Sin la prefabricación de una crisis es muy difícil que el presidente estadunidense, George W. Bush, gane las elecciones de este año, planteó Michael T. Klare, experto en seguridad internacional, analista en temas de defensa y autor de diversos libros relacionados con el tema, quien consideró que dado lo anterior es posible que en los […]
Sin la prefabricación de una crisis es muy difícil que el presidente estadunidense, George W. Bush, gane las elecciones de este año, planteó Michael T. Klare, experto en seguridad internacional, analista en temas de defensa y autor de diversos libros relacionados con el tema, quien consideró que dado lo anterior es posible que en los próximos meses -de continuar la baja de la popularidad del mandatario- el mundo se vea enfrentado a otro conflicto bélico.
De acuerdo con Klare, la elección de noviembre será una de las más «dramáticas, brutales, amargas y duras que se vivan en Estados Unidos», porque el gobierno hará todo lo posible por mantenerse en el poder.
«Me temo que la administración Bush hará todo lo que tenga a su alcance para evitar una derrota. Muchos temen que pueda suceder algo grande, que pueda ocurrir accidentalmente o por diseño. Pienso que la actual administración va a prefabricar una crisis con Irán y posiblemente con Corea del Norte, para perpetuar esta atmósfera de miedo que se vive en Estados Unidos.»
Según el experto, «el presidente Bush sólo puede ganar en una atmósfera de miedo». Agregó que esta elección también será un «voto sobre el imperio», y acotó que el «proyecto imperial de Bush es anterior al 11 de septiembre. Si no hubiera sucedido el 11 de septiembre este proyecto habría sido rechazado por el pueblo estadunidense. Después de la crisis del 11 septiembre el pueblo abrazó este proyecto imperial, disfrazado de antiterrorismo».
Al participar en el foro Guerra y recursos naturales, organizado por Casa Lamm y La Jornada, Klare alertó que la historia de Afganistán y de Irak podría repetirse en Irán, pues Bush ha dado plazo a este país «hasta junio para poner en vigor las disposiciones de la Agencia Internacional de Energía Atómica de acabar con toda actividad que tenga que ver con armas nucleares y abrir todas sus instalaciones a la inspección inmediata».
Detalló que hasta el momento Washington ha negado a la Unión Europea intervenir en la negociación, por lo cual «temo que estemos entrando a una etapa prébelica con Irán». De acuerdo con el especialista, las razones de fondo del gobierno estadunidense para ahora ir tras Irán es que este país y su régimen islámico es un obstáculo para concretar su «plan de dominio» de la zona, y es por ello que viene la excusa de las armas.
Por su parte, John Saxe-Fernández, miembro del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México, coincidió con Klare en que los avances militares de Estados Unidos están íntimamente relacionados con la apropiación de los recursos naturales; «no por nada invadió Irak, que es la segunda reserva del mundo de petróleo». Agregó que la intención de acabar con el régimen cubano también tiene algo de relación con el crudo que se encuentra en las cercanías de la isla, en las profundidades del mar.
Klare, quien en su libro Guerras por los recursos asevera que en la medida en que los recursos naturales escaseen, los conflictos bélicos seguirán la tendencia opuesta, pues ellos «conferirán poder y riqueza» a sus poseedores y, por tanto, la paz y la estabilidad mundial estarán en riesgo en muchas regiones.
Según Klare, en los escenarios venideros no sólo se mezclarán las luchas por el agua, el petróleo y el gas natural, muchas de las cuales ya se dan en el presente, sino que también se incubarán conflictos relacionados con minerales, piedras preciosas y maderas para construcción, adicionados con problemas étnicos y políticos.