El Senado de EEUU aprobó en octubre de 2009 el presupuesto militar más elevado para un país en la historia humana: Un total de 626 mil millones de dólares. Esta suma no incluye otros 400 mil millones que EEUU está invirtiendo en sus guerras en Irak y Afganistán. La suma representa casi la mitad del […]
El Senado de EEUU aprobó en octubre de 2009 el presupuesto militar más elevado para un país en la historia humana: Un total de 626 mil millones de dólares. Esta suma no incluye otros 400 mil millones que EEUU está invirtiendo en sus guerras en Irak y Afganistán. La suma representa casi la mitad del presupuesto total de EEUU. Esta tendencia «suicida» no es novedosa. Muchos analistas señalan que es precisamente la economía de guerra norteamericana la que alimenta la demanda de una economía capitalista insaciable.
Dicen que sin guerra no hay crecimiento. Ahora el lema cambió: sin guerra no hay recuperación económica. Los ideólogos de Washington insisten en que el armamentismo, las guerras y la destrucción masiva son muy saludables para un paciente enfermo como el capitalismo norteamericano. (Cuando no había crisis decían que el armamentismo era la medicina necesaria para no enfermarse).
Gran Bretaña es el país que sigue en importancia en términos de gastos militares. Pareciera increíble pero es cierto: Gran Bretaña tiene un presupuesto bélico de 50 mil millones de dólares. Aproximadamente el 7 por ciento de EEUU. Sigue en tercer y cuarto lugares, Francia y Alemana, respectivamente, con presupuestos de 40 mil millones cada uno. En quinto lugar está Rusia (39 mil millones) y China en sexto lugar con 35 mil millones. Los cinco países que siguen a EEUU en importancia tienen combinados un presupuesto militar de 210 mil millones.
América latina no se queda atrás en los gastos militares (sin poder compararse con EEUU). En total sus gastos militares suman 34 mil millones de dólares. Casi alcanza a China pero apenas representa el 5.5 por ciento del presupuesto militar de EEUU. Chile, Colombia y Brasil se convirtieron en los países con más gastos militares de la región durante 2008. Chile lidera el gasto militar por habitante con 290 dólares «per cápita» en 2008, mientras Colombia gastó 115, Ecuador 89 y Brasil 80. En términos absolutos, medidos en miles de millones de dólares, el país que más gasta es Brasil, con el 45 por ciento del total latinoamericano, seguido por Colombia y Chile.
Según un estudio realizado por SIPRI (Suecia) y FLACSO (Chile), el país latinoamericano que más gasta es Brasil con casi 15 mil millones de dólares, seguido por Colombia con 5.5 mil millones de dólares. Chile casi llega a 5 mil millones de dólares y Venezuela alcanza los 2.2 mil millones en gastos militares. Argentina y Perú siguen con 1.7 y 1.1 mil millones. Estos seis países son responsables del 89 por ciento del presupuesto militar de América latina.
El presupuesto colombiano no se puede calcular con mucha certeza desde que EEUU decidió escalar el Plan Colombia con una intervención militar directa en este país. Los países de Sur América (el Consejo Suramericano de Defensa de la UNASUR) le han pedido a Bogotá que presente un informe con los detalles concernientes al incremento de los gastos militares. El gobierno colombiano se ha negado a cumplir con sus obligaciones echándole la culpa al secretismo de Washington.
EEUU es en la actualidad el proveedor más importante de equipo militar (que incluye entrenamiento de personal y otros «servicios») a los países latinoamericanos. Además del Plan Colombia, recientemente el presidente de EEUU, Barack Obama, incrementó el presupuesto militar del Plan Mérida que incluye a México, Centroamérica y Panamá. También mantiene una relación militar privilegiada con Perú, Chile y Argentina. Desde fines del siglo XIX, EEUU ha sido el principal mercado de armas para la región, muchas veces promoviendo carreras armamentistas entre los países para venderles más y dominarlos.
– Marco A. Gandásegui, hijo, Profesor de la Universidad de Panamá e investigador asociado del CELA).
Fuente original: http://alainet.org/active/