Los nuevos datos revelan que el método de análisis y tratamiento está teniendo un impacto significativo en la cantidad de personas que están accediendo al tratamiento contra el VIH. Después de que Uganda lo adoptase en 2017 y según datos gubernamentales, el número de hombres que ha comenzado por primera vez el tratamiento ha ascendido […]
Los nuevos datos revelan que el método de análisis y tratamiento está teniendo un impacto significativo en la cantidad de personas que están accediendo al tratamiento contra el VIH. Después de que Uganda lo adoptase en 2017 y según datos gubernamentales, el número de hombres que ha comenzado por primera vez el tratamiento ha ascendido de los 60 000 en 2016 a los 80 000 el año consecutivo. El número de mujeres que también comenzaron a tratarse por primera vez en este mismo período ha aumentado de 107 000 a 138 000 en total.
Asimismo, cabe destacar que la brecha en cuanto a tratamiento entre las personas que han sido diagnosticadas como seropositivas y las que han comenzado el tratamiento contra el VIH ha disminuido tanto para hombres como para mujeres en Uganda. La brecha masculina disminuyó un 45 %, de 33 000 en 2016 a 18 000 en 2017; la femenina se redujo en un 60 % en este mismo período, cayendo de las 48 000 a las 19 000. A pesar de que hay mayor número de mujeres que están dando más resultados seropositivos en las pruebas que los hombres, la brecha en materia de tratamiento contra el VIH se está atenuando tanto para ellos como para ellas.
Se han observado tendencias similares en Zambia tras comenzar la política de análisis y tratamiento en 2017. Zambia ha sido testigo del incremento en la cantidad de personas que han comenzado por primera vez el tratamiento contra el VIH: de 23 000 en el primer trimestre de 2016 a 45 000 en el último trimestre de 2017. Según fuentes estatales, se trataría de un aumento del 65 %.
Mediante el método de análisis y tratamiento, si alguien da seropositivo en las pruebas, deberá comenzar de inmediato el tratamiento contra el VIH. Antes de la llegada de este método, las personas que vivían con el VIH tenían que esperar a que su recuento de linfocitos CD4 cayese hasta un cierto nivel para comenzar el tratamiento.
Los efectos del análisis y del tratamiento se observaron después de la reciente creación de las llamadas «salas de situación» en Uganda y Zambia. Las salas de situación son plataformas software interactivas que centralizan los datos del VIH, entre otras enfermedades, para mejorar el seguimiento de estas afecciones y generar programas para que los servicios lleguen a más gente.