La Corte Laboral de Sudáfrica falló ayer a favor del Estado prohibiendo a los trabajadores de los servicios esenciales participar en la huelga por tiempo indefinido que los sindicatos del sector público iniciaron el pasado miércoles en todo el país. Por servicios esenciales se considera en este caso los vinculados a los sectores de enfermería, […]
La Corte Laboral de Sudáfrica falló ayer a favor del Estado prohibiendo a los trabajadores de los servicios esenciales participar en la huelga por tiempo indefinido que los sindicatos del sector público iniciaron el pasado miércoles en todo el país.
Por servicios esenciales se considera en este caso los vinculados a los sectores de enfermería, trabajadores de la electricidad y los funcionarios de prisiones.
Más de un millón de empleados públicos afiliados a la Confederación de Sindicatos de Sudáfrica (COSATU) hicieron uso de su derecho a huelga, los hospitales y las escuelas son los sectores más gravemente afectados por la huelga.
La policía sudafricana disparó el jueves balas de goma para dispersar a personas que bloqueaban los caminos y trabajadores de la salud evitaron que pacientes ingresaran a hospitales, mientras la huelga de más de un millón de funcionarios públicos crecía.
Pese a que las leyes que protegen el derecho a la huelga determinan asimismo que los servicios esenciales -tales como guardias hospitalarias de emergencia- deben seguir funcionando, el abandono de las funciones ha sido casi total en los hospitales municipales y el ejército ha tenido que intervenir enviando médicos y personal de enfermería.
La huelga comenzó tras varias semanas de infructuosas negociaciones entre el Gobierno y los sindicatos, que exigen un aumento salarial del 8,6 por ciento y 1.000 rands (alrededor de 100 euros) mensuales en subsidios para la vivienda.
La Administración sudafricana ha hecho una oferta «inamovible» del 7 por ciento de aumento en los sueldos de los funcionarios y 700 Rands al mes para el pago de sus viviendas.
La lucha de los trabajadores en las callescha colocado en una situación crítica a la alianza tripartita gubernamental sudafricana integrada por el Congreso Nacional Africano (CNA), COSATU y el Partido Comunista de Sudáfrica (SACP)
rCR