Desde la cresta de la ola por su gran victoria en la primaria de Florida, Mitt Romney trató ayer de desviar la crítica de que la carrera en el Partido Republicano se había vuelto destructivamente negativa, diciendo que era un buen entrenamiento para la «ácida y maliciosa campaña» que desatará más adelante este año el […]
Desde la cresta de la ola por su gran victoria en la primaria de Florida, Mitt Romney trató ayer de desviar la crítica de que la carrera en el Partido Republicano se había vuelto destructivamente negativa, diciendo que era un buen entrenamiento para la «ácida y maliciosa campaña» que desatará más adelante este año el presidente Barack Obama. Romney, quien derrotó a su más cercano rival, Newt Gingrich, por casi 15 puntos en Florida y parece dispuesto a capturar Nevada el sábado, es nuevamente el favorito para la nominación. Sin embargo, las encuestas en Florida muestran que todavía no está ganando los corazones del ala conservadora del partido, y Gingrich está prometiendo quedarse en la lucha.
El clima negativo de la carrera de Florida y los nuevos descubrimientos sobre la influencia de los grupos financistas independientes conocidos como comités de acción política -o súper PACs (por sus siglas en inglés- están dejando un sabor amargo en algunos activistas del partido opositor. Nuevos archivos de la Comisión Federal de Elecciones revelan que el grupo que apoya a Mitt Romney, Restore Our Future (Restauren nuestro Futuro), reunió 30 millones de dólares el año pasado y todavía tiene unos 24 millones más para gastar.
«Los súper PAC fundamentalmente han cambiado la forma en que se dirigen las campañas y tuvieron un enorme efecto en la carrera», dijo Saul Anunzis, el ex presidente del Partido Republicano de Michigan. «Si uno encuentra un donante que está dispuesto a jugar en grande, puede tener un impacto increíble.» Gingrich probablemente hubiera estado obligado a abandonar la competencia de no haber recibido donaciones por 10 millones de dólares en su súper PAC de un multimillonario de Las Vegas.
Si Romney resulta nominado, recurrirá a sus súper PAC para neutralizar la destreza del presidente Obama para reunir fondos y cuyo propio PAC, Priorities USA, reunió sólo 4,2 millones de dólares el año pasado. Surgió de los archivos ayer que Steven Spielberg ha contribuido con grandes sumas a Priorities USA, mientras que Harold Simmons, un banquero multimillonario de Texas, le dio al grupo de Gingrich 500.000 dólares. El grupo de Romney está siendo alimentado en gran parte por grandes nombres de la industria de las inversiones. Seis de estos partidarios le dieron a Romney un PAC de un millón de dólares cada uno.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.