Según unas declaraciones recogidas por la agencia oficial del Consejo Nacional de Transición (CNT) libio, WAL, Al-Alagui ha subrayado que «la ley libia aclara la competencia de los jueces libios en el procesamiento de sus ciudadanos». Asimismo, el ministro ha comentado que en la reunión con el fiscal general de la CPI, Luis Moreno Ocampo […]
Según unas declaraciones recogidas por la agencia oficial del Consejo Nacional de Transición (CNT) libio, WAL, Al-Alagui ha subrayado que «la ley libia aclara la competencia de los jueces libios en el procesamiento de sus ciudadanos».
Asimismo, el ministro ha comentado que en la reunión con el fiscal general de la CPI, Luis Moreno Ocampo han intercambiado sus opiniones sobre el procesamiento de Al-Islam, detenido en el sur del país el pasado día 19.
El fiscal general de la CPI, se ha reunido con el primer ministro interino libio, Abderrahim al-Kib, para tratar dónde serán procesados tanto Al Islam, como el ex jefe de los servicios secretos, Abdalá al-Senusi, sobre quienes pesa una orden de detención del tribunal internacional por posibles crímenes de lesa humanidad.
Por su parte, Moreno Ocampo ha declarado que si las autoridades libias desean realmente juzgar en su país al hijo de Gadafi, el propio Tribunal de La Haya podría «ayudarles a hacerlo» siempre y cuando se permita la participación de los jueces de la CPI en el proceso.
«Saif al Islam ha sido capturado y por ello estamos aquí, para garantizar nuestra cooperación», ha afirmado. «En mayo solicitamos una orden de arresto porque los libios no estaban en condiciones de impartir justicia en Libia», ha señalado.
«Si el objetivo de los libios es que se haga justicia en el país, nosotros les ayudaremos a hacerlo, ése es el método», ha asegurado Moreno Ocampo ante los periodistas a su llegada a la capital libia.
«El Tribunal Penal Internacional actúa cuando el sistema nacional no puede actuar», ha explicado. «Ahora han decidido actuar y es por ello que estamos aquí, para oírles y saber qué están haciendo y para cooperar», ha aclarado.
«La ley concede la primacía al sistema nacional de justicia. Si ellos deciden llevar a cabo los procesos en el país, nosotros discutiremos con ellos sobre cómo formar a los jueces y sobre cómo se deben efectuar los juicios, pero, en todo caso, nuestros jueces deben estar involucrados», ha precisado.
Las autoridades libias han asegurado que Saif al Islam tendrá un juicio justo, pero el código penal del país prevé la pena de muerte, mientras que la pena máxima del TPI es la cadena perpetua. Un responsable del CNT en Zintan, Ahmed Ammar, ha explicado a Reuters que un fiscal libio se reunió ayer con Saif al Islam para llevar a cabo las primeras instrucciones.