Recomiendo:
1

La multinacional Falck Renewables proyecta una macrocentral fotovoltaica sobre 400 hectáreas del municipio valenciano

Un “espejo gigante” amenaza el paraje natural de la Sierra de Chiva

Fuentes: Rebelión [Imagen: Sierra de Chiva o de los Bosques]

Un “mar de espejos” a pocos metros del paraje natural de la Sierra de Chiva (municipio de 15.400 habitantes en el interior de la provincia de Valencia), en suelo agrícola y forestal.

La multinacional italiana Falck Renewables Power promueve una macroplanta fotovoltaica de 125 megavatios –denominada “Campos de Levante”- que incluye una subestación eléctrica transformadora y una línea de evacuación de 8,2 kilómetros que afectaría -además de a Chiva- al municipio de Godelleta (3.600 habitantes). La empresa afirma que ha negociado con propietarios de las parcelas donde planea ubicar la central y cuenta, según los movimientos sociales, con el “apoyo imprescindible” de una inmobiliaria local.

El objetivo del megaparque –la instalación de 400 hectáreas de paneles solares- es la generación de energía eléctrica para satisfacer parte de la demanda en el estado español. Asimismo en marzo finalizó el periodo de información pública a la autorización administrativa previa y la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) en la institución competente, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

La Plataforma para el Estudio y Conservación de la Sierra de Chiva, que denuncia el “impacto irreparable” sobre la agricultura, el medio ambiente y el paisaje, publicó en su página Web el documento de alegaciones en el que se cuestiona –entre otros puntos- la ubicación de la macroplanta; afectaría, por ejemplo, a un importante corredor fluvial y una red de caminos y senderos. Además, la línea de alta tensión de 220 kilovatios implicaría un riesgo de colusión/electrocución para la avifauna y los quirópteros (la profusión de cuevas y oquedades favorece las poblaciones de murciélagos). Vecinos y asociaciones de Chiva han alegado, además, que a 300 metros se ha detectado el nido de una especie amenazada, el águila perdicera; también están presentes en la zona el águila real, el búho real, el halcón peregrino, el águila culebrera, el azor, el gavilán común y el águila calzada.

Otro aspecto criticado en la iniciativa de Falck Renewables es la posible “fragmentación” de hábitats naturales y desaparición de “corredores verdes”, que derivaría de los 50 kilómetros de vallado y 54 accesos previstos. Se trata, por otra parte, de un territorio de cultivos tradicionales de secano de viña, almendros, olivos y principalmente algarrobos centenarios (el término municipal de Chiva destaca a escala mundial en el cultivo de esta especie arbórea, de la que investigaciones recientes resaltan sus cualidades para la fijación del CO2 y combatir el cambio climático). A estos valores se añade el de los 158 árboles y 11 arboledas susceptibles de incluirse en el Catálogo de Árboles Monumentales de Interés Local, que está elaborando el consistorio.

Construcciones de “piedra en seco” (barracas, casas de campesinos o ribazos), yacimientos como el romano de la Incolla, el medieval de los Corralicos, el asentamiento ibérico en el límite de as Salinas con Peñas Albas y la mina de sal de las Salinas forman parte del patrimonio cultural en el ámbito de la Sierra de Chiva. Así, “Brihuela, las Salinas, el Prado Moreno, la Incolla y la Casa Manent constituyen, junto a los algarrobos y olivos centenarios, un paisaje que se destruiría sin remedio”, concluyen movimientos sociales y vecinos en el documento de alegaciones a “Campos de Levante”.

El 14 de marzo asociaciones, clubes y entidades locales celebraron la tercera marcha y concentración en el Llano de Brihuela contra el proyecto, que abarcaría “una superficie equivalente a 566 campos de fútbol”; además de un minuto de silencio, una performance reivindicativa (“Salvemos Brihuela”) y el acompañamiento musical de la dolçaina, en el acto se leyó un manifiesto suscrito por una treintena de colectivos, organizaciones ecologistas, ONG y sindicatos, que cuestionaba: “¿Qué calificación debemos dar a la total extinción de los cultivos tradicionales de secano, entremezclados con rodales forestales, barrancos y valladares?”; “¿Cómo se debe denominar el arranque de miles de árboles centenarios, de los que un porcentaje muy alto forman parte de la mayor concentración a nivel mundial de algarrobos monumentales?”

