La mayor representación de drama teatral del planeta es la Asamblea General de la Organización de las Naciones ¿Unidas? Del 24 al 30 de septiembre ha tenido lugar la número 69. La mayoría de los asistentes ha salido a escena, ha echado su talk, y regresado a sus países, sobre todo los actores que no […]
La mayor representación de drama teatral del planeta es la Asamblea General de la Organización de las Naciones ¿Unidas? Del 24 al 30 de septiembre ha tenido lugar la número 69. La mayoría de los asistentes ha salido a escena, ha echado su talk, y regresado a sus países, sobre todo los actores que no pesan en las resoluciones de la asamblea.
Siempre resulta útil, sin embargo, oír cómo está el mundo según los más poderosos, cuáles dicen que son sus propósitos, y cómo dicen que ven a los otros, nosotros los extraños. Ya se sabe que Estados Unidos (EU) dice una cosa, pero hace otra y que la legalidad internacional se llama America, usurpando el nombre de todo el continente. Los poderosos hablan de sus propios intereses, aunque aplasten a veces brutalmente los intereses de los «extraños».
¿Importa que diga Nauru o Saint Kitts and Nevis, los dos más pequeños países del mundo que se administran a sí mismos?; tampoco importa lo que digan varias decenas más, mayores en territorio y población que los dos mencionados que, con frecuencia, ni presentes están en tales asambleas. Importan los 12 países fundadores asociados en la OTAN en 1949 -con EU al mando- y Alemania que se sumó en 1958 y extendió su participación con la extinción de la República Democrática Alemana en 1990; importan mucho menos los que se sumaron en 1952 (Grecia y Turquía), y España que se añadiría en 1982. Importa China, Japón, Australia…
Por motivos imperiales, cuentan los países con los que la OTAN (o por mejor decir, Estados Unidos), comenzó a crear un cerco en torno a la exánime Rusia, al derrumbarse la URSS. Primero con Hungría, Polonia y Chequia en 1999; y a partir de 2004, con países que habían formado parte de la URSS: Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Letonia, Lituania, Rumania, y en 2009 Croacia y Albania. En 2014 habría seguido, sin más, Ucrania, pero Rusia se había fortalecido lo suficiente económica y, sobre todo, militarmente, como para dejar que el ahorcamiento geopolítico continuara sin más. Las condiciones históricas permitían que Crimea se sumara a Rusia porque el territorio de Crimea había sido ruso y sus pobladores son rusoparlantes.
Esto resultó un insulto para el imperio: Rusia simplemente tendría que haber dejado que el cerco continuara: la arrogancia imperial se convirtió en (dudosas y conflictivas) sanciones para Rusia.
Pero Obama que vive en el planeta Obama (a partir de 2016 este planeta mudará de nombre), dijo en su insensato discurso inaugural en la asamblea de la ONU referida que, en el que vivimos, «¡es el mejor momento de la historia mundial!»
Bien, cuando la amenaza de los yihadistas del Estado Islámico crece día a día, el brote del ébola podría afectar a casi un millón y medio de personas en enero, y Ucrania, Siria y Gaza están desgarradas por los conflictos armados, para el líder estadunidense vivimos «el mejor momento de la historia mundial».
Lo dijo minutos después que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, había asegurado en la apertura de la asamblea que los derechos humanos están siendo atacados en todo el mundo y, refiriéndose a las crisis y conflictos en Siria e Irak, Gaza, Ucrania, Sudán del Sur y la República Centroafricana, sentenció: «Ha sido un año terrible para los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas. Desde bombas improvisadas a decapitaciones, desde hambrunas forzadas de civiles al ataque de hospitales, refugios y convoyes de la ONU, los derechos humanos y el estado de derecho están bajo ataque», indicó Ban.
Obama hablaba de otro planeta, uno hecho de perlas como esta otra: EU seguirá siendo una potencia «que promueve la paz y la estabilidad». Agregó inmediatamente: «El único lenguaje que entienden los asesinos es el lenguaje de la fuerza». Sí, es el lenguaje que habla EU. El premio Nobel de la Paz 2009 tiene presente que en menos de seis años ha bombardeado siete países: Afganistán, Yemen, Irak, Pakistán, Somalia, Libia y Siria, en algunos casos acompañado de sus aliados.
Por cierto, no es sorprendente lo que Bahaa al Araji, un viceprimer ministro iraquí, dijo a The New York Times: «Sabemos quién ha creado Daesh» (una abreviatura árabe para el Estado Islámico, EI): la campaña militar de Estados Unidos contra el EI no aplaca las sospechas que circulan en las calles de Bagdad, así como en los más altos niveles del gobierno: la CIA está detrás de los extremistas del EI.
Nunca EU había estado tan en vitrina. El trabajo de Snowden y Assange ha sido difundido profusamente. El nuevo libro de Udo Ulfkotte, ex periodista alemán con 17 años de experiencia, revela la práctica extendida de la compra de numerosos medios alemanes por parte de EU y la OTAN para promover la agenda antirrusa, y se ha convertido en un éxito de ventas.
Mijail Gorbachov, en declaraciones a la emisora rusa Russkaia Sluzhba Novostei, dijo: Lo de Obama «ni intenta siquiera ser un diálogo político, sino un regaño. Es para ofender, provocar y, lo más importante, para que no disminuyan las discordias en Europa. Porque ellos reivindican un monopolio. Ucrania y otras cosas son sólo excusas».
Un sentido adiós a Raúl Álvarez Garín, con significados que seguirán vivos gracias a luchadores como él. Un abrazo fraterno y entrañable para María Emilia.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2014/09/30/opinion/021a1pol