El líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, ha trasladado sus condolencias por la muerte del líder revolucionario cubano Fidel Castro, un «gigante entre los gigantes» y ha expresado el agradecimiento de los saharauis al apoyo dado por Cuba a su causa. Ghali expresa el «profundo pesar» del Gobierno y del pueblo saharaui por la noticia […]
El líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, ha trasladado sus condolencias por la muerte del líder revolucionario cubano Fidel Castro, un «gigante entre los gigantes» y ha expresado el agradecimiento de los saharauis al apoyo dado por Cuba a su causa.
Ghali expresa el «profundo pesar» del Gobierno y del pueblo saharaui por la noticia en una nota oficial dirigida a Raúl Castro y recogida por la agencia de noticias saharaui, SPS. Ghali es además de secretario general del Frente Polisario, presidente de la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática.
«Gigante entre los gigantes», Castro decidió con «coraje y convicción inquebrantables el rumbo de la Humanidad hacia la liberación de los pueblos de las cadenas de la opresión y la injusticia», ha afirmado Ghali. «Tuvo tiempo para ver realizados parte esencial de sus sueños desde esa convicción revolucionaria, generosa, solidaria en Latinoamérica, en África y en Asia», ha añadido.
Asimismo, el presidente saharaui ha anunciado un día de luto nacional y ha expresado su agradecimiento por el «apoyo multiforme, solidario y generoso» de Cuba a la causa saharaui. Desde hace décadas, numerosos estudiantes saharauis han viajado a Cuba para recibir una educación para luego regresar a los campamentos de refugiados saharauis instalados desde la década de 1970 en la región argelina de Tinduf.
La colonia española del Sáhara fue ocupada en 1975 por Marruecos y Mauritania tras los Acuerdos Tripartitos, firmados el 14 de noviembre de 1975, que cedían la soberanía del Sáhara Español a estos dos países.
Tras una breve guerra, el Polisario expulsó a Mauritania y firmó la paz y el reconocimiento mutuo con sus milicias a las puertas de Nuakchot, pero Marruecos consolidó su control sobre el territorio y miles de saharauis huyeron de la salvaje represión.
En 1991 se firmó un alto el fuego entre ambas partes, que se comprometían a la celebración de un referéndum de autodeterminación organizado por la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental, pero desde entonces las disputas sobre el censo para la votación –Marruecos quiere que voten los colonos marroquíes– ha impedido la consulta. Ahora 140.000 refugiados saharauis viven en los campamentos de Tinduf, Argelia.