Tres empresas españolas han llevado a cabo la mayor parte de la desactivación de las minas antipersonas durante los últimos cinco años en Angola. El país africano ha sacado un concurso público, financiado por la UE, para ampliar la labor de desminado. Las millones de minas antipersona que ahora retiran, sin embargo, fueron sembradas después […]
Tres empresas españolas han llevado a cabo la mayor parte de la desactivación de las minas antipersonas durante los últimos cinco años en Angola. El país africano ha sacado un concurso público, financiado por la UE, para ampliar la labor de desminado. Las millones de minas antipersona que ahora retiran, sin embargo, fueron sembradas después de ser vendidas por países europeos. Ahora hacen negocio con su retirada.
Durante la guerra civil de Angola, que duró 27 años, y estuvo financiada por las grandes potencias globales, sobre todo Rusia, Europa y Estados Unidos, se sembraron en el territorio angoleño millones de minas antipersona que han sesgado la vida de miles de personas durante la guerra y también en la postguerra. No sólo han matado, sino que también han causado heridas incurables a decenas de miles de personas. Sólo en 2010, en Angola se desactivaron casi 6.000 minas y 641 antitanques.
Según la Comisión Nacional de Desaminado y Asistencia Humanitaria, se logró reducir los accidentes a apenas 20 durante 2010, por el medio centenar de fallecidos un año antes y los 70 de 2007. Durante este año, el trabajo que se está realizando con la protección de las zonas minadas ha reducido las muertes a tan sólo cinco personas. Las acciones que han llevado a cabo, según la mencionada comisión también ha tenido una labor importante en la concienciación de la población y del conocimiento de los habitantes de las regiones afectadas de las zonas que están minadas.
Durante este año el Gobierno angoleño ha sacado adelante dos concursos para seguir erradicando y desactivando todas aquellas bombas fabricadas en el hemisferio norte que fueron sembradas en el hemisferio sur. Da la casualidad de que las empresas especializadas en desminar Angola, en la mayoría de las ocasiones, son europeas, continente del que partieron inicialmente las minas para ser sembradas. Particularmente, 3 empresas españolas han llevado a cabo la mayor parte de este trabajo.
El desminado es una tarea con un coste económico muy alto. El trabajo consiste en localizar y desactivar las minas. Es una tarea costosa económicamente, neutralizarla puede costar hasta 2.000 euros y desminar un terreno equivalente a un campo de fútbol, que se siembra de minas en una hora, supone 3 meses de trabajo.
Ahora, la UE ha sacado un concurso a licitación, a través del Gobierno de Angola, para continuar adelante con la nuetralización de sus minas. El concurso está valorado en tres millones de euros.
Fuente original: http://www.guinguinbali.com/index.php?lang=es&mod=news&task=view_news&cat=1&id=2164