los mercados sociales de intercambio. Luce con orgullo la camiseta de las PAH. Y recuerda malos, muy malos momentos: «Estaba con depresión y no tenía ganas de coger la costura. Fueron mis amigas las que me animaron a volver. Me pidieron que les enseñara a coser».

Con la ayuda de la amistad. Sí se puede, sí se puede, sí se puede.

4. Un comentario de Clara Valverde:

«Ha muerto Vanessa Li, activista EM/SFC de Hong Kong, de un paro cardiaco, una de las razones de muerte temprana en el EM/SFC. Vanessa tenía 34 años y llevaba enferma desde los 19.

Vanessa era conocida por todos nosotros por ser una de las personas que más fondos consiguió (por crowdfunding) para la importante investigación del equipo del Dr Lipkin sobre el rol las bacterias y los virus en el EM/SFC.

Adjuntamos una foto de Vanessa y la carta de pésame del Dr Lipkin y su equipo. Se ha abierto un Facebook para dejar el pésame a su familia:

https://www.facebook.com/vanessali19812015

En carta más personal:

«Ayer me recordaba una compañera de fatigas de la gente que murieron el año pasado de SFC. Algunos murieron de… hambre. Sí, al estar solos, enfermos y tan, tan flojos, no tuvieron fuerzas para pedir ayuda para sentir ni hambre.

Y esta semana murió (fallo cardiaco, muy común en el SFC) una gran activista de SFC a nivel mundial que vivía en Hong Kong a los 34 años, enferma desde los 19. Vanessa Li por internet organizó crowdfundings para investigación y consiguió un montón de pasta para estudios muy importantes, el último sobre el rol de los virus y las bacterias en el SFC».

Otras temáticas de su carta:

«¿Sabes que la presentación del libro de Luis Martín-Cabrera es el 20 de enero? Yo he preparado una pequeña presentación de 15 minutos. Si no puedo levantarme (aunque es al lado de mi casa) lo leerá mi pareja pero espero poder ir. ¿Tú también ibas a hacer algo en la presentación? Estoy esperando a que el de la editorial de Luis -La oveja roja- me mande la información sobre la presentación para hacer difusión.

¿Viste ayer el acto contra la represión organizado por la CGT? lo seguí por streaming y fue muy impresionante ver a los amigos y darse cuenta de la magnitud de la represión. Hubo más de 1.000 personas en las Cotxeres de Sants. Ya está colgado el video del acto:

https://www.youtube.com/watch?v=L7uLIyaEFaI

5. Privatización.

Salud ha anulado de nuevo el concurso para privatizar el CAP de L’Escala. ¿Por qué? Los vecinos de l’Escala y ocho ayuntamientos vecinos exigieron a Salud que paralizase la privatización. En defensa de la sanidad pública.

III. De gent que anomena [llama] als altres «classes subaternes», en ocasiones, recursos humanos.

Salud, Boi Ruiz, ha reducido la plantilla del ICS en 5.659 personas en cuatro años. Supone un 13,6% del personal de la empresa pública.

Salud ha seguido aplicando recortes de plantilla en 2014, por cuarto año consecutivo.

Boi Ruiz, el de la salud no es un derecho, fulmina la espera máxima de seis meses. En once intervenciones.

Un hotel avalado por Jordi Puig funciona desde 2002 sin licencia. Sitges adjudicó el derribo de parte del hotel a una empresa de su gestor. El hermano de Felip Puig es socio del empresario en una constructora.

Bustos se niega a declarar ante el juez por el regalo de relojes a políticos con fondos públicos.

CiU y ERC bloquean la restitución del presupuesto para guarderías.

¿Lo de siempre? Lo de siempre.

IV. Sobre cambios e irracionalidad.

Oriol Junqueras, febrero de 2015: «Es irracional pensar que alguien que no ha cambiado nunca de posición lo pueda hacer en un sentido que nunca se ha dado».

¿De quién estaría hablando el presidenciable? ¿Estaría hablando don Oriol de sí mismo?

PS: Apunta Albert Sánchez Pinyol, el autor de Victus, en un artículo reciente que corre por la red:

«El general Severiano Martínez Anido no desmerecía a sus predecesores: en 1920, como gobernador militar de Barcelona, se enfrentó con el gobernador civil Carlos Bas, a quien acusaba de «blando». Anido le exigió que le dejara fusilar a «gente como Eugeni d’Ors, Lluís Companys, Joaquín Montaner, Francisco Layret, Salvador Seguí, Ángel Pestaña, Mario Aguilar, Guerra del Río, los hermanos Ulled, y otros». En sus memorias Bas narra el diálogo. Bas: «Señor gobernador militar, soy el gobernador civil, no un asesino». Anido: «No es cuestión de asesinar sino de ejecutar. No emplee usted palabras malsonantes».

Unas observaciones que toman pie en comentarios de historiadores de Espai Marx:

1. ASP no ha podido o se le ha olvidado destacar que Martínez Anido era el militar escogido por la patronal catalana -no por la española, tan cerca, tan próxima- para «pacificar» Barcelona. De ser gobernador militar pasó a ser gobernador civil a finales de 1920. Por petición de la patronal de casa nostra al gobierno de «Madrid».

