La situación se desató la mañana de ayer, 24 de julio, cuando la mayoría de los 350 refugiados reconocidos por el ACNUR-Marruecos se manifestaban frente a las dependencias de esta oficina de Naciones Unidas en Rabat. La decisión de esta manifestación se tomó por la presencia en la capital marroquí de una representación del Alto […]
La situación se desató la mañana de ayer, 24 de julio, cuando la mayoría de los 350 refugiados reconocidos por el ACNUR-Marruecos se manifestaban frente a las dependencias de esta oficina de Naciones Unidas en Rabat. La decisión de esta manifestación se tomó por la presencia en la capital marroquí de una representación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados en Ginebra. «Sabíamos que venían responsables de Ginebra y queríamos mostrarles nuestra desesperación, que comprendieran que vivimos como animales, que este país no es capaz de respetar nuestros derechos como refugiados y que el ACNUR-Marruecos no es capaz de responder a nuestras circunstancias y necesidades.»
En la noche, el responsable de la catedral, un párroco de la iglesia católica ha dejado entrar a efectivos policiales marroquíes en el recinto para desalojar a los refugiados.
La Policía ha utilizado la fuerza ante la oposición de los encerrados causando heridos de diferente consideración. Incluso se han producido heridas en mujeres que llevaban sus bebés.
Efectivamente la situación estaba tensa desde hacía meses. Los refugiados /as pedían a gritos una asistencia y el derecho a su reinstalación en un país tercero. Derecho que se reconoce en la Convención de Ginebra, cuando es imposible conseguir una insersión digna del refugiado en el país donde ha conseguido el estatuto. Entre las denuncias de los refugiados, en su mayoría procedentes de Costa de Marfil y Congo, consta lo siguiente:
– Un refugiado en Marruecos no tiene derecho a la tarjeta de residencia ni a los servicios públicos, ni al trabajo. – El estatuto de refugiado no impide la deportación de esta persona a la frontera con Argelia. – Hay también mujeres con el estatuto de refugiadas que son obligadas por su situación a ejercer la prostitución para ocuparse de sus hijos y de ellas mismas. Los hijos e hijas de las refugiadas no tienen acceso derechos humanos básicos como enseñanzaza educación o la salud. – ACNUR, ante esta situación, ni siquiera es capaz de cubrir los gastos de alojamiento de los casos más vulnerables, como mujeres violadas, mutiladas, con bebés a su cargo, menores, minusválidas. Lo que deja, sobre todo a las niñas ,a la merced de las redes de tráfico de personas. – El papel del ACNUR no es respetado en los servicios públicos ni reconocido por las autoridades marroquíes. – En Marruecos, los refugiados y refugiadas de origen africano somos considerados como vulgares clandestinos y soportamos un gran racismo social e institucional. – Los menores y las menores refugiados no tienen ningún tipo de protección y sufren continuos abusos.
Los refugiados demandan :
– PEDIMOS EL RESPETO DE NUESTROS DERECHOS COMO REFUGIADOS.
– PEDIMOS SER SOSTENIDOS POR ACNUR MARRUECOS EN NUESTRAS NECESIDADES BÁSICAS, ANTE LA IMPOSIBILIDAD DE INSERTARNOS EN LA SOCIEDAD MARROQUÍ.
– PEDIMOS EJERCER NUESTRO DERECHO A LA REINSTALACIÓN EN PAÍSES TERCEROS.
– PEDIMOS LA REINSTALACIÓN INMEDIATA DE MENORES Y MUJERES AL CONSIDERARLOS CASOS VULNERABLES POR LOS ABUSOS CONTINUADOS QUE SUFREN EN ESTE PAÍS.
– PEDIMOS LA PROTECCIÓN DE ENTIDADES INTERNACIONALES U OTROS ESTADOS ANTE LA IMPOSIBILIDAD DE PROTEGERNOS DE ACNUR MARRUECOS.