El presidente Ricardo Lagos le espetó a la secretaria de estado norteamericana Condoleezza Rice que convenía bajar el nivel de la retórica con respecto a Venezuela en el transcurso de una rueda de prensa conjunta. «A veces es bueno bajar un poquito la retórica que respecto a Venezuela hay», dijo el presidente chileno. Diferentes analistas […]
El presidente Ricardo Lagos le espetó a la secretaria de estado norteamericana Condoleezza Rice que convenía bajar el nivel de la retórica con respecto a Venezuela en el transcurso de una rueda de prensa conjunta.
«A veces es bueno bajar un poquito la retórica que respecto a Venezuela hay», dijo el presidente chileno. Diferentes analistas han comentado que la reacción de Lagos evidencia un alto nivel de dignidad del gobierno chileno ante Estados Unidos poco frecuente en América Latina y menos en Chile. No es habitual en una rueda de prensa conjunta de dos altos cargos de diferentes países que éstos se desautoricen, menos todavía si es al Secretario de Estado norteamericano.
Rice llegó el jueves a Chile para una visita de un día para asistir a la Conferencia de las Comunidades Democráticas, de la que Estados Unidos y Chile son algunos de sus fundadores, reseñó AP.
Al término de una reunión de casi una hora, Lagos y Rice ofrecieron una rueda de prensa en la que el mandatario chileno afirmó que de sus conversaciones con el gobernante venezolano y sus detractores deduce que hay un mandatario legítimamente elegido y que la oposición «tiene que estar a la altura de lo que sus desafíos para poder cumplir con el rol de una oposición adecuada».
Lagos informó que está trabajando con Brasil y otros países para tener una política adecuada hacia Venezuela «para no exacerbar los ánimos».
Lagos dijo que en la reunión con Rice «algo también conversamos» de la próxima elección de secretario general de la Organización de Estados Americanos, OEA, donde en las primeras dos rondas no se pudo elegir al nuevo secretario general por el empate a 17 votos entre el canciller mexicano Luis Ernesto Derbez y el ministro del Interior chileno José Miguel Insulza.