2. Esta patronal catalana, los grandes señores de la Lliga, los Rusinyol y afines, entraron «manu poderosi» en el Gobierno civil, «se introdujeron sin permiso en el despacho del gobernador civil Bas, lo cogieron por los hombros y lo obligaron a viajar a Madrid en el primer tren que salía de la estación de Francia. Bas no sólo no había querido asesinar sino que ¡encima! había promovido una comisión mixta, en la que los de la CNT aceptaron participar (hay una famosa foto de ello) para intentar impulsar una dinámica de negociación» (Martín Ramos dixit). No pudo ser finalmente. Pero no la impidió la CNT, sino la patronal de casa nostra, la emprendedora, la muy cívica y liberal, la ejemplar patronal catalana en la que don Francesc ejerció una influencia prolongada y más que notable.

¡Cómo se pusieron con Julio Anguita cuando habló de ella en estos términos!

3. Será por ello que una avenida céntrica lleva su nombre, el de Cambó, y una estatua a él dedicada sigue en pie, al lado de una de las sedes centrales de Caixabank. Dios los cría y ellos se juntan. Se huelen.

4. La bomba del Coliseum, en efecto, «cayó en Cataluña». El problema con el artículo del autor de Victus, señala otro historiador del colectivo, «es lo que no dice (lo cual, atención, no justifica la censura, no nos equivoquemos). Y lo que no dice es que las más de las veces que el ejército bombardeó Barcelona (en el XIX y el XX) lo hizo animado por el patriciado catalán, incluyendo las bombas que cayeron durante la guerra civil. Y sí, la bomba del Coliseum cayó en Cataluña, pero no cayó «sobre» Cataluña».

El otro olvido, añade el compañero espaimarxista, «es que si hubo una ciudad castigada por bombardeos (de aviación y de cañones, que estaban a tiro de piedra) durante la guerra civil fue Madrid». El ejército, como es razonable pensar y decir, «no bombardeaba «Cataluña», tiraba bombas sobre rojos y otra gente de mal vivir. Y si no que se lo cuenten a los malagueños en la carretera de la muerte, los almerienses masacrados por la escuedra nazi, los vascos de Guernika, e tutti quanti«. Pero si todo lo queremos leer en clave «no nos quieren y llevan trescientos años intentando exterminarnos», pues adelante. Hasta el infinito y más allá. Todo es uno y lo mismo.

5. Una reflexión derivada de otro gran historiador catalán: «[…] pero como que los que desafían la «sacrosanta unidad de la patria» son los periféricos, las regiones históricamente ricas, no ha podido generalizarse en la extrema derecha española un discurso biocultural/biopolítico, el fascismo español ha centrado su concepción totalitaria en la catolicidad (la universalidad) que encima todavía le da -supone él- algo en la muy noble y muy católica América (Ferran Gallego dixit, lo del papel de la catolicidad -universalidad- en el fascismo español)».

Por el contrario, prosigue, «ha sido en esas regiones ricas en las que ha crecido la bio/c-p. El planteamiento völkisch, sobre todo en su versión nacionalsocialista, no es un discurso de reacción, de retorno al pasado, sino de modernidad. Y los modernos se sienten superiores por naturaleza. Esa es la raíz del sabinismo y de los hijos y nietos de Pompeu Gener, que no solo están los reconocidos sino los que lo son sin saberlo; me aterrorizó ver cómo, sin llegar a los extremos de PG, Pau Vila, Serra Rafols,y el mismísimo Companys caían en el discurso de la superioridad natural (casi podría decir biogeológica) en los tiempos de la guerra civil cuando aludían con desprecio -y algo más- a la masa de inmigrados».

6. De otro gran profesor e historiador de Espai. «Molt instructiu aquest intercanvi. El semi-oblidat Josep R. Llobera va publicar fa ja alguns anys un text a parer meu singularment il.luminador sobre la gènesi i pervivència del concepte de «Volkgeist» en el si del catalanisme cultural i polític. Es troba a «Història i antropologia. A la memòria d´Àngel Palerm» (Publicacions Abadia de Montserrat, 1984); «L´Avenç» el reproduí un parell d´anys més tard (nº63, 1986). S´hi comernten els deliris de Pompeu Gener, però també l´obsessió d´altres autors per establir oposicions binàries que, malgrat el seu exotisme, des de Llorens i Barba, J. Cortada -i un llarg etcètera- en endavant no han deixat d´obrir-se camí fins avui mateix. Com a curiositat, us relaciono les que va dissenyar V. Almirall:

Caràcter castellà (Semític): -Generalitzador -Imaginatiu -Formalista -Idealista -Autoritari -Centralista

Caràcter català (no Semític): -Analitzador -Reflexiu -Positivista -Materialista -Orientat a la llibertat -Particularista.

Nota:

[1] Para todas las citas -menos El Roto 2015- he tomado como fuente el magnífico ensayo de Martín Alonso: El catalanismo, del éxito al éxtasis. I. La génesis del problema nacional, Mataró (Barcelona), El Viejo Topo, 2015.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.