Ali Salem Tamek es un activista reconocido internacionalmente. Durante años fue miembro del Consejo Nacional del Foro Verdad y Justicia. Su representatividad es tal que ha sido recibido por el Parlamento Europeo y galardonado con el premio «José Antonio González Caraballo». Fue encarcelado por las autoridades de Marruecos por sus actividades en pro de la […]
Ali Salem Tamek es un activista reconocido internacionalmente. Durante años fue miembro del Consejo Nacional del Foro Verdad y Justicia. Su representatividad es tal que ha sido recibido por el Parlamento Europeo y galardonado con el premio «José Antonio González Caraballo». Fue encarcelado por las autoridades de Marruecos por sus actividades en pro de la defensa de la autodeterminación del pueblo saharaui. Su encarcelamiento por las autoridades marroquíes le permitió constituirse en un portavoz de los presos políticos saharauis. Es asimismo presidente de la Comisión Preparatoria del Congreso Constituyente del Colectivo de defensores saharauis de los Derechos Humanos (CODESA). Su labor es mundialmente conocida, lo que ha llevado a muchos a calificarlo como «un símbolo de la lucha pacífica por la autodeterminación del pueblo saharaui».
Ali Salem Tamek ha sido encarcelado y torturado por las autoridades marroquíes en diversas ocasiones por sus actividades relacionadas con la defensa de los derechos de su pueblo. Su trayectoria es tan conocida y valorada en el exterior que obligó al propio embajador norteamericano en Rabat a pronunciarse en torno a las vejaciones que había sufrido Salem en las cárceles de Marruecos. Thomas Raily, cuestionado por los periodistas del rotativo «Al Ayan» acerca de la prohibición por parte de las autoridades marroquíes de la celebración del Congreso Constituyente de CODESA, declaró que «el respeto a la libertad de expresión y a los legítimos derechos de los ciudadanos es la única vía para que prosperen las negociaciones entre Marruecos y los representantes del pueblo saharaui». El embajador añadió finalmente que «se debe permitir a los compañeros de Ali Salem Tamek que hagan sus reuniones y se expresen libremente».
Hace unos pocos días Ali Salem visitó Tenerife, donde realizó unas sustanciosas declaraciones a los medios de comunicación de esa isla. Pese a la tradicional reserva que los portavoces de los movimientos saharauis suelen mantener cuando se trata de opinar sobre las posiciones de los personajes de la política canaria, en esta ocasión Ali Salem no tuvo pelos en la lengua a la hora de manifestar cual es su opinión en relación con determinadas manifestaciones formuladas por algunos personajes de nuestra vida política. «Las declaraciones del Alcalde de las Palmas son las más peligrosas y equivocadas que nunca he escuchado», declaró Ali Salem en relación a las recurrentes manifestaciones anti saharauis que cada cierto tiempo realiza Jerónimo Saavedra. «El peligro no está solamente – continuó diciendo Salem- en la intoxicación de la opinión pública canaria que pretenden, sino en que suponen un incentivo para que el régimen marroquí siga reprimiendo a los niños, a las mujeres y a los ancianos… para que ejerza la práctica de la tortura psicológica y física contra ellos…. El alcalde de Las Palmas -enfatizó el conocido activista saharaui de los derechos humanos -con sus declaraciones legitima cualquier vía de radicalización y cortar las raíces de los saharauis, su origen pacífico y su lucha legal».
Como se recordará, Saavedra, en pasadas fechas, en unas declaraciones a los medios de comunicación de las islas, asoció la lucha del pueblo saharaui con el terrorismo islamista. Con tales manifestaciones el Alcalde de las Palmas se situaba más a la derecha que el político conservador James Baker, ex secretario de estado norteamericano, que ha calificado la lucha del pueblo saharaui como «limpia justa y honesta».
«El pueblo saharaui – puntualizó Salem Tamek -, nunca ha ejercido el terrorismo… La propuesta que el Frente Polisario entregó a Secretario General de la ONU el pasado mes de Abril, garantiza físicamente los derechos y los intereses de los colonos marroquíes establecidos en el Sahara Occidental y, también, abre la posibilidad de obtener la nacionalidad saharauis en caso de independencia». En relación con el espantajo «terrorista» esgrimido por Saavedra en sus declaraciones, Salem terminó diciendo que «en mi opinión, si algún integrismo real sacude a toda la región ese es el provocado por la represión que ejerce Marruecos contra su propia población civil y contra los civiles saharauis en las zonas ocupadas». Y concluyó puntualizando: «es en Marruecos donde campan a sus anchas los terroristas como reacción a los abusos y a la falta de asistencia crónicos de la monarquía a su propio pueblo».
Tampoco tuvo Ali Salem pelos en la lengua al referirse al reciente reposicionamiento de Lorenzo Olarte en relación con el Sahara. Como se sabe, el ex presidente del gobierno autónomo canario y conocido político, se ha adscrito últimamente a las tesis autonomistas defendidas por Marruecos. «Ese señor habla únicamente desde sus intereses económicos y por su bienestar personal en detrimento del pueblo saharaui», dijo Salem. Y añadió: «Sus declaraciones no tienen ninguna repercusión ni en Canarias ni en el Sahara, y yo, francamente, prefiero no darles más importancia que la que se merecen». Refiriéndose a la influencia que las declaraciones de ambos personajes podían tener sobre la opinión publica canaria, Alí Salem Tamek manifestó: «Somos vecinos y hermanos del pueblo canario desde hace siglos y eso no lo impedirá ni Rabat, ni Saavedra, ni Olarte.»