El ex presidente de Sudáfrica Thabo Mbeki ha sido designado por la Unión Africana (UA) para presidir un comité dedicado a investigar las violaciones de derechos humanos en la región sudanesa de Darfur. Su nombramiento por la Unión Africana se produce después de la decisión de la Corte Penal Internacional, el miércoles, acusando al presidente […]
El ex presidente de Sudáfrica Thabo Mbeki ha sido designado por la Unión Africana (UA) para presidir un comité dedicado a investigar las violaciones de derechos humanos en la región sudanesa de Darfur. Su nombramiento por la Unión Africana se produce después de la decisión de la Corte Penal Internacional, el miércoles, acusando al presidente sudanés Omar al-Bashir de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad en Darfur.
Nkosazana Dlamini-Zuma, ministro de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, dijo que el papel de Mbeki será el de mediador entre la Corte Penal Internacional y el gobierno de Sudán.
Nkosazana Dlamini dijo que la decisión de la Corte Penal Internacional de La Haya de emitir una orden de detención contra Bashir era lamentable, y que Sudáfrica ha aceptado una respuesta inicial por parte de la Unión Africana ante la decisión de la Corte Penal Internacional.
«Sudáfrica ha luchado siempre contra cualquier acto de impunidad. Sin embargo, Sudáfrica apoyó la decisión de la Unión Africana de aplazar la orden de detención contra el presidente Bashir por un año para dar una oportunidad a los procesos de paz en Sudán», declaró Dlamini-Zuma.
Mbeki negoció el acuerdo de los rivales políticos de Zimbabue para llegar a un reparto de poder después de las disputadas elecciones celebradas el año pasado. Sin embargo, fue acusado por algunas voces de ser demasiado indulgente con el presidente Robert Mugabe.
El presidente sudanés Omar al-Bashir, por su parte, ya rechazó el jueves la orden de detención dictada por la Corte Penal Internacional en su contra, diciendo que la orden era sólo un truco para obtener los recursos de Sudán por parte de los colonialistas.
El embajador sudanés ante la Unión Africana, Mohieldin Salim Ahmed, pidió en el período extraordinario de sesiones a todos los miembros de la Unión Africana que protesten ante la orden de detención emitida por la Corte Penal Internacional, alegando que era injusta.
Mientras tanto, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, lanzó un llamamiento a Sudán para que reconsidere su decisión de expulsar a 13 organizaciones de ayuda internacional en Darfur y que se estima que ayudan en torno a 4,7 millones de personas.
«La decisión del Gobierno de Sudán de expulsar a 13 organizaciones no gubernamentales que participan en las operaciones de ayuda en Darfur, en caso de aplicarse, dañaría inevitablemente las operaciones humanitarias», puntualiza una declaración de Naciones Unidas.
El conflicto de Darfur comenzó en 2003, cuando rebeldes de minorías étnicas alzaron sus armas contra el gobierno de Jartum, de dominancia árabe, denunciando la discriminación y el abandono en la región de Darfur. Los seis años de conflicto en Sudán han matado a más de 300.000 personas y numerosos desplazados.