El gobierno de Comoras ha anunciado que próximamente iniciará una invasión militar en Anjuán para recuperar el control de la isla. «Es un asunto de días», han advertido las autoridades. «La posición del gobierno es movilizar al ejército y restablecer el orden. No hay alternativa», dijo Abdoulrahime Said Bacar, ministro de educación y portavoz del […]
El gobierno de Comoras ha anunciado que próximamente iniciará una invasión militar en Anjuán para recuperar el control de la isla. «Es un asunto de días», han advertido las autoridades. «La posición del gobierno es movilizar al ejército y restablecer el orden. No hay alternativa», dijo Abdoulrahime Said Bacar, ministro de educación y portavoz del gobierno de la Unión, a la agencia de Naciones Unidas IRIN.
El complejo sistema electoral del archipiélago de las Islas Comoras dota a cada una de sus islas de un gobierno semiautónomo y un presidente propio. El gobierno de la Unión que agrupa a las islas de Anjuán, Gran Comora y Moheli, posee una presidencia rotatoria.
El conflicto entre las autoridades de Anjuán y de las otras dos islas del archipiélago situado en el Océano Índico ha persistido desde las elecciones individuales celebradas en junio de 2007 en Anjuán.
Denunciando irregularidades e intimidación en la preparación de los comicios, la Unión Africana (UA) y el gobierno de la Unión aplazaron las elecciones en Anjuán, pero el presidente de la isla Mohamed Bacar imprimió sus propias papeletas, celebró las elecciones y proclamó una gran victoria con el 90 por ciento de los votos.
Ni Mohamed Bacar, ni el gobierno de la Unión de Comoras, que exige nuevas elecciones, se muestran dispuestos a un diálogo. Los esfuerzos de la UA para negociar una solución al problema han fracasado.
Según Abdoulrahime, los soldados del gobierno de la Unión se han congregado en la isla de Moheli «como el último paso para el restablecimiento del orden por medio de la fuerza militar. Va a ocurrir en cuestión de días».
El coordinador de Naciones Unidas e Comoras, Opia Kumah, dijo que el gobierno había pedido a la comunidad internacional que «asegurara o sacara» a su personal de Anjuán.
«Hemos intentado restablecer el orden en la isla de muchas formas para lograr una transición pacífica hacia la democracia», dijo Abdoulrahime. «Tuvimos conversaciones con la comunidad internacional, la UA, pero la respuesta de Bacar siempre ha sido no. También lo hemos intentado por medio de sanciones para presionar, pero ellos continúan desafiantes y arrogantes», añadió Abdoulrahime.
Un comunicado lanzado por la UA la pasada semana expresaba que «el Consejo decide extender por un periodo adicional de un mes las medidas contra las autoridades ilegales de Anjuán».
«Se impusieron primero 45 días de sanciones, que se extendieron a 60, pero no ha cambiado nada. Ahora la UA ha añadido otros 30 días pero el pueblo está cansado. La gente ha mostrado su apoyo a la operación. Muchas personas ya han salido de Anjuán y se han dirigido a Moheli y a Gran Comora, alrededor de 2.500 personas».
Una fuente diplomática en Moroni, la capital nacional de Gran Comora, dijo a IRIN que la Unión estaba muy presionada por la población y «parece que están muy decididos a llevar a cabo la operación».
«El ejército está bien preparado. Queremos organizar elecciones», subrayó Abdoulrahime.
«La primera vez que el ejército vino (1997), les echamos. La segunda vez (mayo de 2007), les echamos. Eso quieres decir que si intentan venir por tercera vez, les echaremos», dijo Mohamed Bacar en una reciente entrevista concedida a IRIN. Bacar llegó al poder tras un golpe de estado en 2001, y dirige a una bien preparada fuerza armada de gendarmes.
Comoras ganó la independencia de Francia en 1975, después de más de 130 años de gobierno colonial. En las tres últimas décadas, el archipiélago ha permanecido en medio de la inestabilidad política y ha sido escenario de 19 intentos de golpe de estado.