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Posicionamiento y propuesta de la candidatura encabezada por Enrique Santiago

Negociaciones de cara a la VIII Asamblea Federal extraordinaria de Izquierda Unida

Fuentes: Rebelión

El pasado día 1 de marzo de 2006 se celebró el primer encuentro desde enero de 2005 entre las candidaturas presentadas a la VIII Asamblea Federal de IU encabezadas respectivamente por Gaspar Llamazares y Enrique Santiago. Desde la celebración del Consejo Político Federal de 22 de enero de 2005 en el que se procedió a […]

El pasado día 1 de marzo de 2006 se celebró el primer encuentro desde enero de 2005 entre las candidaturas presentadas a la VIII Asamblea Federal de IU encabezadas respectivamente por Gaspar Llamazares y Enrique Santiago. Desde la celebración del Consejo Político Federal de 22 de enero de 2005 en el que se procedió a elegir el Coordinador General de IU, apenas se han mantenido conversaciones entre representantes de ambas candidaturas. Ello a pesar del compromiso expresado por Gaspar Llamazares, prácticamente en todas las reuniones de Presidencia y Consejo Político Federal celebradas desde enero 2005, de construir la dirección mas «participativa y amplia » de la historia de Izquierda Unida. No debería haber sido de otra forma después de una Asamblea en la que el actual Coordinador General no obtuvo el apoyo más que del 49,5% de los delegados participantes. Sin embargo, la realidad ha sido muy diferente a las buenas intenciones expresadas por la actual dirección de Izquierda Unida en estos 14 meses. Como expresara un miembro de la Presidencia Federal de IU en la ultima reunión de este órgano, nunca una minoría mayoritaria en Izquierda ha maltratado e ignorado tanto al 50,5 % de la organización.

Sin embargo, no es momento de recrearse en los errores políticos de la actual dirección de Izquierda Unida, ni de criticar una deriva política ya en exceso criticada. Todos conocemos bien la complicada situación a que ha sido llevada Izquierda Unida desde la VIII Asamblea Federal hasta ahora. Es tiempo más bien de analizar como es posible relanzar nuestro movimiento político y social ante los urgentes e importantes retos que se nos avecinan. Dos convocatorias electorales a un año vista -elecciones municipales y buena parte de las elecciones autonómicas- y unas elecciones generales como muy tarde en el mes de Marzo de 2008, si es que no se produce una disolución anticipada de las Cortes antes de dicha fecha, nos obligan a todos y todas los que formamos parte de izquierda Unida a aunar esfuerzos anteponiendo lo principal frente a todo aquello que en la situación de emergencia política que vivimos pueda resultar secundario.

En estos momentos, todos los que participamos o apoyamos la candidatura encabezada por Enrique Santiago, y mas allá, todos los que apuestan por conquistar la presidencia del gobierno para la izquierda transformadora, debemos en primer lugar esforzarnos por construir una amplia mayoría en izquierda Unida que pueda representar al menos a un 70 u 80 % de la organización, como condición imprescindible para relanzar nuestro proyecto, reconducir la estrategia política de IU y abordar el futuro inmediato con garantías de crecimiento político y electoral. En este proceso de relanzamiento, de construcción de una nueva mayoría suficientemente amplia y de negociaciones para alcanzar los anteriores objetivos, es imprescindible incorporar a la que fue la candidatura encabezada por el compañero Sebastián Martín Recio. Las conversaciones habidas entre la candidatura que representamos y estos últimos nos indican no solo que ello es posible sino que estos compañeros comparten lo esencial de nuestro análisis de forma muy mayoritaria. También es necesario incorporar a todas aquellas corrientes, federaciones y posiciones de IU que apuestan por el fortalecimiento de nuestro proyecto en particular y de la izquierda transformadora de todo el estado en general.

El proceso de negociación entre las dos candidaturas mayoritarias en la VIII Asamblea Federal de IU se ha iniciado con la designación de los representantes de cada una de ellas en este proceso. Por parte de la candidatura encabezada por Gaspar Llamazares la negociación esta siendo llevada adelante por los compañeros Manuel Cámara y Joan Josep Nuet. Por parte de la candidatura encabezada por Enrique Santiago, la delegación está compuesta por los compañeros Fran Pérez, Jorge G. Castaño, Juan Ramón Sanz, Enrique Centella y Gines Fernández.

