Miles de trabajadores, líderes, activistas y hasta niños de todo el país marcharon ayer a lo largo del puente Golden Gate unidos por el clamor de seguro médico universal, accesible y con calidad para todos en Estados Unidos. A las siete de la mañana, ante un cielo nublado, unos 10 mil manifestantes emprendieron una pacífica […]
Miles de trabajadores, líderes, activistas y hasta niños de todo el país marcharon ayer a lo largo del puente Golden Gate unidos por el clamor de seguro médico universal, accesible y con calidad para todos en Estados Unidos.
A las siete de la mañana, ante un cielo nublado, unos 10 mil manifestantes emprendieron una pacífica caminata, sin importarles la lluvia ligera que caía sobre ellos, armados tan sólo con el sonido de sus voces de reclamo.
Y no es para menos, cifras proporcionadas por los organizadores de la marcha denominada «Llenemos el vacío del cuidado de la salud», indican que unos 44 millones de personas no tienen un seguro médico en la nación, mientras que millones más ni siquiera cuentan con ningún tipo de protección.
Lo que es peor, trascendió durante un mitin que se realizó al finalizar la marcha, bajo la administración del presidente George W. Bush, unos cuatro millones de estadounidenses han perdido su seguro médico; mientras que los costos por el cuidado de la salud se han incrementado casi 50%; en tanto que las primas han subido hasta tres veces más que el promedio salarial.
Rocío Escobar, una mujer latina quien trabaja como conserje en Boulder, Colorado y quien viajó hasta San Francisco para participar en el evento, dijo que recién canceló su plan médico, ya que sólo le pagaba una mínima parte de sus gastos.
«De una cuenta médica de 600 dólares debido a una infección respiratoria, el seguro sólo me pagó 150 dólares», observó.
Escobar quien trabaja jornadas de 10 horas para una compañía líder de biotecnología, dice que hace poco fue diagnosticada con un padecimiento que le produce fuertes dolencias en sus muñecas a causa del movimiento continuo en las labores de limpieza.
Sin embargo, la compañía se negó a pagarle los gastos médicos, por lo que ahora vive atemorizada de que su precaria salud se vaya a agravar, y sin un seguro médico que la respalde.
Llamado
Eliseo Medina, vicepresidente ejecutivo del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU) dijo a La Opinión que la movilización de ayer es una llamada de atención para los gobiernos estatales y federal en torno a un sistema de salud que está deteriorado y en crisis en la nación.
Detalló que de los 44 millones de personas sin seguro médico en el país, un 33% son latinos.
También calificó de igualmente grave el hecho de que muchos trabajadores de tiempo completo tampoco tienen seguro médico.
Medina afirmó que uno de los objetivos de la marcha de ayer fue también hacer conciencia entre los candidatos a la presidencia para que aborden el problema de la falta de atención médica para millones de estadounidenses.
«Pero sobre todo lo que queremos es que hagan compromisos en materia de cuidado de la salud durante su campaña y por eso los vamos a estar presionando», enfatizó.
Los políticos, observó, no se dan cuenta que significa un riesgo potencial para la salud nacional el que millones no tengan acceso al cuidado médico.
«No sólo es un gasto serio para las salas de emergencia a las que acuden de último minuto quienes no tienen un seguro médico, sino que se corre el riesgo de epidemias ante la falta de protección para la salud», mencionó.
El líder sindical sostuvo que además el movimiento nacional de ayer llevaba como fin darles un mensaje a los votantes para decirle que tienen el poder de crear el cambio en materia de salud.
Jehmy Greene, presidente de la organización «Rock the Vote», quien también participó y patrocinó la caminata de cuatro millas de ayer, dijo que el año pasado casi 800 mil jóvenes perdieron su seguro médico».
En tanto, Andrew L. Stern, presidente de SEIU, uno de los sindicatos más grande del país que aglutina a trabajadores de la salud afirmó que cada día, más y más familias no pueden pagar el seguro médico, por lo que queremos decir a los líderes electos que es tiempo de encontrar soluciones.
«En el país más rico del mundo, cada hombre, cada mujer y niño debe tener acceso al cuidado de la salud», reclamó.
La movilización que abarrotó los caminos laterales del Golden Gate, y no provocó demoras en el tráfico del puente, considerada histórica por los organizadores, se realizó en forma simultánea en 150 ciudades del país.
Marcó además el inicio de la Convención Internacional del SEIU que arranca este lunes 21 de junio con sesiones plenarias, y que culminará el miércoles.
Además del SEIU y de Rock the Vote, la organización «Trabajos con Justicia» y el proyecto Americanos por el Cuidado de la Salud anunciaron ayer la formación de una coalición para generar puentes de unión a lo largo de todo el país en la búsqueda de una solución a la crisis de salud.
Y Lisa Scout quien también viajó a San Francisco desde Greenville, Iowa, para apoyar el día nacional de acción por la salud, dijo que hará lo que sea para evitar que otros vivan el gran dolor que ella padeció en carne propia.
Lisa perdió a Janelle, su hija de 18 años, en 2001, luego de que los doctores se negaron a proveerle tratamiento para una infección respiratoria, ya que no contaba con un seguro médico.
«Hacer este viaje y esta caminata por la salud, es un tributo a la memoria de mi hija muerta», expresó.
La marcha a la que se calcula asistieron 10 mil personas, terminó con un mitin en el Crissy Field, un área de descanso ubicada al inicio del puente Golden Gate.