Imagen: Plataforma Sierra de Chiva o de los Bosques

Las 27 asociaciones que integran el movimiento organizaron a finales de febrero una concentración en la Plaza del Ayuntamiento de Chiva; subrayaron en el acto que hay actualmente siete peticiones para la instalación de plantas fotovoltaicas en Chiva (información también facilitada por la alcaldía en el pleno municipal de noviembre); la “fiebre del oro”, añadieron las organizaciones, afecta también a poblaciones vecinas como Cheste, Buñol o Godelleta. En la movilización del 21 de febrero, convocada en el mismo lugar, los colectivos resaltaron que entre los usos actuales de la sierra figuran las actividades deportivas, de naturaleza y ocio; y que la actuación de Falck Renewables implicaría “la pérdida de suelo cultivable que pasará a ser catalogado como ‘industrial’”.

Colectivos sociales, vecinos y empresas han presentado alegaciones contra el parque fotovoltaico ante el Ministerio para la Transición Ecológica; a ello se suman las 2.354 personas que firmaron la petición digital de la Plataforma para el Estudio y Conservación de la Sierra de Chiva –“La última dehesa valenciana arrasada con el arranque de miles de algarrobos centenarios”- dirigida al ministerio. Otra forma de difusión y denuncia son los vídeos grabados por personas y organizaciones, compartidos en las redes sociales con la consigna #ayudanosaevitarlo y #salvemosbrihuela.

Sobre las luchas populares en Chiva contra la megaplanta, la ONG Periféries estrenó el 9 de abril el documental de siete minutos titulado El camí del sol, accesible en el canal youtube. Pero no se trata de batallas aisladas; en febrero se constituyó la Alanza Energía y Territorio (ALIENTE), integrada por más de 80 entidades del estado español y 250 científicos que alertan, entre otros puntos, sobre “la proliferación de grandes industrias fotovoltaicas que amenazan amplias extensiones de áreas de cultivo, pastizales y estepas naturales de gran importancia”.

El Gobierno Valenciano declaró en 2010 la Sierra de Chiva Paraje Natural Municipal, con una superficie de 5.744 hectáreas. Según el Decreto del Consell, se trataba –en el momento de la declaración- del Paraje Natural Municipal más extenso del País Valenciano; la declaración reconoce entre otros valores la avifauna de la zona –especialmente las rapaces-, el entramado de barrancos y cordones montañosos o los picos de Santa María y de la Yerba, desde los que puede avistarse una parte considerable de la provincia de Valencia.

Cuestión diferente es el Decreto Ley aprobado el 7 de agosto por el Gobierno Valenciano (PSPV-PSOE- Compromís y Unidas Podemos), sobre medidas “para acelerar la implantación de instalaciones para el aprovechamiento de las energías renovables”; el Decreto dedica un apartado a los criterios para implantar centrales fotovoltaicas en zonas con protección ambiental; en el caso de los Parajes Naturales Municipales, establece que se determinará “caso por caso”; organizaciones en defensa del territorio han pedido al Consell que rectifique el decreto regulador por considerar que favorece el crecimiento de estas “instalaciones industriales” en suelo rural y forestal, en poblaciones del interior (lejos de los centros de gran consumo), y además no establece medidas cautelares suficientes.

El Ayuntamiento de Chiva respaldó por unanimidad, en el pleno ordinario del 24 de noviembre, una moción contra la megaplanta en el paraje presentada por 12 asociaciones del municipio y la comarca; así, el documento se posicionaba a favor del desarrollo de las energías renovables, pero “con la premisa de ocasionar el menor impacto posible”. Una pancarta en la fachada del consistorio también pone de manifiesto el rechazo a la planta al pie de la Sierra de Chiva.

La corporación municipal, que también presentó alegaciones ante el ministerio, está gobernada por Compromís y más Chiva; Izquierda Unida y Vecinos Independientes de Chiva. Diputados de Unidas Podemos en las Cortes Valencianas y el portavoz de Compromís en el Senado han pedido asimismo la paralización. Y la consulta popular convocada por el Ayuntamiento mostró un resultado claro: el 73% de los 586 participantes votó en contra de que la central se implante en los Llanos de Brihuela.

De las 17.821 hectáreas del término municipal de Chiva, el 92% tienen la calificación de “suelo no urbanizable”. El Ayuntamiento inició un proceso de participación ciudadana, finalizado en enero, para modificar la regulación de usos en el suelo de estas características; uno de los criterios incluidos en la consulta es la proximidad al Paraje Natural de la Sierra de Chiva. Esta propuesta de modificación del planeamiento urbanístico se halla actualmente en fase de tramitación.