Recomiendo:
0

Los señores del Capital decretan la muerte en masa por inanición

Fuentes: Black Agenda Report

Traducido para Rebelión por Jesus Maria y Mariola Garcia Pedrajas

Después de haber aplastado a los campesinos de todo el mundo y haber convertido la comida en, simplemente, una mercancía más para la manipulación global, los Señores del Capital han desatado sobre la humanidad la amenaza, no, la certeza, de hambrunas masivas. La mega-iniciativa criminal se centra en Estados Unidos, el antiguo «granero del planeta», cuya conversión a productor masivo de biocombustibles ha hecho que los precios de los cultivos esenciales se disparen a niveles más allá del alcance de millones de pobres en el mundo. Esta muerte de millones de personas se traduce en beneficios multimillonarios para los Señores del Capital, asesinos a escala masiva, cuyo único talento reside en «la producción de desastres encadenados, cada uno más letal que el anterior».

Fidel Castro llamó a los biocombustibles «genocidio», y tenía razón. Y no puede haber ninguna duda sobre los perpetradores de este genocidio global: los Señores del Capital que formulan las políticas interna y exterior de los Estados Unidos. Esta política requiere que veinte millones de acres de maíz, en estados como Iowa, se conviertan de comida a combustible. Como era esperable, tal desvío masivo, disparó casi inmediatamente el precio de todos los demás alimentos básicos – un desastre global conseguido fácil y rápidamente por el hecho de que, en las últimas décadas, la producción de alimentos a escala planetaria ha sido tomada por la agroindustria – los parásitos humanos especuladores que controlan el modo en el que los alimentos se compran y venden, a quién y con qué propósito. Estos Señores del Capital son asesinos en una escala masiva.

Se trata, ni más ni menos, de crímenes contra la humanidad, y que provocarán, sin remedio, la destrucción de la vida de millones de personas que ya están al mismo borde del precipicio.

«Los Señores del Capital han impuesto la muerte selectiva por hambre en todo el planeta»

El llamado «mercado» – que es, de hecho, un club de multimillonarios que distorsionan y destruyen cualquier cosa de valor para la humanidad que tocan – será la muerte de todos nosotros, y más rápido que por medio del calentamiento global, el cual está ya bastante acelerado por este ansia macabra y avariciosa de cultivar comida para los coches antes que para las personas. En semejante entorno asesino – manipulado exclusivamente para los beneficios de los Señores del Capital – ni los árboles ni los campesinos tienen una oportunidad. La ONU dice que necesita, aproximadamente, quinientos millones de dólares para los casos más críticos de hambrunas, pero ninguna cantidad de ayuda de emergencia es suficiente para reparar el daño de la subida salvaje de precios que ya se ha producido – y que pondrá miles de millones en los bolsillos de los Señores del Capital.

La agroindustria ha acabado con los pequeños agricultores en Estados Unidos y ha empobrecido y empujado fuera de sus tierras a incontables millones de campesinos en todo el mundo. Ahora los Señores del Capital han impuesto la muerte selectiva por hambre en todo el planeta. Las gentes que viven con dos dólares o menos de renta al día tendrán que morir y, después, a medida que suban los precios, les seguirán los que ganan tres dólares y así sucesivamente.

Los hombres que se benefician de semejantes asesinatos en masa usan términos como «ajuste estructural» y «fundamentos económicos» para darle un barniz racional a un sistema caótico que han creado con el único propósito de robar a gran escala. Al final, los Señores del Capital han llegado a dominar un único arte: la producción de calamidades encadenadas, cada una más letal que la anterior. Pronto, si no es ya, los pobres de Haití no tendrán ningún aceite para cocinar con arcilla que constituye su dieta de «dirt pies»[1]. Los Señores del Capital los habrán convertido en basura para el consumo y la muerte de los haitianos.

Notas de los traductores

[1] Desde el golpe de estado auspiciado por EEUU y Francia en Haití, que derrocó al presidente electo Aristide, la pobreza de los haitianos ha alcanzado tal nivel que su principal dieta consiste en pasteles hechos de arcilla («dirt pies»).

Artículo original

http://www.blackagendareport.com/index.php?option=com_content&task=view&id=589&Itemid=40

Jesus Maria y Mariola Garcia Pedrajas son colaboradores de Rebelión. Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y la fuente.