«El ébola impulsa acciones de farmacéutica en la Bolsa», fue titular de noticias días atrás, al referirse a Tekmira Pharmaceuticals, una empresa canadiense que trabaja en un medicamento contra el virus, con financiación del Departamento de Defensa de EEUU. El ébola asesinó a más de 900 personas en África Occidental en el corriente año según […]
«El ébola impulsa acciones de farmacéutica en la Bolsa», fue titular de noticias días atrás, al referirse a Tekmira Pharmaceuticals, una empresa canadiense que trabaja en un medicamento contra el virus, con financiación del Departamento de Defensa de EEUU. El ébola asesinó a más de 900 personas en África Occidental en el corriente año según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que declaró el viernes el «estado de emergencia la de salud a nivel internacional».
Según el organismo, los fallecidos a causa del ébola ascendieron a 961; mientras que los casos de enfermos, probables y sospechosos ya sobrepasan los 1700. El brote se centró en África Occidental: Sierra Leona, con 717 casos; Liberia, 554; Guinea, 495 infecciones y al menos 13 en Nigeria.
El actual brote comenzó en diciembre del año pasado en Guinea, se acentuó en marzo y se expandió con rapidez inusitada, según la OMS. Luego, brindó una posible explicación: «sus sistemas de salud (de los países en epidemia) son frágiles y tienen importantes deficiencias en recursos humanos, económicos y materiales».
El viernes, el organismo declaró el estado de emergencia internacional de salud: «constituye un evento extraordinario y supone un riesgo de salud pública de otros estados», indicaron en el informe.
El ébola es uno de los virus más letales para el ser humano, con una tasa de mortalidad de entre el 25 y 90 por ciento, por las masivas hemorragias internas y externas que provoca. Los síntomas iniciales son fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, vómitos, diarrea y erupciones cutáneas.
El nombre del virus remite al rio homónimo en la República Democrática del Congo, donde se detectó por primera vez en 1976. Desde entonces, se despertaron diversos brotes epidémicos en Sudán, Kiwit, Gabón y Uganda: desde el primer caso en la década del setenta hasta el 2012, fallecieron por el virus 1590 personas, de 2387 infectados – 66,6 por ciento de mortalidad-.
Aún no hay cura alguna, sólo medidas preventivas para evitar el contagio o propagación que se da de modo rápido a través de contacto directo con sangre, líquidos orgánicos -saliva, sudor, orina, vómito- o tejidos de los infectados, incluso luego de que los infectados hayan fallecido.
Tekmira y el Pentágono
Tekmira Pharmaceuticals es una de las corporaciones farmacéuticas que está trabajando en un antiviral, para lo cual posee un contrato de 140 millones de dólares con el Departamento de Defensa de EEUU para desarrollar esos medicamentos, informó Global Research. Incluso recibiría financiamiento de la transnacional Monsanto, empresa dedicada a los agronegocios.
«El ébola impulsa a farmacéutica en Bolsa», tituló CNN en español el pasado 4 de agosto al referirse a las acciones de la canadiense Tekmira que crecieron en un 40 por ciento. «Los inversores esperan que el gobierno apruebe el uso del medicamento contra el virus», señaló la cadena de noticias.
Según ese artículo, la compañía podría ganar en el 2017 más de 100 millones de dólares por el fármaco TKM-ébola que desarrolla junto al Departamento de Sistemas de Biodefensa y Contraataque Médico Terapéutico de Estados Unidos (MCS-BDTX).
A su vez, días atrás la cadena CNN anunció que el gobierno estadounidense estaba probando un tratamiento para curar la infección: «el medicamento era desarrollado por la compañía biotecnológica con sede en San Diego, EEUU, llamada Mapp Biopharmaceutica, cuyo equipo científico trabaja con el ejército estadounidense en el Fort Detrick», detalló la periodista de RT, Karen Méndez.
El Fort Detrick es un centro de investigación biológica y de desarrollo de armas químicas, acusado de inocular virus como el VIH, Ébola, Peste bubónica, Antrax y Virus del Nilo Occidental, agregó RT. El gobierno de Estados Unidos, ha sido denunciado por numerosos casos de «bioterrorismo»: en Guatemala, Puerto Rico, Cuba y Corea del Norte, entre otros.
En paralelo, hay otras corporaciones químicas que se sumaron a la escalada por una cura: Sarepta, BioCryst, Fujifilm Holdings o Dyferos.
En ese marco, desde el Departamento de Defensa de EEUU enviaron representantes a los países de África Occidental a través del Centro de Control de Enfermedades Infecciosas (CDC) y anunciaron que los laboratorios de su país estaban luchando por «controlar el flagelo».
«Tenemos una larga historia en África a través del Pentágono, tanto en apoyo logístico como en el manejo clínico del virus», sostuvo el doctor y coronel del Ejército James Cummings, que dirige Global Emerging Infections Surveillance and Response System (GEIS), organismo de las Fuerzas Armadas.
Fuente original: http://www.noticiaspia.org/virus-del-ebola-emergencia-global-y-negocios-de-farmaceuticas-con-eeuu/