Tras la primera reunión celebrada el día 1 de marzo, en la que se constató la voluntad general de construir un amplio acuerdo político de manera urgente, ambas delegaciones quedaron citadas para el día 9 de marzo, fecha en la que se realizó la segunda reunión. En este encuentro ambas delegaciones quedaron en presentar sus propuestas de trabajo y metodología de construcción del acuerdo. Sin embargo, solamente una de ellas, la representante de la lista encabezada por Enrique Santiago, presentó dicha propuesta. Tras analizar la misma y constatar la validez de la metodología propuesta, así como de los objetivos de la negociación que el documento presentado incorporaba, ambas delegaciones quedaron citadas para el próximo día 15 de marzo para continuar el proceso de construcción del amplio acuerdo político demandado por Izquierda Unida.

Es voluntad de los compañeros y compañeras que se sienten representados por la candidatura encabezada por Enrique Santiago en la VIII Asamblea Federal, informar de forma transparente y completa de la marcha de las negociaciones ahora abiertas así como de la consecución de resultados concretos cada vez que estos se alcancen. La transparencia y el flujo de información sobre este proceso que ahora se abre será determinante para llevar el mismo a buen puerto. Esa es la finalidad de éste texto y de los sucesivos que iremos difundiendo conforme vaya avanzando el proceso.

PROPUESTA PARA LA NEGOCIACION DE UN ACUERDO POLITICO AMPLIO DE INTEGRACION EN LA DIRECCION FEDERAL DE LAS DISTINTAS CANDIDATURAS PRSENTADAS EN LA VIII ASAMBLEA FEDERAL DE IZQUIERDA UNIDA.

Tras la realización de la VIII Asamblea Federal de IU se constituyó una dirección entorno únicamente a una de las candidaturas presentadas, la encabezad por Gaspar Llamazares, que alcanzó el 49,50% de los votos emitidos por los delegados.

Tanto al clausurar la VIII Asamblea Federal como posteriormente en el C.P.F. celebrado en enero de 2005 así como en reuniones posteriores de órganos, la ultima ocasión en la reunión de la Presidencia Federal del mes de Febrero de 2006, el Coordinador General de IU ha manifestado su voluntad de avanzar en la integración en la actual dirección federal de IU de las otras dos candidaturas presentadas en la mencionada Asamblea Federal, la encabezada por Enrique Santiago y la encabezada por Sebastián Martín-Recio.

Hasta ahora las posiciones e las distintas candidaturas han sido muy divergentes a la hora de abordar el proceso de ampliación de la dirección federal de IU. Sin embargo, recientemente y con ocasión de la reunión mantenida el día (poner la fecha) entre representantes de la candidatura encabezada pro G. Llamazares y de representantes de la candidatura encabezada por Enrique Santiago, se ha constado la posibilidad de avanzar en el proceso de fortalecimiento de la actual dirección federal

El objetivo expresado por ambas partes en dicha reunión fue alcanzar acuerdos que permitieran aglutinar al menos a un 70% de IU tanto en el funcionamiento de los órganos de dirección, como en las políticas concretas que desde Izquierda Unida vamos a defender ante la sociedad. Izquierda Unida, como movimiento político y social amplio, plural y participativo, contribuirá así decisivamente al fortalecimiento de la estrategia de convergencia entre movimientos sociales y políticos lanzada en el VI Foro Social Mundial

Hacemos un llamamiento a incorporarse a este proceso a los compañeros de la candidatura encabezada por Sebastián Martín-Recio a la VII Asamblea Federal, ya que objetivamente también debe ser voluntad de este colectivo alcanzar el amplio acuerdo propuesto.

OBJETIVO DEL ACUERDO

La situación actual de Izquierda Unida, el momento político en España y la proximidad de grandes retos electorales como son las elecciones autonómicas y locales a celebrar en 2007 y las elecciones generales, en principio previstas para 2008, obligan a que abordemos la próxima etapa política desde una actitud activamente constructiva. Solo así será posible el urgente relanzamiento de Izquierda Unida como amplio movimiento político y social, para ocupar el espacio que le corresponde en el espectro político rojo, verde, violeta y blanco y de este país.

