“La única forma en que la clase trabajadora negra en EE. UU. puede lograr justicia a través de las elecciones presidenciales es intensificando la lucha a fin de construir un partido alternativo que se oponga a los partidos Republicano y Demócrata, que son capitalistas e imperialistas», sostiene Freeman.
La opinión de la izquierda negra sobre las elecciones estadounidenses importa
Netfa Freeman es organizador de Acción Comunitaria Panafricana y del Comité de coordinación de la Alianza Negra para la paz y animador del programa de entrevistas por radio Voces con opinión con sede en el Distrito de Columbia, y simpatizante activo de las Revoluciones Cubana y Bolivariana. En una entrevista exclusiva realizada en línea desde Washington D.C., para TeleSur, Freeman señaló que el mensaje principal que tiene para los lectores es que: “Nuestra lucha, vista desde el contexto de la izquierda negra es por el poder”. En respuesta a una pregunta acerca de las ilusiones sobre el Partido Demócrata como alternativa a los Republicanos de Trump, Freeman declaró:
“La única forma en que la clase trabajadora negra en EE. UU. puede lograr justicia a través de las elecciones presidenciales es intensificando la lucha a fin de construir un partido alternativo tremendo que se oponga a los partidos Republicano y Demócrata, que son capitalistas e imperialistas.”
Por supuesto, se está refiriendo a un partido político alternativo que incluye a todos los sectores de la sociedad, independientemente del color.
Contra el sistema bipartidista, ¡todo, todo!
El cuento de que más vale el “menor de dos males” es un mal endémico que reina en la política estadounidense excesivamente ponzoñoso. Inevitablemente conduce a guerras ideológicas viciosas y continuas que no conciernen únicamente los ciclos de elecciones presidenciales.
Freeman continúa:
“Los negros en los Estados Unidos deben resolverse a rechazar de una vez por todas la falsa noción del menor de los males entre los candidatos de sus dos partidos. Ambos adoptan y mantienen políticas genocidas contra las personas de ascendencia africana a nivel nacional e internacional. A diferencia de Trump, el historial de políticas contrarias a los intereses de los negros que Joe Biden ha apoyado [como senador en el Congreso desde 1972] se remonta a 1975, cuando aparece como partidario racista de la segregación y luego, en 1994, cuando realiza en calidad de coautor un ‘proyecto de ley en materia de criminalidad’ que ayudó a la proliferación de encarcelamientos masivos de personas de raza negra y mulata. Si bien Biden fue vicepresidente de Obama, el valor del equipo militar transferido a los departamentos de policía de la nación se incrementó en un 2,400%, el cual se ha utilizado principalmente contra los miembros de las comunidades negras y mulatas.”
¿El “menor de dos males”? Hablemos sin rodeos…
Cuando se le pidió a Freeman que precisara el tema de la presión que ejerce el “menor de dos males”, su respuesta consistió en una dura crítica del sistema político de los Estados Unidos:
“Siempre digo que para ser presidente de los Estados Unidos la condición sine qua non es estar dispuesto a bombardear a bebés en países extranjeros, al tiempo que pretender que en el país no hay presos políticos, a pesar de que muchos languidecen en prisión desde los años setenta”.
Cuando Freeman alude al “bombardeo de bebés”, ¿se refiere a la guerra que Obama inició en 2015 contra Yemen? ¿O bien señala solo la punta del iceberg que escondía bajo su masa la bomba fabricada en los Estados Unidos mató a 40 niños yemeníes? ¿Quién puede olvidar las horribles escenas de la guerra bipartidista estadounidense contra Vietnam cuando el mundo tuvo ante la vista los cuerpos de mujeres y bebés que yacían en zanjas después de que infantes de marina los hubieran masacrado en Mai Lai?
Los medios información corporativos y ambos partidos institucionales jamás mencionan que en los Estados Unidos hay más de 50 presos políticos. Se trata de miembros de las comunidades negras o autóctonas, en su mayoría. Algunas de estas personas intervinieron en el Partido de las Panteras Negras, en movimientos de pueblos autóctonos y en otros movimientos revolucionarios de los años 1960-1970. Más recientemente, encarcelaron a personas que participaron en las manifestaciones que surgieron tras el asesinato policial del joven negro Mike Brown en Ferguson, Missouri (2014), y en el enfrentamiento que tuvo lugar en la reserva Standing Rock del pueblo Sioux, en Dakota del Norte (2016) contra las naciones autóctonas y sus aliados.
Si en el mundo existe alguien que puede comprender plenamente la negativa de la izquierda estadounidense a dar por olvidados a estos prisioneros políticos que se están pudriendo y resisten todavía en el cruel, violento y laberíntico sistema penitenciario de los Estados Unidos, es el pueblo cubano. La nación cubana íntegra, apoyado por países como Venezuela, se negó a aceptar como inevitable el abandono de los Cinco Cubanos.
Desde el asesinato de George Floyd en mayo, uno de los conceptos más importantes que surgen como consecuencia de la rebelión actual, es que en los Estados Unidos no es posible disociar la lucha contra el gobierno racista, de la lucha contra las guerras imperialistas en el extranjero, tal como Freeman antes afirmó vívidamente.
El centro de atención actual de la población más perseguida y oprimida en los Estados Unidos, la afrodescendiente, es su insistencia magnánima de que en los Estados Unidos no podrá haber paz, hasta que haya paz para otros pueblos del mundo que son víctimas de la agresión estadounidense.
Malcolm X sobre las elecciones presidenciales de 2020
¿No fue Martin Luther King Jr. quien relacionó la situación interior con la guerra de los Estados Unidos contra Vietnam en sus discursos que pronunció justo antes de su asesinato? La guerra, el militarismo, el racismo y sus preocupaciones sobre la pobreza generalizada sistemáticamente se ven cuidadosamente censuradas por el debate actual que alimenta la revuelta en curso. Lo único que fideliza la élite estadounidense es el discurso de “Tengo un sueño”, blanqueando así cínica y convenientemente el legado de Martín Luther King Jr., que ofrece una expresión de moda apta para la cooptación, además de que tranquiliza la conciencia a los liberales.
De manera similar, los liberales citan a Malcolm X muy vagamente como si su pensamiento y acción fueran una noción romántica de tiempos pasados. Sin embargo, su legado continúa en las mentes y corazones de millones de estadounidenses de todas las razas. ¿Elecciones presidenciales 2020? Malcolm X lo explicó hace ya tiempo:
“Los conservadores blancos no son amigos del negro, pero al menos no intentan ocultarlo. Son como lobos; muestran sus dientes en un gruñido que mantiene al negro siempre consciente de dónde aparecen entre ellos. Pero los liberales blancos son como zorros; también muestran sus dientes al negro más fingen estar sonriendo. Los liberales blancos son más peligrosos que los conservadores blancos; atraen al negro, y cuando el negro huye del lobo que gruñe, huye hacia las fauces abiertas del zorro sonriente. Uno es lobo, el otro zorro. No importa cuál sea cual, ambos te comerán”.
Fidel Castro supo con quién encontrarse durante su visita a Nueva York en 1960: se reunió con Malcolm X.
No obstante, dejemos la última palabra en boca de una experta “neutral” en materia de política estadounidense: la periodista australiana no negra pero conocida Caitlin Johnstone quien escribió en la prestigiada revista de izquierda estadounidense Consortium:
“Si estas protestas terminan, no será porque los tiranos del Partido Republicano, como Donald Trump, logren insistir en la necesidad de que el ejército estadounidense flagele a los manifestantes bajo silencio. Será porque los manipuladores liberales habrán conseguido cooptar y reducir su impulso.”
¿Cierto?