Desde el 28 de agosto de 2008, el CNDP de Laurent Nkunda ha lanzado varias ofensivas contra las posiciones de las FARDC, violando de este modo el Acta de Compromiso por la paz que firmó en enero de 2008. Estos ataques han agravado la situación humanitaria en Nord-Kivu, ocasionando en particular el desplazamiento de 100.000 […]
Desde el 28 de agosto de 2008, el CNDP de Laurent Nkunda ha lanzado varias ofensivas contra las posiciones de las FARDC, violando de este modo el Acta de Compromiso por la paz que firmó en enero de 2008. Estos ataques han agravado la situación humanitaria en Nord-Kivu, ocasionando en particular el desplazamiento de 100.000 personas más. A fuerza de acumular sufrimientos y frustraciones, la población del este del Congo ha desarrollado sentimientos muy negativos e incluso ha manifestado su cólera contra la Monuc, porque no se siente protegida. La población duda de la sinceridad con la que la Monuc realiza su mandato y no cree en la eficacia de los Acuerdos de Goma.
EurAc sigue creyendo que los resultados de la Conferencia de Goma, con la firma el 23 de enero de 2008 de todos los protagonistas del Acta de Compromiso por la paz para el Nord y el Sud Kivu, permiten esperar una salida a la crisis. En efecto, con el Acuerdo de Nairobi de 9 de noviembre de 2007 entre Ruanda y el Congo sobre un enfoque común con respecto a la amenaza planteada a la estabilidad y seguridad en la región por los FADR y los Interahamwe, los Acuerdos de Goma parecerían un elemento indispensable de un proceso único.
Sin embargo, las hostilidades no han cesado jamás. Dos años después de las elecciones y ocho meses después de la firma del acuerdo de Goma, las milicias rebeldes continúan reclutando gente, incluidos niños. Una buena parte de los firmantes de los Acuerdos de Goma se enfrentan, roban y violan.
Con la degradación de la situación sobre el terreno, los Acuerdos de Goma y de Nairobi sufren una presión enorme que corre el riesgo de romper la ventana de oportunidades de enero y de aniquilar todo el proceso de paz.
A la vista de esta situación alarmante, los miembros de EurAc lanzan un llamamiento a la comunidad internacional, en particular a los Estados Miembros de la Unión Europea que son miembros del Consejo de Seguridad, con el fin de:
- Salvaguardar el marco de los Acuerdos de Goma y de Nairobi, porque no existen actualmente alternativas creíbles para resolver los conflictos de la región
En este sentido, EurAc solicita a los Estados Miembros de la Unión Europea que son miembros del Consejo de Seguridad que:
- Exijan un cese el fuego inmediato y el abandono de las posiciones recientemente conquistadas por el CNDP de Nkunda, el cual debe retirarse a sus posiciones de antes del 28 de agosto.
- Ejerzan una presión real (incluida una disuasión militar) sobre los firmantes de los Acuerdos de Goma y de Nairobi, y les acompañen en la concretización de sus compromisos.
- Ejerzan una presión real sobre Ruanda para que impida cualquier apoyo, procedente de su territorio, a Nkunda.
- Desbloqueen y faciliten los medios comprometidos con vistas a la puesta en marcha del Programa Amani.
- Sostengan acciones de vulgarización con la sociedad civil sobre el Proceso Amani para toda la población del Congo.
- Hacer eficaz y creíble la labor de la Monuc
EurAc estima que la Monuc sigue siendo un actor importante sobre el terreno y que tendrá a corto plazo un papel indispensable que desempeñar para proteger el proceso de paz y de democratización.
Por ello, EurAc solicita a los Estados Europeos que son miembros del Consejo de Seguridad que procuren que se levanten los bloqueos políticos que impiden a la Monuc ejecutar totalmente su mandato, tal como está definido por el Capítulo VII, contra las partes que no respeten los Acuerdos de Goma y de Nairobi y pasar a su desarme voluntario o forzado, en colaboración con las FARDC.
Como recordatorio, este mandato permite a la Monuc proteger a la población y le concede el derecho a imponer la paz, entre otros, mediante el desarme de las milicias rebeldes. La Monuc sólo lo ha hecho en un período muy breve en Ituri, después del asesinato de nueve cascos azules de Bangladesh en febrero de 2005.
Asimismo, para que la Monuc desempeñe un papel de manera creíble, es importante que:
- Controle los apoyos externos/internos que reciben los grupos armados en la RDC y desarrolle una estrategia adecuada para combatir el tráfico de armas transfronterizo.
- Se invista de una comunicación mucho más clara y eficaz sobre su mandato, sus objetivos, su funcionamiento y sus acciones.
- Disponga de efectivos bien formados, entrenados y equipados. El hecho de que determinados soldados de la ONU sean originarios de países en los que el ejército desempeña un papel problemático en el proceso de democratización disminuye la credibilidad de la Monuc.
- Mantenga tolerancia cero frente a cualquier comportamiento reprensible de su personal, sobre todo en los campos de la explotación sexual y el pillaje de recursos naturales, y que vele estrictamente por el respeto del código de conducta.
- Acelerar las reformas del sector de la seguridad (RSS) que son la espina dorsal de la seguridad duradera en la RDC
EurAc considera a las RSS como elementos claves en la rehabilitación del Estado congoleño y sus instrumentos, necesarios para la restauración de un Estado de derecho. Apela a los Estados Miembros de la Unión Europea que son miembros del Consejo de Seguridad para que:
- Refuercen la coherencia entre el enfoque europeo y el enfoque de la ONU en materia de RSS. EurAc urge la adopción de un plan único de acompañamiento por parte de la comunidad internacional para el restablecimiento de la seguridad en el Congo. Este plan debería fundarse en una visión a largo plazo, una división clara de las tareas y una complementariedad totalmente capitalizada entre la UE y la ONU. Un plan de retirada gradual de la Monuc a medio plazo debe inscribirse en este plan de acción a largo plazo.
- Refuercen los esfuerzos para el establecimiento de una policía creíble y para la rehabilitación de la justicia congoleña.
- EurAc urge a la Unión Europea y a sus Estados Miembros a que tomen en consideración, a la vista del estado precario en el que se encuentra el proceso de paz y a la vista de la situación humanitaria catastrófica, el despliegue a muy corto plazo de una misión militar para contribuir a la seguridad del este del Congo en complementariedad con la Monuc y las FARD.
Para obtener más información:
Kris Berwouts
Rue des Tanneurs, 165 B – 1000 Bruxelles, Bélgica
Tel: +32 (0)2 213 04 00
Móvil: +32 (0) 485 070 852