Los gobiernos europeos se reunirán en Marruecos para abordar sus políticas migratorias con países en tránsito, como el reino alaouita. Mientras la realidad se cobra vidas y se violan derechos fundamentales y leyes internacionales como La Convención de Ginebra. Todas estas realidades deberían debatirse en una cumbre que sólo se plantea como un intercambio de […]
Los gobiernos europeos se reunirán en Marruecos para abordar sus políticas migratorias con países en tránsito, como el reino alaouita. Mientras la realidad se cobra vidas y se violan derechos fundamentales y leyes internacionales como La Convención de Ginebra. Todas estas realidades deberían debatirse en una cumbre que sólo se plantea como un intercambio de dinero a cambio de control migratorio por parte de países donde no hay ningún tipo de proceso democrático. En la madrugada del día 3 de julio, un grupo de 25 personas de Camerún, Nigeria, Guinea, Mali, Congo, Burkina y Costa de Marfil intentaron saltar la valla que separa Marruecos de Melilla.
Los tres costa marfileños que participaron forman parte de un grupo que logró entrar en Melilla las navidades pasadas y que pidieron asilo ante la guardia civil. Petición que la benemérita no respetó, devolviéndoles a Marruecos por la puerta pequeña de la alambrada. Posteriormente este grupo hizo una petición de asilo ante las autoridades españolas en Marruecos, aunque estas peticiones se hicieron en muy malas condiciones para los demandantes debido a su persecución constante por parte del gobierno marroquí. Aún no se ha podido confirmar si alguno de estos costamarfileños forma parte de las víctimas de la valla.
Los inmigrantes y vecinos marroquíes de la zona aseguran haber escuchado muchas ráfagas de disparos tanto del lado español como del marroquí. En la confusión estos compañeros no saben quién abrió fuego primero y quien disparó al aire. Varios testigos de nacionalidad burkinabe aseguran haber visto tres cadáveres: uno del lado español, otro en el medio de las dos vallas, que fue trasladado a Nador y un tercero en el lado marroquí. También nos han confirmado el estado de máxima gravedad de un compañero de Burkina Faso que fue trasladado al hospital de Nador y que a día de hoy no podemos confirmar si ha muerto o no.
En las redadas posteriores a este intento de salto treinta y cuatro ya han sido detenidas por las autoridades marroquíes y están en el puesto de Mariguari (en las inmediaciones fronterizas con Melilla). Algunos de ellos están heridos de diversa consideración y no han recibido por el momento, ningún tipo de asistencia médica.
Actualmente hay 40 personas que intentan vivir en los alrededores de Nador, su situación se ha venido deteriorando debido al hambre y a la violencia con que las fuerzas de seguridad marroquíes actúan contra ellos.
De hecho hace un mes catorce personas, de forma desesperada, intentaron saltar la valla de Melilla y fueron interceptadas por los militares marroquíes que emplearon una fuerza desmedida contra ellos, causando siete heridos graves y una persona que hasta día de hoy sigue desaparecida
Coincidiendo en las mismas fechas, una patera se ha hundido en la costa marroquí de Laayoune, con un saldo de más de veintiún muertos.
En estas costas grupos de demandantes de asilo e incluso personas con el estatuto de refugiado reconocido por ACNUR Marruecos esperan intentar pasar a Europa. Un refugiado costamarfileño explica claramente el porqué los refugiados intentan de manera desesperada salir de este país: » Estamos buscando si entre los compañeros muertos hay compañeros refugiados,,, por el momento tenemos a varios desaparecidos pero puede que hayan llegado a Canarias, o que estén aún esperando en alguna parte de las costas de Laayoune…. Todos tenemos miedo a meternos en una patera, a jugarnos la vida y además a pagar mil euros por el viaje, pero en Marruecos nos estamos muriendo, nos matan poco a poco… Tenemos el Estatuto de Refugiado, reconocido por Ginebra, hemos huído de la guerra, de la violencia para encontrarnos en otro país donde no tenemos ninguna garantía. Marruecos no respeta la Convención de Ginebra, ni el Estatuto de Refugiado y te puedo explicar claramente por qué:
1.- No tenemos acceso a la Carta de Residencia marroquí. Es decir, circulamos con un papel expedido por ACNUR Marruecos y que no es respetado en el caso de que la policía marroquí te pida la documentación. Dice la policía que somos también clandestinos y nos deporta a la frontera con Argelia sin ningún problema… Después tenemos que volver andando, lo peor son las mujeres que en su mayoría son violadas en esa frontera por bandidos y militares marroquíes y argelinos sin escrúpulos.
2.- Cuando un demandante quiere pedir asilo en Marruecos sólo puede hacerlo en la sede de ACNUR Rabat y para muchos no hay medios para llegar hasta allí.
3.- Los refugiados y demandantes no tenemos ningún tipo de asistencia, ni de derecho al trabajo, ni a la asistencia médica, ni derecho al colegio para nuestros hijos. Los hombres solemos vivir de la mendicidad, de la caridad de las ONgs asistenciales y las mujeres están obligadas a prostituirse de una manera o de otra.
4.- Los refugiados y refugiadas negros nos enfrentamos también a un racismo social e institucional que nunca jamás habíamos visto en otros países.
Así podeis comprender que el nivel de violencia que sufrimos en Marruecos que nos trata peor que a delincuentes, nos hace plantearnos perder nuestras vidas para encontrar otro país donde se respete verdaderamente la Convención de Ginebra.
Sólo espero que esta vez ningún refugiado haya tenido que morir y si su muerte se ha producido que al menos sirva para que las autoridades europeas e internacionales nos escuchen».