La Brigada Médica Cubana en Gambia, está eternamente agradecida y muy orgullosa de la increíble labor de nuestros colegas que brindan los servicios de salud y combaten la pandemia en la mayor de las Antillas.
Hoy el mundo vive uno de los momentos sanitarios más difíciles de la historia de la humanidad, el personal de la salud está marcando una página de gloria, sacrificio, altruismo y solidaridad, un derroche de humanismo y consagración a la más noble de las tareas; salvar vidas, derrocando a la muerte.
Enfrentan la pandemia como grandes valientes, corajudos, no porque no tengan miedo, sino porque saben en sus manos está la vida de nuestras familias, hermanos, padres, tíos, amigos, porque su amor, su pasión por la profesión que ejercen va más allá de los temores, de las dificultades, las carencias y falta de equipos y medicamentos para brindar el servicio de excelencia que nuestra valiosa población merece.
Como dice nuestro himno nacional, no le temen a una muerte gloriosa porque morir por la patria es vivir.
Con extremo orgullo observamos esos jóvenes doctores que corren al pedido de ayuda, sin escatimar tiempo, ni cansancio, que hacen todo lo que esté en sus manos por cooperar y consolar la familia.
Que bueno es poder contar con ustedes, hijos de nuestros amigos, de nuestros hermanos, que hoy emergen como hombres de bien, hijos de una patria que los contempla orgullosa.
Son muchos los impedimentos que el genocida bloqueo EE.UU. ha impuesto a la isla más solidaria del universo, para salvar a nuestro pueblo de esta exterminadora pandemia, pero nada detiene a estos héroes, que desgastados por el cansancio, siguen adelante sin perder el aliento y el deseo de ayudar y aliviar sufrimientos.
Por todo lo antes expuesto y porque todos sentimos en lo más profundo lo que han hecho hasta ahora y siguen haciendo, Médicos, enfermeras, tecnólogos, ingenieros, personal de servicio, estudiantes de las ciencias médicas y de otras universidades, en fin todo ese ejército de guerrilleros heroicos que batalla incansablemente por la victoria, merecen todo nuestro respeto, admiración, consideración y amor, la deuda con ustedes es eterna, agradecidos por siempre. ¡¡¡Vencerán!!!
María Inés Álvarez Garay. Profesora y colaboradora de la Brigada Médica Cubana en Gambia.