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Entrevista a Roland Marchal

República Centroafricana, «el avance de la revolución es asombroso»

Fuentes: Le Monde

Traducido para Rebelión por Susana Merino

El presidente centroafricano François Bozizé, que llegó al poder por la fuerza ve enfrentada su autoridad por la rebelión de la Seleka («alianza» en sangó el idioma nacional) que tomó las armas el 10 de diciembre. El martes Kaga Bandoro fue la cuarta Prefectura atacada y ocupada por los rebeldes desde Ndélé( en el norte), Bria (en el centro-sur). Actualmente está amenazada Bangui, aunque los rebeldes han asegurado que no tienen intención de conquistar la capital. El presidente Bozizé pidió el 27 de diciembre a Francia y a los EE.UU. que lo ayudaran a detener la rebelión. Francia rechazó contribuir militarmente, sugiriendo resolver la crisis mediante el diálogo.

Roland Marchal, especialista del Centro de Estudios y de Investigaciones internacionales (CERI) en el Africa subsahariana analiza los desafíos del conflicto.

¿Cómo se explica que el Seleka haya tomado las armas contra el presidente Francois Bozizé? ¿Quién dirige ese movimiento y qué posibilidades tiene de derrocar al presidente?

Es una organización de la que se sabe muy poco. Está formada por grupos disidentes de dos movimientos que se oponen a la puesta en marcha de los acuerdos de paz de Libreville acordados entre el poder y los grupos rebeldes: la Unión de las fuerzas democráticas para la reunión (UFDR) y la Convención de los patriotas por la Justicia y la Paz (CPJP). Consideran que esos acuerdos no son lo bastante amplios, que no tienen en cuenta sus reivindicaciones locales, especialmente hacerse cargo de los combatientes. La paradoja es que estos movimientos están liderados por quienes en su momento habían rechazado esos acuerdos.

El jefe que destaca en este movimiento es Michel Djotodia, antiguo diplomático y fundador del UFDR, así como su portavoz Djouma Narkoyo y Eric Massi, el hijo de Charles Massi, un ministro del presidente Bozizé que renunció y fue ultimado. Estas personas no son conocidas en el escenario político centroafricano. Son personalidades marginales que uno no imagina instaladas en la capital a cuyas élites no conocen.

El movimiento ha conseguido rápidamente las ciudades del norte del país porque allí no está presente el aparato del Estado, y más especialmente en el este del país. Por un efecto de bola de nieve, envalentonados por sus victorias, se han incorporado al movimiento grupos marginales y una parte de la guardia presidencial compuesta por oriundos del Tchad, largo tiempo residentes en Centroáfrica y apostados en las zonas fronterizas. Habían participado en la toma del poder del presidente Bozizé pero fueron reenviados debido a las deserciones.

El Seleka es una alianza muy heteróclita y es sorprendente ver que dispone de una buena cadena de mandos, Políticamente, sin embargo, no podrá mantenerse demasiado tiempo por que está integrada por grupos con intereses muy divergentes, ya sea el dinero, el ascenso a funciones políticas, los recursos naturales del país. Es una de las razones por las cuales el Seleka no tiene apuro por entablar negociaciones, porque sabe que su actual unidad podría estallar en pedazos.

¿Cómo se puede explicar este rápido empoderamiento de la rebelión? ¿Cuentan con apoyo interno o externo?

No es sorprendente que esa gente haya logrado fácilmente poder sobre su propia base territorial o étnica, lo que es sorprendente es su avance en el país. Esta rebelión combate bien y no se comporta como antes, haciendo pillajes o maltratando a la población. Esto significa que es una rebelión rica, que los combatientes no pasan hambre y que existe una relativamente buena disciplina militar. El tema por lo tanto es saber de dónde viene el dinero. No procede de los jefes de la rebelión.

La sospecha ideal es que es del Tchad. Pero tengo mis dudas porque algunos síntomas muestran que el presidente tchadiense, Idriss Déby, duda de intervenir. Sabe que si esta rebelión gana Banghi va a dividirse, lo que ocasionará nuevos combates en el norte, e impedirá que la región se mantenga segura como él desea. ¿Habrá llegado a un acuerdo con la rebelión? No es imposible, considerando que hace poco liberó a sus miembros. 

Francois Bozizé usurpó el poder con la ayuda de Idridd Déby. Pero se poco a poco se hizo autónomo, se enriqueció a la cabeza del Estado y dejó de seguir sus consejos, especialmente a partir de 2006, en lo relativo a las políticas a poner en marcha para resolver los problemas con los grupos rebeldes. En la primavera pasada los jefes de Estado de la región le habían insistido una vez más resolver esos problemas mediante un diálogo nacional y dando mayor lugar a la oposición.

Tal vez el señor Déby ha llegado a la conclusión de que el presidente Bozizé no es capaz de desempeñar su cargo y es necesario cambiarlo. Sin embargo apoyar a los rebeldes en el norte, en su mayoría musulmanes y percibida en Bangui como compuesta de tchdianos podría deteriorar aún más las relaciones entre Centroafricanos y Tchadianos y forzar a Déby a intervenir en Centroáfrica contra eventuales incidentes. Por otra parte habiendo gran horror al vacío haría falta que existiese una alternativa creíble a Bozizé.. No parece ser este el caso de Seleka, ni en la oposición centroafricana, muy heterogénea aunque se haya reunificado ante el avance rebelde. El presidente del Tchad se halla preso de esas contradicciones.

¿Cómo explicar la posición de Francia, antigua potencia colonial en Centroáfrica, que ha dicho que no intervendría a pesar de los pedidos en tal sentido del presidente Bozizé y del Presidente del Tchad?

Los franceses se hallan en una posición muy delicada frente a estos pedidos. Francia argumenta que es un problema Centroafricano interno en el que debe intervenir la comisión de la Comunidad económica y monetaria del África Central o la Unión Surafricana. Esta posición es lógica salvo que no resuelve la crisis en que Centroáfrica se encuentra hoy en día.

En estos últimos años, Francia ha desarrollado en Centroáfrica emprendimientos de corto plazo. Se ganaron diez pequeñas batallas pero finalmente todo se ha perdido porque Centroáfrica ha continuado hundiendose. Sucede lo mismo con la UE que no manifiesta mucho interés en resolver esta crisis. Contrariamente a lo que sucede en los conflictos en Mali, la Costa de Marfil o la piratería en Somalia, Francia no parece tener demasiado interés en intervenir aquí.

Ha sido así durante toda la historia francesa en Centráfrica, colonizada un poco por error y en un momento de agotamiento en el que no se quiso hacer gran cosa. Desde los años 80, el país es una china en el zapato francés porque las empresas francesas no ganan mucho allí debido al deletéreo clima de los negocios. Por otra parte un deslizamiento de Centroáfrica hacia la guerra no pondría en riesgo los equilibrios de la región. El único peligro es que la falta de control de este territorio tan grande como Francia, les deje total libertad para desplazarse tanto a los operadores económicos y militares como a los contrabandistas.

Fuente: http://www.lemonde.fr/afrique/article/2012/12/27/centrafrique-l-avancee-de-la-rebellion-est-etonnante_1811033_3212.html

rCR