Nueva York, 26 de julio. El ingreso promedio de los hogares latinos en Estados Unidos se desplomó 66 por ciento, y el de los afroestadunidenses se redujo 53 por ciento a causa de la crisis económica, la peor disparidad entre minorías y la mayoría blanca en 25 años, según un nuevo informe del Pew Research […]
Nueva York, 26 de julio. El ingreso promedio de los hogares latinos en Estados Unidos se desplomó 66 por ciento, y el de los afroestadunidenses se redujo 53 por ciento a causa de la crisis económica, la peor disparidad entre minorías y la mayoría blanca en 25 años, según un nuevo informe del Pew Research Center.
La riqueza media de hogares blancos disminuyó 16 por ciento en ese mismo periodo.
El informe, basado en un análisis de datos oficiales del censo, encontró que la riqueza media, o valor neto, de los hogares blancos es 18 veces más grande que la de latinos, y 20 veces mayor que la de los afroestadunidenses. Estas disparidades, subrayó Pew, son las más grandes en un cuarto de siglo desde que el gobierno publicó por primera vez tales datos, y aproximadamente doble el tamaño de las proporciones que prevalecían entre estos tres grupos (latinos, afroestadunidenses y blancos) durante las dos décadas antes de la gran recesión.
El informe presentado hoy también revela que el número de estadunidenses con un valor neto nulo -o sea, dueños de nada- se incrementó sustancialmente durante la recesión. Un tercio de latinos (31 por ciento) tenían un valor neto nulo o negativo en 2009, comparado con el 23 por ciento que estaba en esa situación en 2005. Para los afroestadunidenses, 35 por ciento tenía riqueza nula o negativa en 2009, comparado con un 29 por ciento en 2005. Para los blancos, el incremento en este rubro fue del 11 a 15 por ciento sin bienes o activos.
En términos numéricos, la riqueza media de los hogares latinos se desplomó de 18 mil 359 dólares en 2005 a sólo 6 mil 325 en 2009, detalla el informe. Para los afroestadunidenses, el típico hogar ahora tiene menos de la mitad de lo que tenía antes de la recesión, 5 mil 677; para los hogares blancos, el valor neto medio fue de 113 mil 149 dólares.
La principal causa de la erosión en riqueza fue el desplome en el valor de la vivienda. Esto afectó de manera más drástica a los latinos, según el informe, «porque los hispanos derivaban casi dos tercios de su valor neto en 2005 a vivienda y una porción desproporcionada reside en estados que fueron la vanguardia en el derretimiento de la vivienda. Los latinos fueron los más golpeados por el desplome del mercado de vivienda», afirma el Pew Research Center.
Mientras tanto, la disparidad entre los más ricos y todos los demás se incrementó en el mismo periodo, tanto en general como dentro de los mismos sectores raciales. Entre 2005 y 2009, la porción de la riqueza controlada por 10 por ciento de las familias más ricas se incrementó de 49 a 56 por ciento. Entre los hispanos, el 10 por ciento más rico vio su porción de la riqueza incrementarse de 56 al 72 por ciento, y entre los afroestadunidenses se aumentó de 59 a 67 por ciento.
La riqueza de los hogares o valor neto está conformado de bienes y activos (incluyendo ahorros, casas, inversiones y automóviles), menos deudas (hipotecas, tarjetas de crédito, etcétera).
La crisis hipotecaria
Para Antonio González, presidente del Instituto William C. Velazquez y un líder latino nacional en asuntos de derechos políticos, civiles y económicos, el informe sólo confirma las investigaciones realizadas en 2008 por su organización en cuanto al dramático impacto negativo de la crisis hipotecaria sobre los latinos a lo largo del país.
En entrevista con La Jornada, González informó que él y sus colegas presentaron este asunto al gobierno de Barack Obama hace un par de años, y que la respuesta fue nula. Es cierto que la crisis de las hipotecas de vivienda no fue culpa del gobierno de Obama, sino que la heredó del gobierno de Bush, y también es cierto que, como dicen algunos, se metieron a una cama en llamas. Pero si yo me meto a esa cama, intentaría extinguir las llamas. Ellos no lo han hecho.
Todo esto mientras que la cúpula política en Washington debate cuánto más reducir los programas de asistencia social para los más necesitados, como parte de las negociaciones para reducir el déficit presupuestario y elevar el llamado techo de deuda.
Los datos de Pew, junto con la alta tasa de desempleo de 9.2 por ciento (los latinos y los afroestadunidenses padecen tasas de desempleo de 11.6 y 16.2, respectivamente) ofrecen una idea de la devastación de la crisis económica que aún impera dos años después de que oficialmente se declaró el fin de la gran recesión.
Por tanto, no sorprende que las encuestas registren cada vez mayor desilusión y frustración con los políticos de ambos partidos. Un 90 por ciento de los estadunidenses cree que la economía está mal, y cuatro de cada cinco dicen que es difícil conseguir empleo, según la encuesta más reciente publicada hoy por el Washington Post/ABC News. En ese sondeo, más de un tercio de los estadunidenses ahora creen que las políticas de Obama están dañando la economía, y un número casi igual piensa lo mismo de los legisladores republicanos. Un 52 por ciento desaprueba el manejo del problema del desempleo por el presidente, y 65 por ciento cuestiona el de los republicanos.
El informe completo se puede consultar en: http://pewsocialtrends.org/2011/07/26/wealth-gaps-rise-to-record-highs-between-whites-blacks-hispanics/. La investigación y análisis del Instituto William C. Velazquez se puede consultar en: www.wcvi.org/press_room/press_releases/2009/housingwp061809.htm.