China elaborará políticas encaminadas a acelerar la transferencia de tierras rurales como parte de los esfuerzos por mejorar la eficiencia y promover la agricultura comercial a gran escala, dijo el jueves el Gobierno. En el «documento número uno» del Gobierno central para 2013, centrado en la modernización del enorme sector agrícola, se asegura la concesión […]
China elaborará políticas encaminadas a acelerar la transferencia de tierras rurales como parte de los esfuerzos por mejorar la eficiencia y promover la agricultura comercial a gran escala, dijo el jueves el Gobierno.
En el «documento número uno» del Gobierno central para 2013, centrado en la modernización del enorme sector agrícola, se asegura la concesión de más subsidios a los grandes terratenientes, granjas familiares y cooperativas rurales durante este año.
El «documento número uno» es un indicador clave de las prioridades políticas y se ha centrado en temas rurales durante cada año desde 2003.
«El desarrollo del sector rural de China ha entrado en una nueva etapa junto con la profundización de la industrialización y la urbanización», dijo el texto publicado por la agencia oficial de noticias Xinhua.
El documento coloca la seguridad del suministro de cereales y productos agrícolas en lo más alto de la lista de prioridades, en un momento en el que China busca impulsar la producción debido a un aumento de los niveles de urbanización e industrialización.
El traslado a las ciudades de más de 200 millones de trabajadores migrantes ha reducido la mano de obra rural y ha aumentado la demanda de alimentos, dando lugar a una creciente dependencia de las importaciones.
El Gobierno continuará apoyando los precios agrícolas internos mediante un incremento de las reservas estatales, dijo el documento. La política ha hecho que los precios internos se sitúen en niveles muy superiores a los precios internacionales, lo que requiere aún más estrictas regulaciones a las importaciones.
El Ejecutivo seguirá comprando y almacenando maíz, soja, colza, algodón y azúcar, así como fortaleciendo los aranceles de importación y un sistema de cuotas, según el documento, que no entregó más detalles.
El Gobierno además reforzará la vigilancia sobre las importaciones de productos agrícolas «sensibles» y acabará con el contrabando, agregó el documento.