La tan cacareada ayuda del gobierno español a África se resume en control policial y programas de cuidado de fronteras, además de venta de armas, como nos demostró el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en su última visita al continente africano. Continuando la lectura comprobará cuan generoso es el gobierno patrio cuando de […]
La tan cacareada ayuda del gobierno español a África se resume en control policial y programas de cuidado de fronteras, además de venta de armas, como nos demostró el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en su última visita al continente africano. Continuando la lectura comprobará cuan generoso es el gobierno patrio cuando de colaborar con los necesitados se trata.
España ampliará las patrullas conjuntas que realizan la Guardia Civil y la Gendarmería Real Marroquí, tanto en el área mediterránea como en la atlántica frente a las Islas Canarias, y enviará oficiales de enlace a Mauritania, Senegal y Cabo Verde con el objetivo de controlar en origen la inmigración ilegal procedentes de estos países, según informó hoy el ministro del Interior José Alonso.
Esta actuación se sitúa en el marco del denominado proyecto «Sea Horse», un programa de lucha contra la inmigración ilegal, financiado por la Comisión Europea, con 2 millones de euros, y que se desarrollará a lo largo de los próximos tres años.
«Se trata de un proyecto muy importante para el Gobierno y va a suponer un paso decisivo en el control de los flujos de inmigración ilegal, especialmente los que proceden del sur», señaló Alonso, destacando el descenso producido entre 2003 y 2005 en la llegada de pateras (en torno a un 40 por ciento).
En el programa participarán, además de los países citados, Italia, Alemania, Portugal, Francia y Bélgica, y todos aquellos miembros de la UE que lo soliciten. Además, a lo largo de 2007 y 2008, se pretende implicar a otros países africanos. El objetivo principal es fomentar la cooperación entre países de origen, tránsito y destino contra este tipo de mafias, con el fin de «detener el tráfico de seres humanos».
Patrullas conjuntas
En primer lugar se pretende ampliar las patrullas conjuntas con Marruecos. Actualmente se encuentran entre Fuerteventura y Tarfaya (zona atlántica) y entre Tánger y Algeciras (Mediterráneo). Actualmente, se está acordando con Marruecos la puesta en marcha de nuevas patrullas entre Tetuán y Málaga, y entre las costas de Alhucemas y Granada. En un futuro, se pretende ampliar estas patrullas a otros países africanos.
Por otra parte, por un período determinado, se destacarán oficiales españoles en Nouadhibou (Mauritania); Dakar (Senegal); Alhucemas y Tarfaya (Marruecos) y Santa María (Cabo Verde). Igualmente, se destacarán oficiales extranjeros en Fuerteventura (procedentes de Marruecos y Mauritania) y en Almería (de Marruecos).
El programa también prevé la invitación de representantes policiales de estados miembros de la UE y africanos, así como de los organismos internacionales Frontex, Europol, y Comisión Europea; cursos de formación de oficiales africanos y cursos de servicio marítimo (marineros, patrones y buzos).
Igualmente, está prevista la creación inmediata de los Centros Regionales de Vigilancia Marítima (CRVM) en Las Palmas, Algeciras y Valencia, coordinados desde el Centro Nacional situado en Madrid; además de programas de intercambio de información entre estados.
Viaje a mauritania
Por otra parte, la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, anunció hoy que realizará próximamente un viaje a Mauritania para analizar con las autoridades de este país la reciente oleada de embarcaciones, tipo ‘cayuco’ (similar a una canoa), llegadas a las Islas Canarias procedentes de este país.
Según Rumí, desde el Gobierno se está trabajando para fortalecer y cooperar con este país de manera similar a como se realiza con Marruecos para el control de sus fronteras y la detección de las mafias de inmigración ilegal.
La responsable de Inmigración indicó que las últimas oleadas de pateras confirman de nuevo que las mafias buscan rutas alternativas para introducir flujos migratorios ilegales. En las últimas tres semanas, todas las pateras llegadas a Canarias procedentes del norte de África procedieron de Mauritana.