El Gobierno de Sudán y un importante grupo rebelde de Darfur firmaron ayer una tregua y un acuerdo para iniciar negociaciones de paz directas, en un momento considerado clave para el presidente sudanés, Omar el-Beshir, ante la proximidad de las elecciones, pero que no supone una garantía de fin del conflicto. «Acabamos de firmar el […]
El Gobierno de Sudán y un importante grupo rebelde de Darfur firmaron ayer una tregua y un acuerdo para iniciar negociaciones de paz directas, en un momento considerado clave para el presidente sudanés, Omar el-Beshir, ante la proximidad de las elecciones, pero que no supone una garantía de fin del conflicto.
«Acabamos de firmar el acuerdo-marco con el Gobierno sudanés», declaró a France Presse por teléfono desde N’Djamena Ahmed Hussein, portavoz del Movimiento para la Justicia y la Igualdad (JEM), uno de los dos principales grupos rebeldes de Darfur.
Este acuerdo establecerá el marco de las negociaciones de paz directas entre el JEM y Jartum que se celebrará en Doha. «Debatiremos sobre el reparto de la riqueza, del reparto del poder, del retorno de los refugiados, de la compensación [para las víctimas del conflicto] y de los presos», indicó Hussein.
Este acuerdo-marco aún debe ser suscrito el martes en Doha en presencia de El-Beshir y del presidente chadiano, Idriss Deby, quienes recientemente alcanzaron el compromiso de acabar con cinco años de guerra mediante grupos rebeldes interpuestos.
Las negociaciones de paz de Doha podrían desembocar en «un acuerdo final que se firmaría antes del 15 de marzo», precisó la Presidencia chadiana en un comunicado.
El JEM y el Gobierno sudanés han firmado también un alto el fuego que debe entrar en vigor inmediatamente, indició el dirigente rebelde. El-Beshir, asimismo, anunció la anulación de las penas de muerta promulgadas contra 105 miembros del JEM, durante un discurso en Jartum.
Los rebeldes del JEM lanzaron en mayo de 2008 un ataque contra Omdurman, ciudad situada frente a Jartum, en la orilla izquierda del Nilo, pero fueron rechazados por las fuerzas gubernamentales tras violentos combates que se saldaron con 200 muertos.
El-Beshir también anunció ayer la próxima liberación de presos del JEM, una decisión aplaudida por el movimiento rebelde islamista.
Sin embargo el Ejército de Liberación de Sudán de Abdelwahid Nur (SLA-Abdelwahid), un líder laico de la tribu fur -de donde se deriva el nombre de Darfur (Casa de los fur)-, rechazó sumarse al proceso de Doha.
La situación que se vivía ayer en Jebel Marra, la zona controlada por el SLA-Abdelwahid, era muy tensa después de una semana de combates entre este grupo y las fuerzas progubernamentales.