Traducido del inglés por J. M.
«Hacemos un llamado al gobierno israelí a poner fin a todas las relaciones diplomáticas y económicas con Eritrea, incluyendo la presencia militar israelí en las islas de Eritrea, la suspensión de los servicios de inteligencia en común y el acabar con todo apoyo económico a la dictadura».
Más de 100 solicitantes de asilo eritreos viajaron a Jerusalén en autobús el domingo para realizar una manifestación frente al Ministerio de Asuntos Exteriores. Los manifestantes aguantaron el fuerte calor con el fin de transmitir correctamente su mensaje al gobierno israelí.
Las consignas de las manifestaciones pedían a Israel que deje de apoyar a la dictadura de Eritrea y ponga fin a toda relación con ese país. También hicieron un llamado al gobierno de Israel a trabajar para liberar a los presos políticos recluidos en las cárceles de Eritrea.
Antes de la demostración, los solicitantes de asilo eritreos trabajaron en conjunto para redactar una carta en nombre de la comunidad. He leído esta carta en la protesta y se reproduce íntegra a continuación:
«Nosotros, los solicitantes de asilo eritreos en Israel, pedimos al gobierno israelí que ponga fin a todas las relaciones con el gobierno de Eritrea. Sólo podremos ir a casa a Eritrea cuando nuestro país esté a salvo y en este momento el apoyo de Israel a la dictadura está haciendo que este sueño se aleje aún más de la realidad.
Hacemos un llamado al gobierno israelí a poner fin a todas las relaciones diplomáticas y económicas con Eritrea, entre ellas terminar con la presencia militar israelí en las islas de Eritrea Dahlak y Fatma, la suspensión de la colaboración de inteligencia y suspender todo el apoyo económico a la dictadura.
Las extensas y graves violaciones de los derechos humanos llevadas a cabo por el régimen de Eritrea, así como el apoyo del gobierno de Eritrea a las organizaciones terroristas como Al Shabab,afiliada a Al-Qaeda, han provocado las sanciones a Eritrea por parte de las Naciones Unidas, Estados Unidos, la Unión Europea, Canadá y Australia. Israel es un país potente en el ámbito internacional y creemos que debe unirse al resto del mundo y exigir a la restauración de la democracia y los derechos humanos en Eritrea.
Los solicitantes de asilo eritreos en Israel quieren volver a casa. Ahora Israel es parte de la razón por la que no podemos. Ponga fin a sus relaciones con Eritrea.
Tenemos la visión de una Eritrea pacífica y democrática. Tal Eritrea sería amiga del mundo, incluyendo la amistad con Israel. Tener una relación de muchos años con una Eritrea democrática está más dento de los intereses de Israel que apoyar una dictadura cuya estabilidad es cuestionable.
Esta semana se cumple el décimo primer aniversario de la detención del G-15, un grupo de ministros y otras personalidades que pidieron elecciones democráticas en Eritrea. Nunca han sido juzgados ni han oído sus acusaciones, se presume que muchos han muerto después de años de tortura en cámaras subterráneas. Con la mente opuesta en los miles de presos políticos que sufren en Eritrea, vamos a aprovechar esta oportunidad para informarle sobre la cárcel de la dictadura conocida como Eritrea.
El régimen totalitario en Eritrea utiliza el reclutamiento ilimitado en el ejército como un medio de mantener el control sobre la gente. Se somete a trabajos forzados a hombres y mujeres soldados de edades que van entre los 18 años los cincuenta y tantos; su servicio militar incluye trabajos agrícolas en los campos de los dirigentes y proyectos de construcción de edificios no en provecho del Estado, sino más bien para complementar los bolsillos de las personas cercanas al gobierno. Los eritreos que se oponen a su esclavitud en las fuerzas armadas son incluidos en listas negras, torturados, encarcelados en las mazmorras subterráneas y pueden ser asesinados. Los habitantes que son capturados desertando del servicio obligatorio son arrestados, torturados y pueden ser asesinados.
Como el gobierno de Eritrea percibe a los fieles religiosos como amenazas a su poder, el gobierno limita significativamente la libertad religiosa. El gobierno ha prohibido todo excepto cuatro confesiones religiosas y los seguidores de las religiones prohibidas desaparecen y son encarcelados sistemáticamente. Los líderes de las religiones permitidas cuyos seguidores crecen significativamente y, por lo tanto, amenazan al gobierno también son metódicamente torturados y encarcelados.
Del mismo modo, Eritrea prohíbe todos los medios de comunicación independientes, cualquiera que publique un pensamiento diferente en un medio de información alternativo es directamente torturado y encarcelado. Incluso aquellas personas que trabajan para el canal de televisión estatal están constantemente bajo vigilancia ya que el gobierno busca a potenciales disidentes. Eritrea llega incluso a limitar la libertad de reunión, cualquier persona que quiera reunir más de tres personas debe tener un permiso del gobierno.
Estaríamos encantados de reunirnos con usted y seguir debatiendo estos temas y esperamos tener noticias suyas pronto para concertar una reunión.
Muchas gracias.
Atentamente,
Solicitantes de asilo eritreos.»
Isayas Teklebrhan es un refugiado de Eritrea que vive en Israel desde 2010. Es licenciado en Física por la Universidad de Asmara en Eritrea. Salió de Eritrea después de pasar siete años en prisión por su llamado a promover la democracia.
Para más información sobre el tema, ver la cobertura especial +972′ Seeking Asylum in Israel
Fuente: http://972mag.com/asylum-seekers-israels-support-for-eritrea-prevents-us-from-returning-home/56438/
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