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¿Debería la izquierda respaldar la intervención en Libia?

Fuentes: En Lucha

La intervención de los países occidentales en Libia ha causado divisiones dentro de la izquierda genuina, algo que no es sorprendente. Si observamos el mundo árabe, veremos una combinación de repulsión generalizada hacia Muammar Gaddafi y de respaldo a las revoluciones que ha limitado la oposición al uso de las armas occidentales contra las fuerzas […]

La intervención de los países occidentales en Libia ha causado divisiones dentro de la izquierda genuina, algo que no es sorprendente. Si observamos el mundo árabe, veremos una combinación de repulsión generalizada hacia Muammar Gaddafi y de respaldo a las revoluciones que ha limitado la oposición al uso de las armas occidentales contra las fuerzas del dictador.

Mi viejo amigo Gilbert Achcar, un oponente constante al imperialismo occidental, ha dado la razón más inteligente a favor de la intervención: según él, los anti-imperialistas deberían estar preparados, en esta situación, para llegar a un compromiso1.

Gilbert tiene razón: los revolucionarios han aceptado, en ocasiones, la ayuda de los poderes imperialistas. Poco después de la Revolución Rusa de 1917, los ejércitos alemanes invasores amenazaban la recién nacida República Soviética. Entonces, Gran Bretaña y Francia ofrecieron ayuda. Lenin escribió al comité central bolchevique, diciendo: «Por favor, añadid mi voto a favor de aceptar las patatas y las armas de los ladrones imperialistas anglo-franceses»2.

Gilbert también tiene razón cuando rechaza los argumentos de algunos entre la izquierda que afirman que Gaddafi, hasta cierto punto, es «progresista», y que los líderes de la revolución en Bengazi respaldan a al-Qaeda. Él se pregunta: «¿Es que alguien que se crea de izquierdas puede ignorar la súplica de protección de un movimiento popular, incluso si se la piden a los policías-bandidos imperialistas, cuando el tipo de protección que piden no es el que podría usarse para controlar su país?».

Leyendo esto es cuando me empiezo a poner nervioso, sobre todo porque Gilbert después añade que los Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña han intervenido gracias a la presión de la opinión pública para evitar una matanza en Bengazi.

Comparémoslo con los comentarios del «filósofo» conservador francés Bernard Henri-Lévy. En el último número del Sunday Observer, Henry-Lévy se jactaba de su papel en convencer al presidente francés Sarkozy para que éste impulsara la intervención occidental: «Lo que importa es que se ha reconocido el devoir d’ingérance [el derecho a no respetar la soberanía de un país si se producen violaciones graves de los derechos humanos]3.

Defensa

Para «BHL», como se le conoce en Francia, lo que cuenta es la política de la intervención: se trataría de una oportunidad, después del desastre de Iraq, de reconstruir el respaldo a la idea -defendida por Tony Blair- de que los poderes occidentales tienen el derecho de atacar los estados que -según su parecer- hayan infringido sus normas.

Pero esta no es la razón más importante a favor de la intervención, al menos por lo que respecta a los Estados Unidos. Gilbert echa por tierra el argumento de que Gaddafi no habría continuado permitiendo el acceso al petróleo libio a las compañías occidentales. Estoy de acuerdo: el petróleo, aquí, no es lo principal. Para los Estados Unidos, se trata de hacer todo lo posible para detener la ola revolucionaria que amenaza con arruinar su sistema de dominación.

Un asesor de la Casa Blanca habló con el Financial Times. «El lugar de Oriente Medio que menos nos interesa es Libia», dijo. Por lo que respecta al reino insular donde está estacionada la Quinta Flota estadounidense, y que corre el riesgo de verse atrapado en una guerra entre Arabia Saudí, tierra rica en petróleo, e Irán, el asesor añade: «El lugar que más nos interesa es Bahrain»4.

La represión en Bahrain por parte de tropas saudíes representa el intento de los dirigentes de Arabia Saudí y de las demás autocracias del Golfo de suprimir el embate revolucionario. Barack Obama y su administración han criticado duramente la represión en dicho país, y también en Yemen. Su esperanza es que las revoluciones sean un medio para reestructurar las sociedades árabes, de manera que surjan estados neoliberales más estables. El ataque a Gaddafi es un gesto que les asocia a las revoluciones y que, sobre todo, les facilita la intervención política.

BHL describe su participación en un mitin de revolucionarios en Bengazi, y cómo les convenció de pedir la ayuda occidental. Por supuesto que se trata de una fanfarronería, pero la anécdota ilustra los inmensos esfuerzos que se están dedicando a asimilar las revoluciones.

Hay un último argumento, utilizado tanto por Gilbert como por BHL: la intervención ha evitado una matanza en Bengazi. La triste verdad es que las matanzas son un rasgo crónico característico del capitalismo, y la izquierda revolucionaria, por desgracia, es demasiado débil para impedirlas.

Hasta que no seamos más fuertes, al menos debemos ofrecer claridad política sobre las implicaciones y las consecuencias de los acontecimientos.

Alex Callinicos es profesor de teoría social en el King’s College de Londres, y autor de libros como «Los nuevos mandarines del poder americano» o «Un manifiesto anticapitalista» y miembro destacado del Socialist Workers Party, organización hermana de En lucha en Gran Bretaña.

Artículo publicado en Socialist Worker, periódico del Socialist Workers Party, organización hermana de En lucha en Gran Bretaña.

[1] Gilbert Achcar, «A Legitimate and Necessary Debate from an Anti-Imperialist Perspective», ZNet, 25 March 2011

[2] The Bolsheviks and the October Revolution: Central Committee Minutes of the Russian Social-Democratic Labour Party (Bolsheviks) August 1917-February 1918 (London, 1974), p. 215

[3] K Willsher, «Libya: Bernard-Henri Lévy Dismisses Criticism for Leading France to Conflict», Observer, 27 March 2011

[4] Richard McGregor and Daniel Dombey, «Foreign Policy: A Reticent America», Financial Times, 23 March 2011

http://enlucha.org/site/?q=node/15919

[VERSIÓ EN CATALÀ: http://www.enlluita.org/site/?q=node/3482 ]