Solo desde un amplio acuerdo que aúne las voluntades de una amplia mayoría de la militancia seremos capaces de poner en marcha ese relanzamiento urgente de IU, En este proceso es preciso asumir que todas las partes implicadas deberán ceder en sus posiciones de partida, a la vista de que el mantenimiento inalterable de las mismas ha imposibilitado alcanzar tan necesario acuerdo desde el cierre de la VIII Asamblea Federal hasta ahora. Debemos dotarnos de una estrategia política clara y bien definida en la que todos nos sintamos cómodos aunque no necesariamente plenamente identificados. Para ello es necesario renunciar a tacticismo y a la sustitución de unas minorías mayoritarias por otras similares. Estos métodos de funcionamiento son incompatibles con una organización políticamente ambiciosa y convencida de poder alcanzar el gobierno, Si somos incapaces de construir amplios acuerdos internos es imposible que lleguemos a ser alternativa real de gobierno.

METODOLOGIA DE CONSTRUCCION DEL ACUERDO

Proponemos abordar la discusión de una serie de asuntos políticos determinantes en el futuro inmediato, con el objetivo de sentar amplios acuerdos que permitan a Izquierda Unida adoptar una estrategia ampliamente refrendada internamente.

Los temas a abordan podrían ser:

1º.- Modelo de estado.

2º.- Reforma constitucional.

3º.- Reforma laboral y fiscal.

4º.- Municipalismo.

5º.- políticas de igualdad y sistema de atención a personas dependientes

La creación de grupos específicos de trabajo, sobre los anteriores temas u otros similares que pudieran establecerse, deberán permitir alcanzar amplios acuerdos políticos que posibiliten el trabajo colectivo en un futuro inmediato, al menos hasta la celebración de las próximas elecciones generales. Creemos que es urgente alcanzar esos amplios acuerdos, por que el proyecto que representa Izquierda Unida no cuenta con todo el tiempo del mundo para relanzarse.

Simultáneamente al proceso de construcción de acuerdos políticos, deberán articularse los mecanismos para que las propuestas de acción política que se discutan en los órganos de dirección en dicho periodo, hayan sido consensuadas entre las distintas candidaturas, especialmente todo lo referente a los procesos electorales inmediatos y a las posiciones de Izquierda Unida sobre proyectos de ley o acuerdos que se debatan el Parlamento. También deberán abordarse por esta vía la solución de posibles contenciosos o enfrentamientos internos que enturbien la normal convivencia en el seno de la organización

El proceso de construcción de acuerdos debe dotarse de mecanismos que permitan la incorporación de la totalidad de las candidaturas presentadas en la VIII Asamblea Federal, y además la vinculación al mismo de cuantas corrientes o posiciones políticas existan en la actualidad en Izquierda Unida y quieran sumarse

Evidentemente, el anterior proceso de construcción de acuerdos no pude demorarse más allá de lo razonable.

CONSTRUCCION DE UNA AMPLIA Y SÓLIDA MAYORIA EN IZQUIERDA UNIDA

Una vez alcanzado un amplio acuerdo político, este deberá presentarse a los órganos de Izquierda Unida para su deliberación y aprobación en su caso. El mismo deberá contener una propuesta de funcionamiento de los órganos de dirección que incluya la participación en tareas ejecutivas de todos los colectivos que hayan participado del acuerdo, propuesta que será vehiculada a través de las candidaturas presentadas en la VIII Asamblea Federal.

Nuestra opción no es la asuncion de responsabilidades virtuales, inexistentes hasta ahora por innecesarias, sino la reestructuración de los órganos y funciones ahora determinadas para alcanzar así la máxima eficacia en la ejecución de nuestros acuerdos políticos.

La anterior propuesta de construcción de un amplio acuerdo nunca alcanzará éxito si no marcha simultánea con la construcción de un nuevo modelo de convivencia interna. El respeto a las reglas del juego aunque fueren desfavorables a intereses puntuales, la necesidad de primar el interés del colectivo sobre el individual, y la recuperación de un discurso de reivindicación de la ética política de la izquierda han de ser señas de nuestra identidad. Cualquier acuerdo político que garantice la gobernabilidad interna deberá ser construido sobre un compromiso de respeto a los valores éticos de la izquierda.