La disolución de ETA es una buena noticia para todos, el tiempo que actuó, generó 850 víctimas en atentados terroristas, generando mucho dolor a quienes sufrieron la pérdida de seres queridos. Sabadell sufrió dos atentados, el primero en 1990, murieron 6 policías, el segundo, en 1992 murió Antonio José Martos, su muerte nos golpeó brutalmente, […]
La disolución de ETA es una buena noticia para todos, el tiempo que actuó, generó 850 víctimas en atentados terroristas, generando mucho dolor a quienes sufrieron la pérdida de seres queridos.
Sabadell sufrió dos atentados, el primero en 1990, murieron 6 policías, el segundo, en 1992 murió Antonio José Martos, su muerte nos golpeó brutalmente, era un joven militante comunistas y sindicalista de CCOO, un amigo y compañero, quienes más sufrieron fueron su familia, su pareja y su hija que era muy pequeña y ha tenido que vivir sin su padre.
Estas muertes son muy dolorosas como cualquier muerte absurda e injusta, es natural que las familias no puedan perdonar y exijan que se mantengan la continuación del trato discriminatorio a los presos de ETA, como es el cumplimiento íntegro de las condenas, en cárceles lejos de sus familias que son las padecen esta situación.
El gobierno y la sociedad deben alegrarse de la disolución de ETA, después de 7 años sin atentados. Cualquier persona sensata, desea que el país vasco viva en paz y la lucha política sea por vía pacífica, en los cauces existentes, y utilizarlas para reclamar el derecho de todo pueblo como Catalunya, Galicia o Euzkadi, a la autodeterminación, con las fuerzas políticas que defendemos ese derecho en él estado, para cambiar el marco constitucional, mientras no se consiga no habrá plena democracia.
Lamentable PP y ciudadanos en lugar de celebrar la disolución, utiliza el sufrimiento de las víctimas para oponerse a esta decisión, tan importante para todos y especial para los vascos. Aquellos que ejecutaron los atentados están cumpliendo penas superiores a cualquier preso condenado por asesinato, incluso quienes han manifestado su arrepentimiento y pedido perdón.
Los dirigentes del PP y Ciudadanos están preocupados por el crecimiento del apoyo en todo el estado a una España plurinacional, donde convivir los diversos pueblos y naciones con lengua, cultura y costumbres propias.
No quieren perder la utilización de las victimas que tantos votos les ha generado, no reconociendo lo positivo del abandono de la violencia por ETA, y están preocupados por el camino iniciado en Euskadi, donde la vía democrática sea el único instrumento utilizado por las fuerzas políticas vascas.
Hablan continuamente del sufrimiento de las víctimas de ETA, pero en las fosas comunes hay 100.000 víctimas republicanas fusiladas impunemente que continúan enterrados e impiden que las miles de familias puedan enterrar a sus familiares, generándoles un dolor que dura 70 años, estas no tienen derecho, al dolor de las familias víctimas de ETA, a pesar que fueron fusilados por defender la constitución democrática republicana, ante el golpe de estado fascista, estas heridas siguen abiertas negándose a cerrarlas después de 40 años del pacto constitucional de 1978. Estos hechos muestran el tipo gobierno que tenemos y que PP y Ciudadanos son partidos autoritarios que utilizan las victimas del terrorismo para torpedear el proceso de paz en Euskadi, siendo responsables de la existencia del mantenimiento de fosas comunes y el sufrimiento de miles de familias, son los herederos del franquismo instalados en puestos importantes del aparato judicial y los gobiernos, que el bipartidismo PP+PSOE ha mantenido durante todo este periodo democrático, con el apoyo de los partidos nacionalistas CiU, PNV y CC.
Juan Guil. Miembro de Cataluña en Común y PSUC viu
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