Igual se hacen un lío si no están muy puestos en el tema. Les informo en cinco líneas. El día 11S hay dos concentraciones-manifestaciones nacionalistas en .Cat, la segunda (que de hecho son seis o siete) es marcadamente independentista. La primera, que no está muy alejada de esa finalidad, se ha convocado por la mañana […]
Igual se hacen un lío si no están muy puestos en el tema. Les informo en cinco líneas.
El día 11S hay dos concentraciones-manifestaciones nacionalistas en .Cat, la segunda (que de hecho son seis o siete) es marcadamente independentista. La primera, que no está muy alejada de esa finalidad, se ha convocado por la mañana del mismo 11S en Sant Boi de Llobregat, donde hace 40 años se celebró -¡celebramos!, quina vergonya!- la primera convocatoria semilegal del 11S.
Les hablo ahora de otra concentración, la que se ha convocado el 9S, el viernes, no el domingo, en la Plaza Cataluña de Sant Boi, en el mismo escenario en que se celebró aquella diada de 1976, la que contó con la presencia de Miquel Roca (el defensor de la infanta Cristina; este señor, no otro), Jordi Carbonell (un líder independentista recientemente fallecido que en su momento fue presidente de ERC) y Octavi Saltor (que en 1976 representó los grupos de la oposición catalana de derecha-derecha no encuadrados en «organismos unitarios» por no querer «mancharse» con el PSUC y fuerzas afines). El cocinero del acto fue Miquel Sellarès, otro independentista de pro. Fue entonces cuando Jordi Carbonell, el orador que cerró el acto de 1976 y que representaba a la Assemblea de Catalunya, una coordinadora de fuerzas antifascistas que en absoluto era nacional-secesionista, pronunció una frase que el independentismo hizo suya poco después. Tomen nota porque toca profundamente el corazón nacional: «Que la paciencia no nos haga traidores».
Pues bien, esa misma frase prescriptiva e s el lema elegido por los organizadores para la convocatoria del viernes 9S. ¿Su finalidad? Como es evidente, la secesión, la ruptura del demos popular común. ¿Quiénes convocan? Tomen nota: ERC, CUP y… Podemos, ¡Podem .Cat!, además de CC.OO y UGT y otras fuerzas. El secretario general de Podem, Albano-Dante Fachín, será uno de los oradores. A la derecha española y a sus tertulianos se lo ponen mejor que a Fernando VII: las bolas están juntitas-juntitas. Dos sindicatos que se dicen obreros y una fuerza, que dice ser federalista cuando habla a las gentes en Jaén, Madrid o A Coruña , apoyan un acto secesionista, en el que intervendrán Anna Gabriel y Oriol Junqueras, con el lema indicado. Tal cual. Ni más ni menos… Por ahora.
La pregunta que parece imponerse: ¿qué izquierda transformadora se puede construir con estos mimbres? Conozco la respuesta; ustedes también.
Por lo demás: ¿qué significa eso de que la prudencia no nos haga traidores? ¿traidores a qué? ¿de qué prudencia hablan? ¿a quiénes se estarán refiriendo? No es difícil responder hablando en lenguaje menos alambicado: todos los no independentistas somos traidores a su país, a su patria, a su Cataluña, y también lo son de paso, según urgencias, todos aquellos independentistas, que siéndolo, están por vías u hojas de rutas más pausadas, menos precipitadas. Son demasiado «prudentes»; ellos, los independentistas de debò, son más cañeros. ¿A que todo es muy bonito, muy diverso, muy inclusivo, muy acogedor y nada sectario?
Que dos sindicatos de trabajadores como CC.OO y UGT convoquen a una concentración de estas características es prueba casi irrefutable del lodazal en el que están desde hace años, años y años, el mismo lugar donde quieren que todos nos ubiquemos. Pero no lo lograrán, aunque nos insulten y nos llamen traidores. ¿Qué Cataluña sectaria están defendiendo? ¿Qué tipo de República no democrática quieren construir?
El monotema lo abarca todo, revisa lo que estima necesario y contamina a todos o a casi todos. Así es «lo real» (su realidad) que diría Belén Gopegui.
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