RESUMEN Porque las tierras son de una importancia primordial para los malgaches, cuya mayoría vive en zonas rurales, el Colectivo TANY llama a cada ciudadano a tener en cuenta los posicionamientos y los proyectos de los candidatos que afectan a las tierras en su elección el día del voto. En Madagascar existen diferentes tipos de […]
RESUMEN
Porque las tierras son de una importancia primordial para los malgaches, cuya mayoría vive en zonas rurales, el Colectivo TANY llama a cada ciudadano a tener en cuenta los posicionamientos y los proyectos de los candidatos que afectan a las tierras en su elección el día del voto.
En Madagascar existen diferentes tipos de acaparadores de tierra y expolian los derechos de las comunidades locales: Malgaches, operadores económicos de diversas nacionalidades que residen desde hace tiempo en Madagascar, sociedades a menudo con capitales de origen mayoritariamente extranjero que alquilan tierras, pero desde 2003, las leyes autorizan también la venta de terrenos a sociedades extranjeras. Los ciudadanos deberían pues elegir a un candidato que se comprometa en la protección de las tierras malgaches, particularmente para los campesinos en vistas al desarrollo de la agricultura familiar.
Las poblaciones víctimas resisten de diferentes maneras para proteger sus bienes y para defender sus derechos legítimos, pero las nuevas leyes plantean muchos problemas. Según el Colectivo TANY, una de las primeras etapas importantes que debería figurar en los proyectos del próximo presidente a elegir debería ser un cambio de la Constitución vigente, adoptada en 2010 bajo el régimen de Transición. El punto a dar prioridad será una frase del artículo 1 según el cual: » Las modalidades y las condiciones relativas a la venta de terreno y al contrato de arrendamiento vitalicio en provecho de los extranjeros están determinadas por la ley. » Porque abre la puerta a la legalización de la venta de las tierras de los antepasados y a la expulsión de las comunidades locales de las tierras de las que obtienen su subsistencia y sus fuentes de ingresos. El contenido de la futura Constitución deberá ser objeto de un debate que implicará a todos los ciudadanos.
Introducción
Mientras que la atención de los medios de comunicación y de la opinión pública se focaliza actualmente en las elecciones presidenciales que se celebrarán dentro de algunos días, ciudadanos de varias regiones de Madagascar son objeto de amenazas inminentes de pérdida de sus tierras, y corren peligro de compartir la suerte de los que ya han sido víctimas en el transcurso de los meses y los años pasados. Cualesquiera que sean los bonitos discursos que los diferentes candidatos despliegan para hacerse elegir, el Colectivo TANY querría subrayar que su posicionamiento y sus proyectos sobre las tierras malgaches, o su silencio sobre el tema, revisten una importancia capital para el desarrollo del país y el futuro de cada familia, y apela a cada uno a mostrar vigilancia sobre el tema en la preparación de la realización de su deber de ciudadano.
Los diferentes tipos de acaparadores de tierra en Madagascar
• Los ciudadanos de todas las regiones de Madagascar conocen casos o son víctimas directas de acaparamientos de tierra por malgaches , originarios o no de la vecindad, descendientes de grandes familias o personajes que se han enriquecido a una velocidad inaudita, o que han adquirido poder – incluso una impunidad – gracias al acceso a un puesto político. El conflicto que opone a 300 familias de Soavinandriana en la región de Itasy a un antiguo Ministro es el más famoso (1), mientras que Fokonolona d’ Amparihibe en la región Analanjirofo está confrontado con el Alcalde y con otras autoridades locales (2).
• Operadores económicos de diversas nacionalidades, que residen desde hace tiempo en Madagascar , en connivencia con los sucesivos dirigentes, controlan y bloquean desde hace tiempo prácticamente todos los sectores de la economía del país y han expoliado los derechos de los ciudadanos sobre las tierras. Si la memoria colectiva recuerda a menudo los casos FILATEX (3) en diferentes regiones, un proceso opone actualmente al fokonolona de Salazamay en Tamatave a la sociedad TELMA (4).
• Los alquileres de tierra a sociedades a menudo de capitales de origen mayoritariamente extranjero por el Estado en el marco de contratos de arrendamiento vitalicio son numerosos y todavía corren peligro de aumentar, teniendo en cuenta la política de los dirigentes y aspirantes al poder que conceden prioridad a la búsqueda de inversores en sus proyectos de desarrollo del país. Las consecuencias negativas sobre las poblaciones expulsadas de sus tierras son idénticas a las provocadas por ventas (5). Sin embargo, es obligado constatar que a menudo las consecuencias de estos proyectos llamados de «desarrollo» no benefician en absoluto a las poblaciones locales y reportan intereses irrisorios para el país.
