El 13 de agosto de 1926, en Birán, antigua provincia cubana de Oriente, nace un hombre digno de enorme personalidad, el más emblemático, trascendente y destacado de todo el siglo XX y XXI. Fidel Alejandro Castro Ruz.
Líder revolucionario que transformó positivamente la vida de millones de personas, no solo en Cuba sino en el mundo.
La sencillez, lealtad, honestidad, solidaridad, humanismo y coraje, son algunos de sus más grandes valores, sus dotes personales de audacia, fuerza y valor, su gran preocupación de auscultar siempre la voluntad del pueblo, su fe inmensa en el futuro, su gran visión para prevenir los acontecimientos y anticiparse a ellos, lo llevaron al lugar de honor que siempre ocupó en el pueblo cubano.
Nuestro eterno comandante se convirtió en el paradigma de todos los cubanos dignos, en el faro que guía e ilumina el sendero de la verdad , la justicia, la solidaridad y el humanismo.
El 5 de junio de 1989 en el acto de inauguración de las obras de ampliación del Hospital Clínico Quirúrgico «Joaquín Albarrán», en La Habana Fidel expresó que » en vez de invertir tanto en el desarrollo de armas cada vez más sofisticadas, los que tienen los recursos para ello debieran promover las investigaciones médicas y poner al servicio de la humanidad los frutos de la ciencia, creando instrumentos de salud y de vida, y no de muerte».
De esta manera creó un ejército pacifico de profesionales de la salud, capaces, altamente preparados , que herederos de sus ideas, sus valores, convicciones y altruismo, hoy se encuentran diseminados por el mundo salvando vidas y derrotando a la muerte, haciendo patente sus palabras:
«A los médicos, a las enfermeras, a los técnicos, hay que pedirles que atiendan a cada uno de los pacientes como si fuera su hijo, como si fuera su hermano, como si fuera su esposa, como si fueran sus padres. Es así, con ese sentimiento. Y no solo de padres o de hijos, o de esposa o de hermanos, sino de buen padre, buen hijo, buena esposa o buen esposo, y buen hermano».
Querido Comandante en jefe Fidel , hoy a 95 años del día que llegaste a este mundo para iluminarnos con tu sabiduría, los miembros de la Brigada médica cubana en Gambia te ratificamos nuestro compromiso de ser fieles seguidores de tus ideas, de atender a la población gambiana como nuestra familia , que desde el lugar donde estés sientas orgullo de tu obra y de todo el bien que le has proporcionado a la humanidad.
Los agradecidos te recuerdan y te veneran como el hombre cabal que fuiste y que vive eternamente en los corazones de miles de seres humanos que bendicen tu existencia.
A tu lado por siempre comandante. ¡Patria o Muerte, Venceremos!