La guerra de los generales por el poder podría arrastrar a algunos civiles a su paso al exacerbar las divisiones entre las poblaciones. El futuro del país dependerá sobre todo de la capacidad de los revolucionarios para mantenerse como polo de atracción. Mientras continúan los enfrentamientos entre el ejército sudanés del general Burhane y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) dirigido por el general Hemidti (en la foto), las conversaciones entre los dos beligerantes han dado como resultado un acuerdo para crear corredores humanitarios seguros. Deben permitir que los civiles abandonen el país y transportar material humanitario. Por otro lado, los negociadores de EE.UU. y Arabia Saudí no han podido conseguir una tregua del conflicto militar.
Un alto precio para la gente
¿Serán efectivos estos corredores humanitarios? Nada es menos seguro. Los diversos altos el fuego entre los dos generales nunca se han respetado y el destino de los civiles sigue siendo la menor de sus preocupaciones.
La situación de la gente empeora cada día que pasa. Los alimentos, el agua y el combustible escasean para la mayoría de los habitantes de Jartum. Las últimas cifras arrojan 750 muertos y 5.000 heridos, muchos de ellos niños. Los civiles son víctimas de los bombardeos terrestres de las RSF y de los bombardeos aéreos del ejército sudanés sobre barrios densamente poblados. A esta inseguridad se suma el saqueo perpetrado ya sea por soldados de ambos bandos o por grupos de jóvenes ociosos. En el aspecto humanitario, el panorama no es muy brillante. Existe el temor de una hambruna que podría afectar al menos a 2,5 millones de personas en un país que a menudo ha experimentado crisis alimentarias. Otra preocupación son los combates que tienen lugar en otras partes del país. En efecto, solo en Darfur han muerto 450 civiles.
Un conflicto largo
La situación en esta región es tanto más preocupante cuanto que asistimos a un recrudecimiento del conflicto. De hecho, civiles y jóvenes de determinadas tribus han tomado las armas para luchar junto a uno de los dos bandos militares enfrentados. En Port-Sudan, la gran ciudad del Mar Rojo, los miembros de la tribu Beja piden armas para luchar.
Desafortunadamente, es muy probable que el conflicto dure porque las fuerzas beligerantes están actualmente bien provistas de armas. El gobierno egipcio de Sisi apoya a Burhan, y las milicias de Haftar en Libia apoyan a Hemidti. Los altos el fuego solo pueden respetarse si existen mecanismos de monitoreo independientes presentes en el país. Además, una tregua sólo tiene sentido si es un paso hacia una solución política, por el momento rechazada por los dos campos, porque cada uno sueña con aplastar militarmente al otro.
Fortalecer nuestra solidaridad
Durante los acontecimientos revolucionarios de 2018, se forjó una unidad entre las diferentes poblaciones de Sudán y continuó durante la lucha contra el golpe. Se había superado el racismo alimentado en gran medida por la dictadura islamista de Omar el-Bashir. En una situación de violencia exacerbada, es probable que estas divisiones vuelvan a aparecer. Hemidti podría tratar de hablar en favor de las zonas marginadas y estigmatizadas del país, mientras que Burhan aprovecharía el miedo de las élites de Jartum a que las RSF gobiernen Sudán.
Esta opción dañina no es segura. Todo dependerá de la capacidad de resistencia de las fuerzas revolucionarias. Por el momento, están unidos en la negativa a ceder ante las sirenas de uno u otro bando. Los Comités de Resistencia, que jugaron un papel central en la revolución y la lucha contra el golpe, siguen siendo un importante punto de apoyo para la supervivencia de las poblaciones civiles. Son ellos, junto con el personal médico, quienes brindan atención a los heridos. Organizan la solidaridad abasteciendo a los más pobres y, a través de una red de información, permiten que la gente huya de los barrios más afectados por los enfrentamientos.
Nos corresponde aumentar nuestra solidaridad con los Comités de Resistencia, porque cualquiera que sea el resultado del conflicto, serán decisivos en la construcción de una alternativa a la barbarie de los generales.
Paul Marcial es editor de la página web del colectivo «Afriques en Luttes».
Texto original: https://lanticapitaliste.org/actualite/international/soudan-aux-cotes-des-comites-de-resistance
Traducción: Enrique García
Fuente: https://sinpermiso.info/textos/sudan-con-los-comites-de-resistencia