• Hay también ventas de tierras a sociedades extranjeras desde 2003 cuando las leyes autorizaron en lo sucesivo estas ventas antes prohibidas por el cultivo tradicional y la legislación. Oficialmente, los dirigentes a menudo juran a sus grandes dioses que no venden la patria y la tierra de los antepasados pero el número y la eficacia de las búsquedas en aumento estos últimos meses acabarán por aportar pruebas indiscutibles de estas malas acciones cometidas bajo la cobertura de diferentes subterfugios como la utilización de testaferros Malgaches .
La mayoría de los malgaches vive en zonas rurales y practica la agricultura, la ganadería y la pesca. La inseguridad territorial agravada por la inseguridad ligada al bandolerismo generalizado en todo el territorio (6) y por el cambio climático, del que Madagascar está reconocido entre las principales víctimas (7) agrava la inquietud de las poblaciones rurales y las condiciones de trabajo de los campesinos.
El empobrecimiento de la mayoría de los Malgaches vivido y denunciado por todos los ciudadanos contrasta con el enriquecimiento inaudito de una ínfima minoría de habitantes entre los que se encuentran los nombres de los 10 más ricos según ha publicado Forbes (8), y en las primeras filas de las cuales se encuentra un candidato y muy allegados de candidatos a la elección presidencial del 7 de noviembre.
Para la elección de un dirigente comprometido en la protección de las tierras malgaches
En Madagascar, los propietarios reconocidos por la ley son los poseedores de títulos y certificados territoriales, cuya equivalencia acaba de ser reforzada por los responsables (9), en respuesta a varios años de conflictos sobre su respectivo valor. Pero la práctica sobre el terreno frente a la corrupción(10) y a los problemas de actualización de los datos y de usurpación (9) no garantiza de manera firme una seguridad territorial a los poseedores de estos documentos formales Y a pesar de las operaciones de expedición de títulos por el Ministerio de tutela (11) y la aceleración de la apertura de ventanillas territoriales, con vistas a una expedición agrupada de certificados territoriales (12), el porcentaje de terrenos provistos de un título o de un certificado sigue siendo baja.
Los ocupantes desde generaciones de propiedades privadas no tituladas en los 1.000 municipios que no disponen de ventanilla territorial – no poseedores de títulos – corren el riesgo de perder sus tierras sin reconocimiento de sus derechos. Por otro lado, zonas de vastas superficies en varias regiones están todavía calificadas de » terrenos coloniales » y de » reservas indígenas » y las familias que las han puesto en valor desde hace varias décadas no pueden pedir ni títulos ni certificados territoriales. Los pastos de vastas superficies para los que la reforma territorial de 2005 había previsto una ley sobre los terrenos con estatuto específico son atribuidos a los extranjeros por contratos de arrendamiento vitalicio sin reconocimiento de los derechos de los ganaderos que les utilizan porque no forman parte de asuntos prioritarios del Estado en la regulación.
Porque los sucesivos dirigentes han optado por la liberalización y la prioridad a los inversores como modelo de desarrollo del país, y porque recurren a los extranjeros para alquilar y ocupar las tierras malgaches particularmente desde el proyecto Daewoo de 2008, la posesión de las tierras según las costumbres ancestrales de las diferentes regiones es demasiado a menudo considerada como inexistente, los ciudadanos que no formalizan sus derechos sobre las tierras por uno de los dos documentos, por diferentes razones, algunas veces independientes de su voluntad, son tratados de «okupas» por los ricos y los poderosos, un calificativo inaceptable desde diversos puntos de vista .
En las reflexiones sobre su voto del 7 de noviembre, cada elector debería pues adoptar como criterio de eliminación en sus elecciones el desprecio experimentado con respecto a la mayoría de los ciudadanos por algunos candidatos que han autorizado en el pasado o previsto en sus visiones y programas futuros la expropiación y la expulsión de familias malgaches de sus tierras y la destrucción de sus viviendas, que implicarán la pérdida del único medio de producción del que disponen para vivir, pues esto no constituye un programa de desarrollo sino un programa de empobrecimiento.
La búsqueda activa de soluciones y el diseño de leyes a favor de la mayoría de las poblaciones , tendente a hacer reconocer de manera legal los derechos consuetudinarios y los terrenos comunitarios y a poner término por fin al sistema colonial se revelan urgentes en el transcurso de los próximos años. Los candidatos que predican visiones y proyectos de sociedad que pretenden hacer de Madagascar una nueva colonia de las empresas y estados extranjeros deberían ser relegados. (13)
Frente al crecimiento demográfico nacional y a la exigüidad de las parcelas de las que disponen los campesinos malgaches – inferiores a una hectárea por término medio (14) – los futuros dirigentes deberían facilitar y multiplicar la atribución de tierras a las familias malgaches en lugar de alabar la disponibilidad de millones de hectáreas en el exterior para atraer a los inversores.
Para una agricultura familiar que asegure la alimentación de la población primero y la exportación después.
