En la sede de ACSUR-Las Segovias tuvo lugar la entrevista de Ameco Press a Nidal Hamdache , integrante de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH), invitada por esta organización a la mesa redonda «Derechos Humanos en el Magreb : ¿papeles mojados?», realizada la semana pasada en el Ateneo de Madrid. Nidal Hamdache es economista, […]
En la sede de ACSUR-Las Segovias tuvo lugar la entrevista de Ameco Press a Nidal Hamdache , integrante de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH), invitada por esta organización a la mesa redonda «Derechos Humanos en el Magreb : ¿papeles mojados?», realizada la semana pasada en el Ateneo de Madrid.
Nidal Hamdache es economista, forma parte del Bureau Central de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) y es coordinadora del Comité central de jóvenes. Desde el inicio de su participación en AMDH, forma parte del Comité de Mujeres de la asociación.
Con sede en Rabat, la Asociación Marroquí de Derechos Humanos, trabaja por «la protección de la dignidad humana», así como por «el respeto de todos los derechos humanos en su universalidad y su carácter global». Además, de la «protección, defensa y promoción de estos derechos».
La AMDH es una de las asociaciones de Marruecos que más miembros tiene, con 15.000 adherentes dentro de los cuales un 20 por ciento son mujeres. Con presencia en diferentes ciudades y pueblos de Marruecos, realizan un trabajo de base principalmente, en los derechos de las mujeres, los derechos políticos y civiles, entre otros.
Derechos humanos e igualdad de género
«A contra corriente de un gran río que van intentando subir», así graficó Hamdache el quehacer de AMDH. Asimismo, apuntó que una de estas corrientes serian los grupos islámicos, «que van en aumento que tienen un discurso en que la mujer siempre sale perdiendo, y luego esta el conservadurismo del Estado que es muy difícil moverlo de sus estrategias y voluntades».
En la organización una de las cosas que tiene gran importancia es la igualdad de género. Cuando se fundo la AMDH en 1979, no había ninguna mujer en el Comité ejecutivo. Actualmente, no sólo participan un gran número de mujeres, sino que además quien preside la asociación es una mujer. «Lo que intentamos es tener una media al menos de un tercio de mujeres en la asociación, en la perspectiva de la igualdad», indicó Hamdache .
Según enunció Hamdache en Marruecos «no existe una toma de conciencia colectiva de igualdad, la no legalidad esta presente y no tiene nada que ver con cultura o más estudios, porque puedes ver que a un profesor de universidad diciendo que la mujer no es igual al hombre, que el hombre es mejor y según dice el Corán».
Magreb
Sobre la realidad de los derechos humanos de las mujeres del Magreb , Hamdache enfatiza «todos los países del Magreb el contexto general tiene una serie de características iguales». En este sentido, acerca de los derechos políticos de estos países Hamdache asegura que «el denominador común es que la presencia de la mujer en los parlamentos, en todo lo que sea puntos de decisión, es bastante baja, a lo mejor en Marruecos puede haber mayor presencia de la mujer en todos estos órganos de decisión, más que en Libia».
En relación con la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), acogida en 1979 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, Hamdache expresó «la CEDAW Argelia, Túnez y Marruecos, la han ratificado pero con muchas reservas, lo que hace que se debilite la firma de la convención».
Cada año la AMDH realiza todo tipo de informes sobre derechos humanos, derechos económicos de las mujeres y otros. En esta dirección la asociación cada vez que Marruecos presenta un informe sobre derechos humanos ante las Naciones Unidas o ante cualquier otro organismo, esta organización presenta uno paralelo.
Ley de la familia
Concerniente a la ley de la familia en Marruecos Hamdache sustentó «tuvo un impacto muy mediático, todo el mundo se enteró de lo que había hecho Marruecos», pero que en realidad, «la ley de la familia está por debajo de las normas internacionales de igualdad».
«La ley de la familia autoriza la poligamia, un hombre puede casarse con cuatro mujeres. Además, ha fijado el casamiento de las chicas a los 18 años, pero deja la puerta abierta a todo tipo de excepciones. Nos encontramos con muchas chicas que se casan con 14, 15 y 16 años, es decir, que los jueces lo autorizan el casamiento de menores» agregó Hamdache .
Referente a las agresiones sexuales en Maruecos, Hamdache señaló «no hay ninguna ley que restringa esto y esta totalmente autorizado. Una de las reivindicaciones del movimiento feminista y de la AMDH es una ley que ponga en su sitio las agresiones, que estén penadas. La violencia hacia las mujeres forma parte del cotidiano, del día a día de las mujeres. Cuando hay una agresión, la mujer tiene que ir a la policía, denuncia la agresión, pero la policía les pide testigos, y sino hay testigos, pues no puede realizar la denuncia».
Derechos laborales
En el ámbito de la igualdad entre mujeres y hombres en el trabajo, un tema de suma importancia, por ejemplo, es la baja por maternidad, la cual «no es respetada por las empresas», ya que según explicó Hamdache , «si tienes una baja por este motivo corres el riesgo de que no te vuelvan a coger. La igualdad entre hombres y mujeres no la conciben, da lo mismo que sea un hombre o una mujer la que este en la empresa».
En paralelo, otro tema relevante son las mujeres que trabajan en las casas, las llamadas ‘ petit bom ‘. Al respecto Hamdache dijo «no hay ninguna ley que las proteja, estas mujeres que suelen emplear la clase media y alta, trabajan las 24 horas, por salarios irrisorios, y sufriendo todo tipo de agresiones por parte de la familia con la que trabaja. Hay un montón de problemas abusos sexuales, violaciones, mujeres embarazadas, muchas de las ‘ petit bom ‘ son madres solteras que ha embarazado el jefe, también hay chicas que han muerto por torturas».
Un gran porcentaje de la economía de Marruecos se basa en la agricultura, sector en el que volvemos a encontrarnos con la discriminación de las mujeres y la invisibilización de su trabajo. «Las mujeres tienen derecho a heredar la tierra; tiene que heredarla el marido o el hermano mayor, y si el padre muere, ellas no pueden heredar, y esas tierras se las queda el Estado. Hay doscientas mujeres en este momento en esa situación», añadió Hamdache .
La defensora de los derechos humanos también hizo referencia a la situación de las mujeres en el Sahara. «Como bien se sabe siempre la que sufre más es la mujer. Sin embargo, las mujeres tienen un rol más central, más de matriarcado, ellas toman muchas más decisiones, que las que pueden tomar las mujeres marroquíes; por ejemplo si una mujer en Marruecos se divorcia esta por debajo del status normal de cualquier mujer, esta mal vista, esta señalada de por vida. En cambio en el Sahara las divorciadas se pueden volver a casar y no hay ningún problema.»