Las familias campesinas expulsadas de sus tierras y desanimadas por la inseguridad emigran hacia otros lugares, particularmente hacia las aglomeraciones urbanas donde esperan encontrar trabajo (15).Pero su supervivencia sigue siendo precaria porque las ciudades rebosan ya de ciudadanos pobres sin tierra ni domicilio, y el número de pequeños empleos es limitado. Esta situación flagrante en numerosos lugares de Madagascar ha llevado a algunos candidatos a las elecciones presidenciales a anunciar que iban a atribuirles tierras a los Malgaches. Sin embargo, no han precisado
– Si se trataría de una medida excepcional o de una política pública a largo plazo,
– Y quienes serían los beneficiarios: ¿los campesinos malgaches que practican la agricultura familiar o los inversores malgaches yo extranjeros?
El futuro presidente debería conceder absolutamente la atención y la importancia a la autosuficiencia alimentaria en su política económica para erradicar la pobreza y la desnutrición en Madagascar.
Desde 2012, el Colectivo TANY preconizó la puesta a disposición en cada municipio de terrenos dedicados al desarrollo local y en particular a la agricultura familiar y sólo capaz en nuestra opinión de garantizar la seguridad alimentaria y de asegurar la soberanía alimentaria de las generaciones actuales y futuras (16).
La atribución de tierras a los malgaches, jóvenes y menos jóvenes, según diferentes modalidades, debería servir para aumentar las superficies cultivadas con vistas a la subsistencia de las familias y del mercado nacional en prioridad, y a la exportación luego. Los programas de instalación de familias sobre nuevas tierras tienen interés en aprender de los fracasos encontrados en el pasado y de las experiencias (17) acertadas actuales en términos de formación / consejo y acompañamiento para la disponibilidad de diversos servicios públicos e indispensables. La responsabilidad del Estado en la seguridad de las zonas rurales para no desmotivar a los nuevos recién llegados es ineludible.
Las condiciones de vida y de trabajo de los campesinos malgaches son difíciles mientras que deban asegurar la satisfacción de las necesidades en alimento de las poblaciones de las ciudades y de los campos. Sus esfuerzos merecen pues el apoyo de todos los ciudadanos, en la primera fila de ellos el futuro Presidente de la República. También, los proyectos «presidenciales» que amenazan actualmente con destruir los campos y las viviendas de millares de hectáreas, como en el proyecto Sahanivotry de la sociedad Hydelec / Tozzi Green en Vakinankaratra (18), así como las declaraciones de utilidad pública en provecho de compañías y sociedades privadas tales como Toliara Sands/Base Toliara (19) en la Región Sudoeste deberían ser cuestionados muy seriamente porque destruyen y aniquilan el trabajo de varias generaciones.
Conclusión
El Colectivo TANY subraya desde hace años la necesidad de cada ciudadano de demostrar vigilancia y de contribuir activamente a la gestión y al seguimiento de las tierras malgaches. Sus propuestas de incluir el análisis de los principios y los proyectos de los candidatos a las elecciones presidenciales con relación al territorio y a la Agricultura en la decisión de cada elector en el momento de su voto forman parte de esta línea de conducta. Solo la participación y la expresión de todos los ciudadanos por su voto en las elecciones luego por su vigilancia e interpelación a lo largo del año, llevaran a los responsables a actuar antes para los intereses de la mayoría de la población. . El Colectivo TANY espera que los habitantes amenazados de expulsión de sus tierras mencionados en este documento, así como los que no han sido citados, ganen en su lucha por una mejor justicia social.
Desgraciadamente, todos los recursos naturales malgaches son objeto de «acuerdos» en detrimento de la población entre los responsables malgaches e inversores extranjeros. Como todas las instituciones y las organizaciones que piden la anulación del proyecto de explotación de los recursos pesqueros en las costas malgaches por un consorcio chino con la ayuda de una flota de 330 barcos de pesca, el Colectivo TANY considera que este proyecto debe ser desterrado porque sin lugar a dudas aportará la destrucción y arruinará los ingresos de los pecadores malgaches (20).Numerosos países del mundo preparan el futuro de la alimentación de su población buscando recursos naturales en el exterior de su territorio, no escojamos dirigentes que corren peligro de liquidar el contenido de nuestros mares, así como de las tierras, uno de nuestros bienes comunes más preciosos. Estos proyectos amenazan con matar de hambre a los Malgaches en los próximos años.
El Colectivo para la Defensa de las Tierras Malgaches – TANY
[email protected] ; https://www.lakroa.mg/item-1501_art… et http://www.terresmalgaches.info/spi…
(19) http://www.terresmalgaches.info/spi… et http://www.terresmalgaches.info/spi…
(20) http://www.midi-madagasikara.mg/eco… ; http://matv.mg/accord-sur-la-peche-…
Texto original en francés: http://terresmalgaches.info/spip.php?article237
Traducido para UMOYA por: M. Isabel Celada Quintana
Fuente: https://umoya.org/2018/11/29/tierras-malgaches-y-elecciones-presidenciales/#more-61148